La Jornada 11 de febrero de 1997

Estudiantes cuestionan a Paoli su transición de izquierda a derecha La lucha de clases no es más ya el único motor de la historia, contestó

Alonso Urrutia Ť No bien había terminado su decálogo renovador de la decadente ciudad y sus gobiernos priístas, cuando el precandidato panista Francisco José Paoli escuchó a bocajarro una censura sobre la demagogia política:

--¿Qué seriedad nos puede dar un político que en sus orígenes sostuvo posturas progresistas, revolucionarias, de izquierda, y que hoy asume posiciones conservadoras y moralistas? ¿Qué congruencia puede haber en un político que transita de una ideología a otra?

Sin inmutarse, Paoli respondió al primer cuestionamiento del estudiantado del ITAM: ``La lucha de clases no es más ya el único motor de la historia; hoy existen muchos motores de la historia''.

Paoli consideró que muchos de los postulados que reivindicaba en el Partido Mexicano de los Trabajadores --un partido nacionalista, que no marxista, según acotó-- se pueden sostener en el PAN: defensa de la soberanía, petróleo y democracia.

Larga exposición para explicar el tránsito de la izquierda a lo que --dijo-- es el centro, que no la derecha. Nuevas explicaciones sobre el proceso de transición, para concluir: ``No sé si eso sea congruente, pero la congruencia no siempre es la terquedad en una idea sobre la que se puede tener dudas; en ocasiones es bueno rectificar''.

No bien terminaba de explicar ese tránsito cuando vino una nueva andanada: ``Como muchos mexicanos vemos con preocupación el avance del PAN y su posición conservadora que amenaza la tradición liberal del país, las instituciones''.

--No vea con preocupación el avance del PAN, porque no somos la voz del clero ni asumimos la postura de los banqueros. Incluso en la reforma del artículo 130, el PAN propuso restricciones más estrictas que el PRI y el PRD a la participación política del clero, porque no se vale el ascendiente moral de los curas para fines electorales.

Paoli agregó: ``Aquí no hay banqueros ni la mayoría somos beatos; hay católicos, pero no somos partido confesional. Lamento que vea con preocupación el avance del PAN''.

Deslindó a su partido de atentar contra reivindicaciones sindicales: ``Sí estamos en contra del corporativismo y su manipulación electoral, pero no estamos contra el sindicalismo''.

Tercera caída

--``¿Qué va a hacer el PAN ante el desprestigio que ha tenido a raíz de los últimos acontecimientos que lo involucran? ¿Cómo va a tratar de mejorar su imagen y, sobre todo, recuperar la credibilidad en esta etapa en la que la población no cree ni en su madre? -- le soltó una estudiante.

--Hace tiempo que existe una campaña de desprestigio contra el PAN, desde que se habló del narcopán, de las minifaldas y del wonderbra hasta la aparición de La Paca y otras videntes, para ocultar una ineficiencia gubernamental de antología y una corrupción brutal. Las encuestas muestran que las preferencias electorales en favor del PAN no han fallado. Seguimos conservando una proporción superior al 36 por ciento.

No hubo más preguntas. El ponente se excusó para visitar al panismo del distrito 12