La Jornada 7 de abril de 1997

PROTESTA DE GREENPEACE EN TABASCO

Georgina Saldierna, enviada, Villahermosa, Tab., 6 de abril Ť La organización ambientalista internacional Greenpeace concluyó hoy su gira por esta entidad con una acción de protesta por la contaminación que ha provocado Petróleos Mexicanos (Pemex) con las fugas y derrames de hidrocarburos y sus derivados.

En esta ocasión, cuatro activistas de la agrupación descendieron a rapel del Puente Solidaridad que pasa sobre el río Grijalva y une el centro de esta ciudad con la populosa zona habitacional de Las Gaviotas.

El puente tiene una altura aproximada de 20 metros y una extensión de 250. Su construcción comenzó en 1993 y concluyó en 1994, y sólo se utiliza para el paso de peatones.

Al filo de mediodía los ecologistas iniciaron los preparativos del descenso, durante el cual desenvolverían una gran manta con la leyenda: ``Pemex. Alto a la destrucción de Tabasco''.

A las 12:30 todo estaba listo para bajar y a las 13 horas se logró el objetivo de desenrollar toda la manta. Los cuatro activistas que descendieron por el puente permanecieron colgados durante una hora y luego empezaron a escalar y a enrollar su desplegado para retirarlo.

Con esta acción termina una fase de la gira La ruta del petróleo, que inició Greenpeace en el estado de Veracruz con el apoyo del barco insignia de la organización, el Rainbow Warrer.

La tripulación de la nave apoyó todas las acciones de protesta de los ambientalistas mexicanos, para lo cual les proporcionó ayuda de transporte en sus lanchas y en el propio navío.

De esta manera el barco recorrió las costas de Veracruz y Tabasco. En este último estado arribó a los puertos de Dos Bocas y Frontera. Mañana estará en el puerto de Ciudad del Carmen, Campeche, en donde Greenpeace documentará también los efectos de los derrames petroleros.

Al hacer una evaluación de la gira por Tabasco, Alejandro Calvillo, directivo de Greenpeace-México, pidió que Pemex respete la Ley de Protección Ecológica y que las autoridades federales del ramo intervengan en ese sentido, pues ``parece que protegen a los contaminadores y no a los contaminados''.

Inhumanas condiciones para limpiar áreas dañadas por Pemex

En especial se refirió al caso de los chaperos, trabajadores que laboran en la zona de La Venta sin ninguna protección sacando el chapopote de las zonas afectadas por los derrames de crudo. Estas personas -entre las que se encuentran niños y ancianos- trabajan además sin protección laboral, no tienen seguro social ni otra prestación. Incluso los instrumentos de trabajo que utilizan son de su propiedad porque los contratistas, que a su vez prestan sus servicios a Pemex, no les dan nada.

Sobre este punto, Calvillo pidió a Pemex y a las autoridades del Trabajo que revisen las condiciones laborales de estos mexicanos, pues resulta inhumano que trabajen cinco o seis horas hundidos en el chapopote sin ninguna protección y casi desnudos y que al término de su jornada se quiten el chapopote con un baño de dísel.

Por otra parte exigió a la PGR que acate la recomendación de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en el sentido de investigar las explosiones ocurridas en el predio de Plátano y Cacao, donde murieron siete personas en 1995 y resultaron heridas decenas más.

Calvillo denunció que durante su estadía en el puerto de Dos Bocas, patrullas navales vigilaron el barco insignia de su agrupación, hecho que interpretó como un acto intimidatorio Los activistas de Greenpeace estarán en Ciudad del Carmen, Campeche, este lunes, donde concluirán su gira La ruta del petróleo.