La Jornada 6 de abril de 1997

Elogia el rey ``el valiente proceso de liberalización y modernización''

Roberto González Amador Ť El rey Juan Carlos I ofreció ayer todo el apoyo del Estado español para que México pueda concretar un tratado comercial con los países de la Unión Europea, cuyas negociaciones se prolongan ya por varios años.

``España no ahorrará esfuerzos con sus socios europeos para avanzar en un acuerdo entre la Unión Europea y México'', dijo el monarca español durante un almuerzo de hombres de negocios de ambos países, celebrado en el Castillo de Chapultepec.

Ante el presidente Ernesto Zedillo, Juan Carlos I de España, quien ayer cumplió su segundo día de visita oficial al país, elogió la estrategia económica seguida por México, y destacó en especial ``el valiente proceso de liberalización y modernización de la economía''.

El monarca consideró que, a nivel regional, México es más consciente que nunca de su estratégica ubicación geográfica. El país, dijo, liderea ambiciosos proyectos de liberalización comercial con Estados Unidos, Canadá, Costa Rica, Venezuela, Bolivia y Chile.

``Esta vocación de integración regional no ha hecho sino reforzar la voluntad mexicana de diversificar sus relaciones exteriores, como lo pone de manifiesto el acercamiento de México al Foro Económico Asia-Pacífico (APEC), y el inicio de conversaciones conducentes a un acuerdo de libre cambio con la Unión Europea'', añadió.

Ocasión irrepetible de de fortalecer lazos económicos

El rey Juan Carlos I apuntó entonces que en ambos lados del Atlántico se percibe una ocasión posiblemente irrepetible de consolidar lazos económicos duraderos.

Desde la óptica española, abundó, México se contempla como un socio importante y estratégico para incrementar la presencia española en América.

España, agregó el rey Juan Carlos I, ha sabido valorar el duro proceso de ajuste aplicado por el gobierno mexicano, que ha permitido una pronta recuperación de la crisis que afectó a este país a lo largo de 1995.

Así lo pone de manifiesto -ejemplificó- la importante presencia de inversión española en los peores momentos de la crisis mexicana, y en particular la apuesta de los bancos españoles por el sistema financiero local. Bancos españoles son ahora socios, incluso mayoritarios, de tres bancos mexicanos.

En el mismo proceso, añadió, también se han producido significativas inversiones mexicanas en España, con la mira puesta en el mercado único europeo.

Debe ser tarea de ambos gobiernos apoyar estos esfuerzos, completando el ya importante entramado de acuerdos bilaterales y favoreciendo una pronta conclusión del proceso negociador de una acuerdo entre la Unión Europea y México, ``para lo que España no ahorrará esfuerzos con sus socios europeos'', agregó el jefe del Estado español.

Juan Carlos I apuntó que el proceso de apertura económica ha propiciado el nacimiento de una nueva cultura empresarial mexicana, que amplía día a día el horizonte de su actividad y que ha explotado con éxito el nuevo escenario económico y consolidado al país como una gran potencia exportadora.