Llama García Sáinz a interponer amparos contra la nueva ley La legislación, eje para desmantelar la seguridad social, aseguró
Judith Calderón Ť El ex director del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Ricardo García Sáinz, exhortó a los dirigentes sindicales a unir fuerzas en el Frente de Defensa de Seguridad Social Solidaria, e interponer amparos contra la nueva ley que busca ``el desmantelamiento de la seguridad social''.
Ante delegados de 25 sindicatos que participaron en el Encuentro Sindical Nacional, García Sáinz sostuvo que la nueva ley del IMSS representa ``una pieza fundamental para desmantelar el estado de bienestar'', y termina con el carácter solidario, público y obligatorio que se marca a la seguridad social en la Constitución Política mexicana.
El ex funcionario coincidió con los representantes del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS), Fernando Rocha Larráinzar y Salvador García Cano, y de la Confederación Obrera Revolucionaria (COR), en que es urgente dar marcha atrás en las modificaciones que los diputados del partido en el poder impusieron ``desde su aislamiento'' a la citada ley.
Entrevistado al finalizar su exposición, García Sáinz señaló que hay dos caminos para evitar que entren en vigor los cambios a la legislación: uno es elaborar un nuevo proyecto de reforma que sea sometido al Congreso de la Unión y sustituya a la que ya se aprobó.
El segundo camino, manifestó, es que los organismos sindicales interpongan amparos que ya están elaborando algunos juristas, porque la legislación aprobada es ``ilegal e inconstitucional''.
Los cambios realizados, argumentó, contradicen a la Constitución porque la seguridad social pierde su carácter colectivo para convertirse, con la creación de las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores), en un mecanismo de seguridad individual.
En su ponencia titulada La reforma de la reforma, García Sáinz aseguró: ``El diferimiento de la entrada en vigor de la nueva ley nos obliga a recordar que estamos siendo testigos impasibles del desmantelamiento de la seguridad social''.
No obstante, opinó que aún hay tiempo para echar atrás esas modificaciones.
Explicó que el 28 de octubre el Congreso de la Unión recibió una iniciativa de decreto, difiriendo para el primero de julio de l997 la entreda en vigor de la nueva ley del IMSS y del SAR, y que la verdadera causa es la imposibilidad de cumplir con el primer abono del compromiso presupuestal que impone la reforma para liberar los recursos necesarios que deben entregarse a las Afores.
La transferencia en la rama de enfermedades generales y de maternidad hubiera representado en l997 la entrega de 10 mil millones de pesos, dijo.
Hizo un llamado urgente para revitalizar al instituto con recursos extraordinarios que permitan restablecer su modelo de atención.
García Sáinz sumó, a las desventajas de los cambios en puerta, que se excluye a los grupos campesinos y no aumenta la capacidad en guarderías, que actualmente sólo cubre a la décima parte de las madres con derecho a su disfrute.
Retroceso histórico
Fernando Rocha Larráinzar, secretario del Interior del sindicato del IMSS, advirtió que no es posible garantizar con los mismos montos un servicio de calidad ni se otorgarán los beneficios a que tienen derecho los asegurados y sus familiares.
Mencionó que otro obstáculo es la obsolescencia tecnológica, que exige inversiones en material y equipo para continuar con el nivel de atención que necesitan los derechohabientes.
Durante su exposición, el dirigente sindical argumentó que la nueva legislación significa un retroceso histórico porque avala la pérdida de derechos adquiridos. Como ejemplo mencionó que para obtener la pensión por vejez, la cotización se incrementó de 500 a mil 250 semanas. En el caso de la pensión por invalidez, las aportaciones se aumentaron de 150 a 250 semanas.
Añadió que tampoco se asegura el crecimiento en el presupuesto para maternidad, porque sólo se elevará de 38 mil 500 millones de pesos a 39 mil millones, lo que significa un incremento de tan sólo l.3 por ciento.
Por su parte, el asesor de la Federación de Organizaciones Sindicales de México (FOSM), Carlos López Angel, planteó en su ponencia el ``rechazo contundente'' a la nueva reforma de la seguridad social, ``ya que está en función de los intereses de los capitales privados''.
Asimismo, propuso la construcción de una alternativa que reoriente la redistribución del ingreso y rescate el ahorro social, para reactivar la economía en beneficio del país.
La sesión en esta mesa de trabajo continuará llevándose a cabo mañana con los temas: calidad de vida y condiciones de trabajo, reforma de la seguridad social y análisis de las propuestas de reforma a la legislación laboral.