Pese a tantas promesas oficiales para evitarlo, sigue el saqueo de los bosques de la sierra Tarahumara. La más reciente denuncia al respecto es del presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Chihuahua, Heliodoro Juárez, quien señaló cómo, mediante contratos turbios, compañías madereras nacionales y extranjeras talan indiscriminadamente una riqueza que debería beneficiar a los indígenas de dicha región, también explotados por los madereros. Los tarahumaras son víctimas de cacicazgos y corrupción y se desenvuelven en medio de carencias tales que cada año mueren de frío y hambre. El funcionario también denunció la existencia de intermediarios que, en contubernio con las compañías madereras, corrompen a las autoridades ejidales. En cuanto a las ``ayudas'' provenientes de organizaciones nacionales o del exterior, Juárez señaló que no llegan a los indígenas: son vendidas por funcionarios gubernamentales o del Instituto Nacional Indigenista.
Por enésima ocasión se anuncia que, ahora sí, se ``aplicará'' un programa especial para preservar el parque nacional de la Malintzi, en el estado de Tlaxcala. Lo anterior, al reconocerse oficialmente que 18 mil de las 33 mil hectáreas que conforman el parque en territorio de dicha entidad se encuentran deforestadas. Cabe recordar que cada que se inicia un nuevo sexenio gubernamental en Tlaxcala y cuando se realiza la campaña del PRI a la presidencia, se promete resolver el deterioro ecológico que sufre tan importante área natural.
Fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes diez taladores presuntamente responsables de operar nueve aserraderos ilegales en el parque nacional Ixta-Popo. La tala clandestina ha creado en tan importante área de Puebla serios daños a la flora y fauna local.
Comuneros de Santa María Huatulco, en Oaxaca, denunciaron ante las instancias federales que el delegado de Fonatur en dicho centro turístico, José Luis Santobeña, tala árboles de la especie huanacaxtle para convertirlos en tablones que luego vende en la zona. Al respecto, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente localizó 10 mil metros cúbicos de madera cortada en las bodegas de Fonatur. Un ayudante del delegado sostuvo que ellos son ``los únicos que podemos disponer el corte de árboles tropicales, como autoridad de turismo''.
Uno de los problemas que deberá enfrentar el nuevo edil de Ciudad Nezahualcoyotl es el de la venta de tierras ubicadas en lo que se considera zona de reserva ecológica. Lo tradicional ha sido que promotores y ``urbanistas'', coludidos con autoridades y grupos políticos del PRI, comercialicen lotes para vivienda en terrenos que no reúnen las normas establecidas por la legislación vigente. Hace poco se comprobó la venta de lotes en las zonas de reserva ecológica, claves para contrarrestar las condiciones ambientales poco favorables que distinguen a Nexahualcoyotl. Hasta el momento ninguno de los fraccionadores ha sido detenido.
Aunque en todos los documentos oficiales y de los centros de investigación especializados en el tema se sostiene que es necesario conservar los bosques del estado de Puebla para garantizar las fuentes de agua y evitar la erosión y los cambios climáticos, en los últimos 15 años la tala ha dado cuenta del 80 por ciento de la zona forestal de dicha entidad. Así lo afirmó Klaus Feldman, representante del Consejo Ecológico de Participación Ciudadana. También dijo que para compensar el daño ocasionado en 380 mil hectáreas boscosas es necesario reponer 98 millones de árboles. Pese a las multas impuestas a taladores, que cada vez resultan menos clandestinos, éstos continúan su labor en diversas partes del estado.
Se le cataloga como un oasis en el semidesierto de Coahuila, pero ahora sufre la acción del hombre: se trata de la reserva ecológica ubicada en el municipio de Cuatro Ciénegas, donde por su clima y las condiciones locales prevalecientes existen especies de flora y fauna únicas en el mundo, como la tortuga bisagra. Sin embargo, la explotación que una empresa de Nuevo León hace de las dunas de yeso ahí localizadas ocasiona ya serios daños en una superficie de 400 hectáreas y pone en peligro de desaparecer la riqueza natural de un sitio único en el mundo.
Y lo que faltaba: un incendio arrasó con flora y fauna de la isla Marieta Larga, una de las tres que forman el conjunto Las Marietas, en el océano Pacífico. Se les considera reserva ecológica y refugio del pato Bobo, que migra cada año de Canadá. Situadas frente a Puerto Vallarta, los prestadores de servicios turísticos de dicha ciudad acostumbran llevar tour de visitantes a las islas. Los dejan en la mañana y los recogen en las tarde. Pero alguien hizo una fogata que no apagó ocasionando la tragedia ambiental. Las autoridades llevan 20 días buscando infructuosamente al o los responsables.
Aunque todavía no comienza la época de incendios forestales, las noticias anteriores muestran la necesidad de medidas gubernamentales más efectivas y la intervención real de la población con el fin de cuidar nuestros bosques, que cada día son menos en el país.