Solicitan arraigar a Chapa Bezanilla
Juan Manuel Venegas y Roberto Garduño E. Ť La Procuraduría de Justicia del Distrito Federal solicitó el arraigo domiciliario del ex fiscal Pablo Chapa Bezanilla, a fin de que se presente a declarar sobre el origen de la osamenta de El Encanto. El ex funcionario, sin embargo, se encuentra fuera del país y no ha sido ubicado por las autoridades.
En tanto, desde las 18 horas de este jueves, un grupo de agentes de la Policía Judicial Federal se apostó frente a la casa de Chapa Bezanilla, en Hidalgo 186, Tlalpan. Hasta las 23 horas de ayer, aún permanecían allí.
La decisión de la procuraduría capitalina se tomó al término de una larga diligencia (de las 15 horas del miércoles a las 3 de la mañana del jueves) en la que declararon ministerialmente Francisca Zetina La Paca, María Bernal y Ofelia Calvo Adame, así como José Cortés Osorio, ex coordinador del caso Ruiz Massieu de la extinta Fiscalía Especial.
Respecto de la situación de Chapa Bezanilla, se informó que el arraigo domiciliario que se solicitó se debe a que su declaración se considera ``de vital importancia para las pesquisas'' que se llevan a cabo, a propósito de determinar el origen de los restos humanos que se encontraron el 9 de octubre del año pasado en la finca El Encanto, propiedad de Raúl Salinas de Gortari.
En tanto, además de las auditorías sobre el presupuesto de la PGR, el procurador Jorge Madrazo Cuéllar pidió el expediente de las declaraciones de Fernando Rodríguez González, después de la fecha en que supuestamente recibió 500 mil dólares de parte de la Dirección General de Bienes Asegurados.
En ese expediente están las declaraciones de Rogelio Sánchez García, representante legal de Transportes Aerotécnicos Ejecutivos, quien -según el exhorto 48/98- ofreció las bitácoras de vuelo correspondientes a los meses de agosto y septiembre de 1994, donde consta que entre el 27 de agosto y el 3 de septiembre Raúl Salinas de Gortari viajó de la ciudad de México a Nueva Orleans.
Lo anterior se contrapone a la versión de Rodríguez González de que ``el primero de septiembre de 1994'', Manuel Muñoz Rocha ``se reunió con Raúl Salinas en su casa de Reforma''. Según Fernando, en ese día, Raúl habría ordenado al ex diputado ``darle velocidad'' a la organización del asesinato de José Francisco Ruiz Massieu.
En tanto, información de la Contraloría indica que los dictámenes de las auditorías a la oficina particular del ex procurador, el INCD y de la dirección de Bienes Asegurados, ya están en el escritorio de Madrazo Cuéllar.
Por lo que toca al arraigo ordenado a Chapa Bezanilla, las autoridades precisaron que no se trata ``todavía'' de imputarle delito que pudiera derivarse de la exhumación que se realizó en El Encanto. Sin embargo, destacaron que las pesquisas por este hecho podrían vincularse a las auditorías que a nivel federal realiza la Secodam.
El lunes 7 de octubre de 1996, La Paca se presentó ante el entonces fiscal Chapa para entregarle una carta y un croquis de El Encanto -hechos por su ex cuñado Ramiro Aguilar Lucero-, afirmando que los restos del desaparecido ex diputado priísta Manuel Muñoz Rocha habían sido ``enterrados'' en la mencionada finca, luego de ser asesinado, presumiblemente con un bat, por Raúl Salinas de Gortari.
Dos días después, los investigadores al mando de Chapa y con la asesoría de La Paca y María Bernal, encontraron una osamenta en El Encanto. ``Es Muñoz Rocha'', confió entonces, seguro, el responsable de las pesquisas del caso Ruiz Massieu.
No obstante, a las pocas semanas, peritajes realizados en México y Estados Unidos, desmintieron al fiscal y a sus informantes: los restos no eran de Muñoz Rocha, concluyeron 23 estudios de laboratorio, por lo que fueron enviados a la procuraduría del Distrito Federal para continuar las pesquisas por el presunto delito de exhumación clandestina ``y otros que pudieran derivarse''.
Chapa Bezanilla -quien en agosto había sido removido de las investigaciones del caso Colosio- fue destituido, junto con el procurador panista Antonio Lozano Gracia, el 2 de diciembre del año pasado.
A su salida, el nuevo procurador Jorge Madrazo Cuéllar pidió a la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam) una auditoría en la Procuraduría General de la República.
Según información no desmentida hasta ahora, esas auditorías indican que Chapa Bezanilla habría tramitado pagos especiales a testigos del caso Ruiz Massieu, entre ellos un millón de pesos a La Paca, a través de un cheque expedido el 7 de octubre de 1996.
Por todos estos hechos, la procuraduría del Distrito Federal ha pedido arraigo domiciliario para Francisca y Patricia Zetina, María Bernal y Francisco Godínez -la persona que cuidaba la finca-, y busca a Aguilar Lucero, el dibujante del croquis de El Encanto. Todos ellos podrían estar involucrados en los delitos de exhumación e inhumación clandestina y falsedad en declaraciones dadas a la autoridad judicial.
Incluso, luego de su declaración de ayer, Bernal y Zetina quedaron retenidas en el Sector Central de la procuraduría del Distrito Federal y no se descarta que se haya solicitado ya la orden de aprehensión en su contra, por lo que serían trasladadas en las próximas horas al Reclusorio Femenil Oriente.
Pero no sólo contra ellos se ha actuado. Las autoridades también solicitaron el arraigo de Chapa Bezanilla y Cortés Osorio, principales responsables de las pesquisas.
Cortés fue localizado en su domicilio y rindió sus primeras declaraciones ante el Ministerio Público entre miércoles y jueves.
Mañana, Chapa tiene que presentarse a declarar, bajo segundo citatorio, en el juzgado segundo del Reclusorio Norte, en el proceso contra Paulina Castañón por falsedad de declaración.