La Jornada 8 de abril de 1997

El plan antisida, retrasado tres años: agrupación de enfermos

Gustavo Castillo García Ť El Programa Nacional para la Prevención y Control del Sida enfrenta un retraso de tres años para su puesta en marcha y, por ende, de las prácticas preventivas; además, presenta cifras parciales de la enfermedad, ya que por cada enfermo del virus existen entre 10 y 15 personas que no saben que son portadores de éste, afirmaron integrantes del Frente Nacional de Personas Afectadas por VIH (Frenpavih).

Dijeron que desde 1994, al inicio de la administración del presidente Ernesto Zedillo, ``se habló en Conasida de llevar a cabo un programa de esa naturaleza, y a la fecha sigue sin funcionar''.

David --una persona afectada por el virus-- aseguró: ``en México han faltado mecanismos eficaces de combate a la enfermedad, pues reconocer ahora números, sólo destaca la carencia de labor gubernamental en la materia, desde la aparición del virus''.

Agregó que la cifras dadas a conocer por la Secretaría de Salud ``están alejadas de la realidad, pues en tanto que ellos manejan el promedio de que por cada enfermo hay cuatro personas afectadas, nuestros análisis indican que hay entre 10 y 15 portadores más que no saben de ello''.

Añadió que la falta de un programa consistente para el control y prevención de sida ha costado a la sociedad más enfermos y portadores, así como también que muchos de los enfermos hayan padecido al no contar con los medicamentos necesarios y en cantidades suficientes.

Recordó que a últimas fechas se han desarrollado protestas y manifestaciones de personas afectadas por el virus, entre cuyas demandas está la de atención médica, abasto de fármacos y calidad en los servicios.

Por su parte, Mauricio Ramos, integrante de la Fundación Mexicana de Lucha Contra el Sida, dijo que es ``alarmante la situación del sida en México, debido a la poca participación de la sociedad y a la falta de respuesta de las autoridades para el problema y, ante ello, en nuestro país el virus puede tener un sitio ideal de desarrollo''.

Añadió que ``la falta de información precisa y confiable, la carencia de educación sexual y el caso de una doble moral, son elementos que permiten un avance sustancial del número de casos''.

Aseguró: ``el programa es apenas un esfuerzo, lo mismo que la guía para la Atención Médica de Pacientes, ya que a la falta de capacitación y concientización acerca de la realidad, el problema plantea retos mucho mayores''.

A su vez, integrantes del Frenpavih indicaron que los únicos sectores que en verdad se oponen a toda prevención de la enfermedad son ``el Arzobispado, panistas y Provida''.

``Sectores reaccionarios que no ven la cuestión del sida como un problema de salud, sino de moral; acallan cualquier intento de las autoridades por establecer programas preventivos, a través de campañas tronantes contra los portadores, sin antes saber siquiera la manera en que fueron afectados''.