La Jornada 17 de febrero de 1997

La PGR, sin reacción oficial; esperemos las pruebas, dicen funcionarios

Ciro Pérez Silva Ť Mientras la Procuraduría General de la República (PGR) informó que no hará ningún comentario oficial en torno a la presunta relación de las familias Salinas y Ruiz Massieu con el narcotráfico, funcionarios de la dependencia cuestionaron la información publicada ayer en diversos medios y señalaron que ``en todo caso habría que esperar las supuestas pruebas'' que se presentarán el próximo mes de marzo en una corte federal de Texas.

Los funcionarios consultados, que pidieron el anonimato, recordaron que no es esta la primera vez que desde Estados Unidos y basados en testimonios de ``testigos'' se menciona el nombre de la familia Salinas como parte de la red del narcotráfico; sin embargo, dijeron, ``en ningún caso las autoridades estadunidenses han aportado pruebas contundentes'' en ese sentido.

Mencionaron que ``a finales de 1995'' (12 de diciembre) la Secretaría de Relaciones Exteriores solicitó al Departamento de Estado que, ``en el caso de que exista veracidad'' en una nota difundida por el noticiero de televisión NBC News, en la que se informaba de una presunta vinculación de narcotraficantes internacionales con el ex presidente de México, se hiciera del conocimiento del gobierno mexicano con base en los acuerdos y contenidos de cooperación e intercambio de información que existen entre los dos países.

La respuesta del Departamento de Estado, recuerdan los funcionarios, llegó ese mismo día y afirmaba ``categóricamente'' que el gobierno de Estados Unidos ``no investiga a Carlos Salinas en ningún aspecto''.

No obstante, reconocieron que en su momento no fue desmentida la versión de que el ex presidente forma parte de una lista del Departamento del Tesoro de ese país, donde figuran los nombres de personas relacionadas con casos de narcotráfico. De acuerdo con la versión, los nombres habrían sido proporcionados, al menos en parte, por el Servicio de Aduanas, oficina que depende del Departamento del Tesoro.

En cuanto a Raúl Salinas de Gortari, la misma oficina del gobierno estadunidense admitió que había en marcha una investigación en su contra ``por sospecha de estar vinculado con el narcotráfico'' y que coopera con las autoridades mexicanas y suizas para identificar la procedencia de más de 83 millones de dólares en diversas cuentas bancarias, bajo la presunción de que se trata de bienes obtenidos por operaciones de lavado de dinero, cuyo origen podría estar en el narcotráfico.

En cuanto a otros ex funcionarios mencionados en la información, como Mario Ruiz Massieu y Guillermo González Calderoni, los funcionarios de la PGR sostuvieron que han revisado los procesos de extradición para juzgarlos en México y que no pudo lograr la pasada administración.

``A reserva de un análisis más a fondo, creemos que hubo fallas, tanto de la fiscalía como de las autoridades judiciales estadunidenses''. Sobre el juicio que siguen las autoridades estadunidenses para incautar los más de 9 millones de dólares que tiene Ruiz Massieu en un banco de Texas, los funcionarios señalaron que ``el resultado del juicio podría dar mayores pistas sobre el origen de esos recursos''.

Como denominador común, subrayaron que la mayoría de los personajes mencionados en las notas informativas ``no justificaron en su momento, y como marca la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos, la lícita procedencia de sus bienes y el incremento sustancial de su patrimonio, que en el caso de (Raúl) Salinas, (Mario) Ruiz Massieu y González Calderoni, alcanzaron niveles escandalosos''