Podría modificarse el programa de reordenamiento, dice el asambleísta Gonzalo Rojas
El presidente de la Comisión de Abasto de la Asamblea de Representantes (ARDF), Gonzalo Rojas, afirmó que ante la falta de una ley que regule la actividad de los ambulantes es posible que el comercio en la vía pública se utilice para lavar dinero. Lo anterior fue reforzado por el chileno Hernán Ortega, especialista en el tema, quien aseguró que en todas partes del mundo el comercio informal se utiliza para este ilícito y, por lo tanto, México no estaría excluido.
Rojas señaló en entrevista que la ARDF no cuenta con un estudio al respecto, por lo que las propuestas que se deriven del foro del comercio en la vía pública permitirán a los asambleístas seguir ``líneas de investigación'' sobre este tipo de irregularidades. El legislador perredista indicó que el mecanismo de comercialización de los ambulantes propicia una ``serie de suposiciones'' en torno al lavado de dinero en el comercio informal.
Lo anterior se expuso durante el Foro del Comercio en la Vía Pública, donde por otra parte Rojas señaló que podría modificarse el programa de reordenamiento debido a que la realización de este foro tiene como propósito buscar ``el sentir de los ambulantes'' para llegar a un marco normativo.
La ARDF, dijo, no puede ``avalar decisiones unilaterales, ni impositivas'' porque su fin es buscar ``esquemas de gobernabilidad'' que eviten ``fuertes tensiones'' en la ciudad.
A su vez, la Comisión de Abasto y Distribución de Alimentos de la ARDF presentó una serie de medidas para la regulación del ambulantaje: programas de reordenamiento y reubicación, emisión de normas jurídicas, establecimiento de medidas fiscales acordes a la realidad microeconómica de los ambulantes y desarrollo de programas de capacitación.
En un mismo documento, la comisión presentó cifras reveladoras: desde mediados del siglo 16 se han construído 318 mercados públicos que comprenden a 75 mil comerciantes, situación que ha determinado ``que gran parte de los productos para el abasto popular'' se desarrolle en las calles.
En ese sentido, el documento establece que existen 220 concentraciones de mercados informales que se ubican en zonas marginadas, camellones o terrenos irregulares del DDF y que que agrupan a 20 mil comerciantes. Además, se agregan datos de la Secretaría de Gobierno del DDF que establecen 96 rutas de tianguis con 28 mil comerciantes que ``operan bajo la autorización discrecional de las delegaciones políticas''.
Otra forma de abasto popular lo constituyen los mercados sobre ruedas, que funcionan con 10 rutas y 20 mil vendedores. En total, señala el documento, son 50 mil los comerciantes que trabajan bajo un esquema informal de comercialización, ``amén de un número incuantificado de puestos callejeros''.
Por otra parte, se destaca que la ciudad de México alberga el tianguis que en su tipo es el más grande a nivel mundial, ubicado en la delegación Gustavo A. Madero: es el tianguis de San Felipe de Jesús, que cuenta con 17 mil puestos con 7 mil 160 comerciantes, de los que se deriva que el crecimiento anual de los tianguis abarca, en promedio, 16 calles cada 12 meses.
La investigadora Sandra Alarcón González, de la Universidad Iberoamericana, señaló que según datos de la Canaco, el comercio informal representa el 8.7 del PIB nacional, mientras que el establecido el 18.74 por ciento. Por lo toca a la evasión fiscal, dijo, se estima en ``unos 18 millones de pesos entre 1995 y 1996 y durante 1997 la cifra será de 23 millones''. Los ambulantes coincidieron en que el comercio informal ``es auspiciado, promovido y aprobado por el Estado''.
Cada uno se refirió a la forma de combatir la problemática de acuerdo con la zona comercial. Luciano Martínez Guadarrama, de la colonia Buenos Aires, habló sobre la existencia de 690 ambulantes en ese lugar y propuso la creación de cajas de ahorro popular, centros de desarrollo comunitario y programas de detención del delito y refacciones robadas, además de aplicar una campaña de reivindicación ``hacia la colonia porque no todo en la Buenos Aires es robado''.
Juan Manuel Hernández, de la Unión de Comerciantes de Oriente, tras exponer el desplazamiento del comercio hacia las calles ante el grado de afectación económica, indicó que en los ámbitos económico y político del país ``el comercio en la vía pública es la opción por excelencia y la propuesta es pugnar porque sean respetadas las garantías del derecho al trabajo. (Karina Avilés)