Carrera contra el tiempo en el PRD ante la disputas por las candidaturas Las brigadas del sol serán el sustento de la estrategia de ese partido
Alberto Nájar Ť El próximo 15 de febrero el Partido de la Revolución Democrática (PRD) definirá su candidato a jefe del gobierno capitalino, una vez que concluya el proceso de consulta interna a que se convocó ayer en las 16 delegaciones.
En su sesión de este domingo, el consejo estatal emplazó a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y Porfirio Muñoz Ledo para que antes del próximo viernes determinen si aspiran o no a la candidatura, pues hasta el momento ninguno de los dos ha expresado abiertamente este deseo.
Además, en la sesión de ayer se emitió un extrañamiento al perredista Miguel Aroche Parra --quien solicitó la expulsión de Muñoz Ledo-- junto con la advertencia de que si no corrige su conducta demandarán su salida del partido.
Las consultas delegacionales se realizarán entre el 8 y 9 de febrero, una vez que se conozca la respuesta de los precandidatos, quienes a su vez serían invitados a exponer sus puntos de vista en sesiones cerradas del consejo.
Una vez analizada la información, el 15 de febrero habrá un pronunciamiento político en favor del que reúna el mayor consenso, y quien virtualmente se convertiría en el abanderado perredista, pues la dirigencia nacional del partido acordó respetar la decisión que tome su contraparte en el DF.
Conseguir el consenso entre los perredistas capitalinos no fue fácil, pues algunos grupos llegaron con la espada desenvainada ante lo que llamaron ``acuerdos cupulares'', en referencia a los pronunciamientos que ya se habían expresado y la elaboración de listas de candidatos a diputaciones locales y federales. La inconformidad se reflejó en cartulinas que se pegaron en las paredes del salón donde se realizaron los trabajos.
En este ambiente, Quintero inició la sesión con su propuesta de hacer ``un llamado fraterno'' a Muñoz Ledo y Cárdenas, y dijo que en el PRD ``no hay lugar para la designación por dedazo'' ni mucho menos se valen ``las cargadas y matraqueros''.
Junto con el emplazamiento se pidió serenidad a todos los militantes, y sobre todo ``emitir valoraciones en positivo'' acerca de los dos precandidatos. De hecho, uno de los acuerdos del consejo es evitar toda clase de pronunciamientos, personales y de grupo, por lo menos hasta el 7 de febrero; la intención es evitar confrontaciones entre ambos precandidatos. La sesión se realizó en tres pistas: en la tribuna donde decenas de perredistas opinaron sobre la propuesta de unidad, criticaron el trabajo de la comisión de candidaturas y las propuestas que se conocen hasta el momento, y las intenciones de algunos ``de colgarse de una candidatura'', como dijo el asambleísta Gonzalo Rojas.
La segunda pista fue en corto, para consensuar propuestas de candidatos y los distritos en que se postularían. Los participantes de este escenario tuvieron mucho trabajo, pues al principio de la reunión se filtró una lista falsa con los nombres de 12 candidatos que presumibilemente propuso el CEN, y porque algunas corrientes también presentaron sus propuestas al margen del consenso.
En este caso, el acuerdo fue que se reservan 12 distritos federales para aspirante externos, y que el próximo miércoles empezará la discusión sobre los candidatos locales.
La tercera pista de la sesión fue aún más discreta, y en ella participaron básicamente dos personas: el diputado Leonel Godoy, representante del PRD ante el IFE, y el asambleista Eduardo Morales, a quien el primero, junto con Pablo Gómez, pretendieron desconocer como portavoz del partido en el consejo local electoral. En este caso la grilla fue breve y concluyó con el acuerdo de que Morales seguirá en su puesto; Godoy se encargará de hacerlo oficial. Reconoció que la discrepancia fue asunto de formas; lo que hacía falta era, dijo, que el comité estatal informara por escrito del nombramiento.