Desplazó la migración urbana a la rural, revela una investigación

Martha García Ť Población urbana y de entidades con mayores niveles de desarrollo en el país conforma la nueva cara del fenómeno migratorio hacia Estados Unidos. Rostros y geografías en este fenómeno se modificaron en la última década.

En un estudio inédito, la investigadora de la Universidad Obrera de México (UOM), Laura Juárez Sánchez, explica que en los tradicionales flujos migratorios hay un ascenso de citadinos y descenso de los rurales.

Dentro de su investigación Los trabajadores indocumentados en México, aclara que en relación con 1988, la población urbana aumentó 20.8 por ciento y la rural decreció 21.7 para 1992.

En su análisis, Juárez Sánchez apunta que la gente campesina cambió sus preferencias para dirigirse a los polos de desarrollo doméstico; en tanto que los citadinos deciden ubicarse en el exterior.

Sostiene asimismo que en años recientes las entidades con mayores niveles de desarrollo en el país se perfilaron como importantes expulsoras de mano de obra.

Sobre el tema, la especialista de la UOM indica que Chihuahua, Baja California, Sonora y Durango se agregan a Zacatecas, Guerrero, Oaxaca y Michoacán como las principales fuentes migratorias.

México es uno de los principales países expulsores de fuerza de trabajo con destino a Estados Unidos, con olas migratorias ininterrumpidas que a lo largo de la historia modificaron sus puntos de origen.

Precisa que la región Centro-Pacífico (Colima, Jalisco y Michoacán) aporta alrededor de 22 por ciento de los trabajadores migratorios. En tanto, la Noreste (Baja California, Baja California Sur, Sinaloa y Nayarit) representa 20.1 por ciento.

La región Norte (Chihuahua y Durango) tiene el tercer lugar, con 19.2 por ciento; Centro (Querétaro, Guanajuato, Hidalgo, Morelos, Puebla, Tlaxcala y México), 12.7 por ciento; Pacífico-Sur (Chiapas, Guerrero y Oaxaca), aporta 8.4 por ciento.

Juárez Sánchez añade que los estados de Chihuahua, Baja California, Sonora, Colima y Jalisco, cuyos niveles de bienestar son altos, son de las entidades que reportan mayores índices de migración.

La especialista los principales municipios expulsores de mano de obra son: Morelia, Zamora y Apatzingán que aportan 30 por ciento de la migración total en Michoacán. Continúan en Zacatecas los municipios de Zacatecas, Fresnillo y Jerez (44 por ciento); Guanajuato: León, Allende, Irapuato, Celaya y Guanajuato (36 por ciento); Oaxaca: su capital representa 25 por ciento y Juxtlahuaca, Huajuapan, Zimatlán y Juchitán originan 33 por ciento.

Juárez Sánchez acota que en entre 1988 y 1993 alrededor de 83 por ciento de los indocumentados eran hombres; pero tiende al incremento en el número de mujeres y niños.