Los sindicatos no son patrimonio de partidos: Elba Esther Gordillo

Judith Calderón y Angeles Cruz Ť Los sindicatos no son patrimonio de ningún partido político, afirmó ayer Elba Esther Gordillo, secretaria del Frente Nacional de Organizaciones y Ciudadanos (FNOC). Sostuvo que, como el hombre, los organismos que representan a los trabajadores tienen que cambiar y transformarse de cara a la globalización y a la llegada del nuevo milenio.

Durante su intervención en el Encuentro Nacional Sindical (ENS), donde confluyen 65 organizaciones, la lideresa se pronunció por un sindicalismo incluyente que resuelva las demandas de los trabajadores y que tome en cuenta al sector informal de la economía que, en cantidad, supera a los sindicalizados.

Llamó a los dirigentes de los sindicatos participantes a elaborar un plan programático, ``con visión estratégica y de futuro'', que garantice reivindicaciones a la clase obrera.

En su intervención, señaló que las organizaciones sindicales deben demostrar que predominan los intereses de la clase trabajadora por encima de los particulares.

Elba Esther Gordillo participó en los trabajos de la mesa donde los secretarios generales de los diversos sindicatos acordaron realizar, en un plazo de seis meses, la Asamblea Nacional de Trabajadores como un paso previo a la creación de una nueva central obrera.

En este punto, advirtió que la realización de la asamblea debe estar fuera del juego electoral porque ``este es un asunto de clases, y de aquí tenemos que salir unidos''.

Interrogada acerca de las advertencias que hizo el presidente del Congreso del Trabajo (CT) en cuanto a que se podrán expulsar a los foristas que participan también en la cúpula obrera, la lideresa opinó que las exclusiones no son la solución.

Sobre este tema, Antonio Rosado García, secretario general del Sindicato de Trabajadores del IMSS, comentó que con la realización de una próxima asamblea de trabajadores no se busca sustituir a ningún organismo, sino crear una alternativa real para los trabajadores.

Advirtió que si el CT no cambia no tendrá futuro y aseguró que, hasta el momento, sólo ha servido para avalar pactos que permiten incrementos de precios, salarios miserables y privatizaciones que no benefician a los trabajadores.

A su vez, el líder de los telefonistas, Francisco Hernández Juárez, consideró que la aprobación de los estatutos en el CT fue un acto excluyente que pretende ``apretar tuercas a las organizaciones que simpatizan con el foro y tramitar, mientras tanto, su registro ante las autoridades''.

Sobre los pasos que dan los foristas hacia una nueva organización, el secretario del trabajo, Javier Bonilla, opinó que esto es parte de la autonomía de las organizaciones obreras y que ``no es algo que deba estar sujeto a la opinión del gobierno''.

Por su parte, el presidente del Congreso del Trabajo (CT), Víctor Flores, aseguró que los foristas ``están mal encauzados porque buscan su bienestar`` y ``siguen siendo protagonistas'', dijo en breve entrevista al finalizar la Alianza para el Crecimiento.