La Jornada 29 de enero de 1997

Madrazo: la certificación ``no ayuda a nadie''

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 28 de enero Ť Durante su primera visita oficial a Estados Unidos como procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar discutió los temas de narcotráfico, lavado de dinero, extradiciones y el problema de la demanda de drogas en este país con su contraparte estadunidense, Janet Reno, a quien le señaló que el proceso de certificación ``no ayuda a nadie''.

El procurador Madrazo arribó a esta capital la noche del lunes y comenzó su primer día de trabajo con un desayuno con el embajador Robert Gelbard, secretario adjunto de Estado para asuntos internacionales de narcóticos. Más tarde se reunió con el comisionado de Aduanas, George Weiss; el administrador general de la agencia antinarcóticos (DEA), Thomas Constantine, y con el director de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas de la Casa Blanca, general Barry McCaffrey.

Un alto funcionario de la administración del presidente Bill Clinton informó que la principal anfitriona de la gira de dos días es Reno, y la procuradora general ofreció este martes una comida en honor de su contraparte mexicana.

El Departamento de Justicia de Estados Unidos informó esta tarde que Reno y Madrazo reconocieron la continua mejoría de las relaciones bilaterales en torno a asuntos de seguridad pública y cuestiones judiciales, e hicieron planes para actividades conjuntas a futuro, ``en particular sobre temas antinarcóticos y de fugitivos''.

En un comunicado se añade que los dos funcionarios acordaron que existía la necesidad de incrementar los recursos destinados a la lucha contra el crimen organizado nacional y trasnacional.

La embajada de México informó, también en un comunicado emitido esta noche, que durante la sesión de trabajo con Reno, ``el procurador Jorge Madrazo reiteró la voluntad del gobierno de México de fortalecer la cooperación en materia de asuntos legales, tales como extradiciones, asistencia jurídica mutua, ejecución de sentencias penales, capacitación a fiscales mexicanos y estadunidenses, y análisis del funcionamiento de los sistemas jurídicos de ambos países''.

El procurador subrayó que el presidente Ernesto Zedillo ha definido la lucha antinarcóticos como una alta prioridad, y opinó que el Grupo de Contacto de Alto Nivel ha mejorado la cooperación en torno a estos asuntos. Según la embajada, Madrazo también señaló que la incorporación de un enfoque sobre el problema de la demanda y el consumo de drogas ha ayudado a mejorar el diálogo bilateral.

En sus reuniones con Reno, Madrazo también tocó el tema del proceso de certificación que el gobierno de Estados Unidos realiza anualmente para evaluar la cooperación de países en la lucha contra las drogas.

De acuerdo con la embajada mexicana, el procurador indicó ante Reno que tal proceso ``no ayuda a nadie, porque ni México ni Estados Unidos son el enemigo. Las drogas son el enemigo real a enfrentar''. Madrazo añadió que ``lo importante es la cooperación recíproca, no la recriminación mutua''.

En su reunión con Constantine, jefe de la DEA, el procurador Madrazo dijo que ha informado al pueblo de México que sus prioridades son la detención de los dirigentes de los cárteles e impedir que los pequeños narcotraficantes crezcan y se consoliden. Al mismo tiempo, subrayó que México está comprometido a fortalecer la cooperación en un contexto de respeto a las respectivas jurisdicciones y soberanías nacionales.

El zar antidrogas de la Casa Blanca, Barry McCaffrey, ofreció una cena para el funcionario mexicano y la delegación que lo acompaña. Entre sus integrantes están el subsecretario para Asuntos Bilaterales de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Juan Rebolledo; el embajador de México en Estados Unidos, Jesús Silva Herzog; el subprocurador Jurídico y para Asuntos Internacionales de la PGR, Eduardo Ibarrola, y el general Jesús Gutiérrez Rebollo, director del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas.

Rebolledo acompañó a Madrazo en la mayoría de sus reuniones de este día, pero también se entrevistó por separado con el secretario asistente de Defensa, Jan Lodell. Un vocero del Pentágono calificó esta reunión de ``encuentro productivo''