Bajan ventas al exterior y suben las importaciones, indica ANIERM
Patricia Muñoz Ríos Ť Se frenó el dinamismo exportador del país en los últimos meses y en contraparte se ha fortalecido el crecimiento de las importaciones, lo que está ``debilitando el superávit comercial'' del país en forma considerable y debe tomarse como una señal de alerta.
Informes de la Asociación Nacional de Importadores y Exportadores (ANIERM) y de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) coinciden en que a pesar de que continúa creciendo la participación de productos mexicanos en el extranjero, su dinamismo se ha venido frenando en forma paulatina.
En opinión de esta asociación, no debe atacarse el renglón de importaciones, dado que en su gran mayoría se trata de compras de bienes de uso intermedio y de capital, que representan inversiones y apalancamiento de la industria nacional.
En cambio, recomienda establecer un programa urgente de apoyo a las exportaciones con medidas fiscales, crediticias y administrativas concretas para que no se termine de congelar el dinamismo del comercio exterior.
La Concanaco señaló que la cúpula empresarial está preocupada porque ``el superávit comercial se ha debilitado''' debido a que las exportaciones han perdido dinamismo, mientras las importaciones han elevado su ritmo de expansión.
A nivel mensual el ritmo de crecimiento de las compras externas ya superó al de las ventas, advirtió este organismo, y sostuvo que no debe perderse de vista que el comercio internacional y la inversión extranjera continúan siendo los motores de reactivación económica del país.
Las cifras de la ANIERM indican que en los últimos tres meses las exportaciones mexicanas mantuvieron un ritmo de crecimiento --a tasa anualizada-- del 15 por ciento en promedio, lo que significa prácticamente la mitad del nivel que lograron durante 1995.
Este descenso del ritmo exportador comenzó en 1996, cuando las ventas al exterior crecieron 20.6 por ciento, ``es decir, 10 puntos porcentuales menos que el nivel alcanzado en el primer año del presente sexenio''.
Para las autoridades, el crecimiento de las exportaciones es suficiente; sin embargo, las importaciones llevan un dinamismo tan fuerte que podría verse nulificado en pocos meses el superávit comercial. Esto se debe a que la tasa de crecimiento de las importaciones se ubica entre 23 y 25 por ciento anual, y de continuar la tendencia de recuperación de la economía podría incluso elevarse más este indicador, aseveró la asociación.
El debilitamiento de la balanza comercial se viene dando desde 1996, cuando registró una captación total de 95 mil 929 millones de dólares en exportaciones y una erogación de 89 mil 637 millones por importaciones, lo que dio como resultado un saldo favorable de 6 mil 292 millones de dólares, casi dos veces menor al de un año anterior.
El crecimiento de las exportaciones durante 1995, primer año del sexenio, fue cercano al 30 por ciento; en 1996 fue de 20.6, y se prevé que cuando mucho este año alcanzará el 15 por ciento, estiman autoridades de comercio.
En tanto, las importaciones que se mantuvieron contraidas durante los dos primeros años del régimen por la drástica devaluación del peso, vuelven a tomar dinamismo y ya tienen un ritmo de crecimiento de entre 23 y 25 por ciento, y el renglón más activo es el de las compras de bienes de capital, detallan las estadísticas de este organismo.
Sobre el comportamiento de las exportaciones, el director del Banco Nacional de Comercio Exterior (Bancomext), Enrique Vilatela Riva, comentó que diversos renglones productivos tienen todavía un gran potencial de exportación. Expuso que entre los objetivos de las entidades promotoras del comercio se encuentra incorporar a las empresas en el proceso de exportación, incrementar su volumen de ventas al exterior, y fortalecer la participación de empresas nacionales en eventos internacionales, además de mejorar los canales de comercialización.