La Universidad Central de Caracas, convertida en virtual campo de batalla por las fuerzas antimotines Protestas ante la embajada mexicana y la UNESCO
Pl, Reuter y Efe, Caracas, 6 de febrero Ť Los universitarios venezolanos rechazaron la represión policiaca y la prohibición de la marcha de protesta que se iba efectuar el miércoles, en tanto que brigadas antimotines mantenían cercada en Caracas la Universidad Central de Venezuela (UCV) para impedir nuevos intentos de manifestaciones.
El comando intersindical de las 17 universidades públicas, que se hallan en huelga, reunido en asamblea en la UCV anunció que dará a conocer un comunicado denunciando la violación del estado de derecho por parte de la Gobernación caraqueña, al negarse a otorgar permiso para la marcha de ayer y que a la postre incidió en provocar disturbios.
Las fuerzas antimotines, que llevan ya dos días apostadas en los alrededores de la UCV, convirtieron el miércoles esa zona en virtual campo de batalla durante unas siete horas, al reprimir a unos mil 500 universitarios que se disponían a efectuar una marcha pacífica hacia el Ministerio de Educación.
Los uniformados utilizaron gases lacrimógenos, perdigones de goma y chorros de agua para reprimir a los estudiantes, cuyo resultado fue de 17 heridos e igual número de detenidos. Asimismo, la Guardia Nacional impidió el mismo día la entrada a Caracas de una treintena de autobuses con estudiantes de provincia que participarían en la marcha.
El comando indicó que ahora las federaciones de profesores, estudiantes y sindicatos de empleados y trabajadores planifican acciones en calles a efectuarse en forma simultánea en todo el país, como fórmula para canalizar el descontento de la comunidad universitaria con la política hacia las universidades.
En ese marco el rector de la UCV, Alcides Trino Díaz, renunció a la comisión negociadora tras señalar que el gobierno se burla de los profesionales al designar interlocutores que carecen de poder de decisión y con los cuales es imposible llegar a acuerdos. Demandó, por ello, la presencia de los ministros de Educación o Hacienda.
Los universitarios en huelga exigen un incremento salarial del 125 por ciento que les corresponde por ley, así como una ampliación de su participación en el presupuesto nacional para superar la crisis financiera que afrontan las casas de es- tudio. Sin embargo, el gobierno sólo ha ofrecido un aumento del 50 por ciento.
Por su parte, grupos de profesores, estudiantes y empleados de las universidades públicas efectuaron hoy sendas protestas pacíficas frente a la embajada de México y la sede de la UNESCO, con objeto de exponer la situación de la educación en Venezuela y los motivos por los cuales las universidades del país se hallan en huelga general.
El consejero de la embajada de México, Juan Manuel Nungaray, indicó que una delegación de la UCV se presentó a protestar pacíficamente y entregó un documento para explicar la problemática del sector. Sin embargo, aclaró que éste es un ``asunto interno'' y que su gobierno lo único que puede hacer es ``escuchar''.
Manifestantes dijeron que se escogió México para esta protesta debido a que en este momento el presidente Rafael Caldera se encuentra en ese país en visita oficial. Señalaron que su objetivo es que el pueblo mexicano sepa a través de sus diplomáticos ``la verdad'' de lo que sucede en la educación venezolana y no crea lo que dice Caldera.
Otro acto similar se efectuó ante la sede de la UNESCO, donde se presentaron alrededor de 30 o 40 estudiantes. El director de ese organismo, Luis Ygarzábal, indicó que recibió a una delegación de universitarios en una reunión ``muy cordial'' en la que le expusieron la situación de las universidades venezolanas.