La Jornada 2 de abril de 1997

No habrá deportaciones masivas, promete el Departamento de Estado

Afp, Ansa, Efe y Reuter, Washington, 1o. de abril Ť Estados Unidos se comprometió hoy ante los países centroamericanos y República Dominicana a evitar deportaciones masivas de indocumentados y a explorar posibilidades para mejorar la nueva ley de inmigración estadunidense, que entró en vigor este martes.

Al término de un encuentro entre la secretaria de Estado, Madeleine Albrigth, con los cancilleres de Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y República Dominicana, el subsecretario de Estado Asuntos Interamericanos, Jeffrey Davidow, reiteró que no habrá ``deportaciones masivas'', tras la entrada en vigor de la nueva legislación que dificultará el ingreso de inmigrantes a Estados Unidos y facilitará la deportación de quienes se encuentren ilegalmente en ese país.

El encuentro, calificado por Albrigth como ``excelente'', estaba destinado a preparar la visita que el presidente Bill Clinton realizará en mayo próximo a Costa Rica

El canciller costarricense, Fernando Naranjo, dijo que el problema de la inmigración ilegal, así como su causa más profunda, la falta de desarrollo económico, serán abordados durante el encuentro que los mandatarios centroamericanos sostendrán con Clinton el próximo mes.

En tanto, el presidente hondureño, Carlos Roberto Reina, dijo durante la reunión que junto con sus colegas centroamericanos sostenga con Clinton ``de ninguna manera deseamos dicutir limosnas'', y se pronunció por la negociación de un tratado de libre comercio entre la región y Estados Unidos.

Su par salvadoreño, Armando Calderón Sol, afirmó que Washington discrimina a las minorías y ``atenta contra la persona humana'' con la nueva ley de inmigración, y el gobernante nicaragüense, Arnoldo Alemán, pidió una vez más que Estados Unidos dé residencia permanente a las 60 mil nicaragüenses que pueden ser deportados al amparo de la nueva legislación.