La Jornada 21 de febrero de 1997

Chapa, ¿detenido?

Francisco Guerrero, corresponsal, y Ricardo Olayo Ť Agentes judiciales del Distrito Federal efectuaron ayer una importante movilización en Jiutepec, Morelos, en busca de Pablo Chapa Bezanilla, de quien extraoficialmente se dijo fue capturado por la mañana. Sin embargo, la Procuraduría General de Justicia de Distrito Federal (PGJDF) informó horas más tarde que el ex fiscal no ha sido detenido por judiciales de la dependencia.

El rumor de la detención tenía su origen en la veintena de agentes al frente de la cual viajó el director de Investigaciones de la Policía Judicial, Emilio Gómez Sánchez, quien según se informó hizo el rastreo de Chapa a partir de dos llamadas que supuestamente efectuó el ex fiscal desde Morelos y además le siguió la pista al mensajero que entregó hace unos días en un diario una carta del ex funcionario.

Según la información obtenida en Morelos, los judiciales llegaron a las 16:00 horas del miércoles pasado a Jiutepec, municipio donde se llevó a cabo un operativo desde las 20:30 horas en que acordonaron la zona del fraccionamiento Las Fincas, donde está la quinta El Zapote.

Fue alrededor de las cuatro de la madrugada que cercaron el fraccionamiento y por la mañana habrían hecho la detención del ex funcionario de la PGR. Además, una señal captada en las frecuencias internas de la policía estatal cuyo emitente, comandante de apellido Torga Rivera, habló también de la detención de Chapa.

De acuerdo con esta versión, en la captura participó la Policía Federal de Caminos, corporación que por la tarde negó que sus efectivos hubieran participado en el citado operativo.

En tanto, en la sede de la Judicial capitalina, sita en Arcos de Belén número 23, se dieron versiones extraoficiales de que Chapa ya estaba capturado y que sería llevado al juzgado 16 penal.

A la confusión se sumó la declaración del procurador con licencia del Distrito Federal, José Antonio González Fernández, quien dijo que sabía de la detención en Morelos e indicó que había una orden de aprehensión en contra de Chapa.

Las agencias de noticias dieron por un hecho la detención; la radio y la televisión difundieron la noticia, pero el director de Comunicación Social del gobierno federal, Dionisio Pérez Jácome, rechazó en la televisión la captura de Pablo Chapa.

El rumor de que este ex funcionario había sido capturado provocó que a las afueras del inmueble de la Judicial llegaran decenas de reporteros y fotógrafos que esperaban la llegada del ex fiscal. Sin embargo, al paso de las horas la versión se diluyó y por la noche los voceros de la PGJDF señalaron que Chapa Bezanilla no estaba detenido.

Lo único que se pudo comprobar fue la presencia de los agentes judiciales en el estado de Morelos, quienes desde el pasado 2 de febrero encontraron el automóvil del ex servidor público, un Spirit placas 700-GVS, cerca del Hotel Ex Hacienda de Cortés. Las pesquisas de la Judicial permitieron establecer que Chapa estuvo en el estado de Morelos y por ello visitaron domicilios particulares, restaurantes y hoteles que frecuentaba el ex fiscal.

Sobre el operativo se informó que no es el primero, pues el pasado 11 de febrero se realizó uno en Cuernavaca, en la calle Leyva donde está el asilo Bugambilias, sitio en el que presuntamente se refugiaba Chapa Bezanilla.

Un día después se efectuó otra movilización policiaca en el municipio de Temixco, donde supuestamente vive Carmen Chapa Bezanilla, una de las hermanas del ex fiscal, que imparte clases en el Tecnológico de Monterrey.