La Jornada 8 de febrero de 1997

En juego, el perfil que presentará el PRD a electores: Muñoz Ledo

Alberto Nájar Ť Al formalizar su aceptación a la precandidatura a jefe del gobierno capitalino, Porfirio Muñoz Ledo advirtió que la contienda interna no será ``una competencia de lealtades ni deudas políticas'', y llamó a los perredistas a reflexionar antes de tomar una decisión porque está en juego el perfil que presentará el partido ante los electores.

Enfático, insistió en que este es un momento decisivo para el partido. ``El PRD debe decirle al país si quiere gobernar de una vez por todas o si se conforma con reintegros, diputaciones, delegaciones y regidurías'', dijo.

Muñoz Ledo reiteró su propuesta para que el proceso de selección se realice en el menor plazo posible, pues de lo contrario se corre el riesgo de que el partido se desgaste. Por lo pronto propuso sostener tres debates con Cuauhtémoc Cárdenas para que los militantes puedan conocer sus puntos de vista.

Los debates, indicó, ``no son pleitos'', pues de lo que se trata es que los candidatos no estén ``protegidos por candilejas, porque entonces tendríamos descalabros''. Por lo demás, se mostró confiado en que los perredistas tienen la suficiente madurez para tomar desde ahora sus propias decisiones. En su discurso de aceptación, Muñoz Ledo hizo hincapié en que la contienda interna rebasa las fronteras del partido, pues lo más importante es la imagen que el partido reflejará ante los electores. Así, insistió en su llamado a la unidad: ``No es una disputa ideológica ni de personalidades o de lealtades; se trata de un análisis sereno, reflexivo, maduro, que analice todos los factores del juego para que el partido no desperdicie la enorme oportunidad de gobernar la ciudad''.

Y es que, a su juicio, el PRD no puede esperar a que ocurra un terremoto como el de 1985 para movilizar a los ciudadanos. Para el precandidato, la tarea de gobernar en el Distrito Federal implica ``una obra de creación política'' y la refundación de la ciudad en todos sus aspectos.

Para formalizar su aceptación a la precandidatura, Muñoz Ledo entregó al comité estatal una carta en la que insiste en que el proceso sea breve, transparente, de cara a los ciudadanos, respetuoso de los militantes y candidatos. Con la etapa que inició ayer, dijo, empieza una nueva etapa de transición democrática para el partido.