La Jornada 15 de abril de 1997

Formal petición a EU para reformar el tratado de extradición

David Aponte Ť El gobierno de México propuso formalmente a su contraparte de Estados Unidos reformar el Tratado de Extradición bilateral firmado en 1978, con el propósito de agilizar la entrega y los procesos judiciales en contra de los delincuentes y narcotraficantes más buscados por las autoridades policiacas de ambos países, de acuerdo con información de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Por otro lado, según un cable de Reuters, México negó que Estados Unidos pretenda presentarle una lista de cuando menos 14 presuntos extraditables relacionados con el narcotráfico. ``No existe eso'', declaró a la agencia de noticias el subsecretario de Relaciones Bilaterales de la cancillería, Juan Rebolledo, quien agregó que no hay ninguna categoría de gente que sea o no extraditable.

Por lo que hace al Tratado de Extradición, los representantes de ambos países analizarán la propuesta de reforma durante la visita a México del zar de las drogas, Barry McCaffrey --que tendrá lugar los días 16 y 17 de abril-- y en la reunión de la Comisión Binacional programada para el próximo 5 de mayo en Tlatelolco.

De manera previa, altos funcionarios del gobierno de Estados Unidos viajarán a territorio nacional y autoridades de México visitarán la ciudad de Washington para determinar las implicaciones legales de la eventual modificación, según los datos recabados ayer por este diario. En los encuentros previos, los representantes de ambas naciones examinarán la propuesta de adición al protocolo bilateral de extradición y afinarán los detalles de la visita del presidente Bill Clinton a territorio mexicano, prevista para los días 6 y 7 de mayo.

Con la incorporación de una cláusula de ``extradición temporal'', la parte mexicana busca que los delincuentes peligrosos y los jefes de las mafias del narcotráfico sean trasladados lo más pronto posible al país requirente, en este caso a Estados Unidos, una vez que han sido juzgados en territorio mexicano y viceversa. La entrega mencionada haría posible que los criminales y capos de la droga estén sujetos a procesos penales ante jueces mexicanos y estadunidenses y a la posibilidad de que cumplan sentencia en cárceles de ambas naciones.

``Lo que se pretende es combatir la impunidad y evitar que las diferencias de los regímenes jurídicos den lugar a que alguno de los países se convierta en refugio de delincuentes'', dijo el canciller José Angel Gurría el viernes pasado ante senadores y diputados.

En caso de que las partes aceptaran la adición de una cláusula de esta naturaleza, el Tratado de Extradición --firmado el 4 de mayo de 1978-- registraría su segunda modificación en los últimos dos años y medio. A finales de 1994, los gobiernos aceptaron la inclusión de un apartado para prohibir de manera expresa los secuestros transfronterizos.

La SRE confirmó que la visita a México de Barry McCaffrey tiene como propósito analizar la estrategia de cooperación bilateral contra el narcotráfico con miras a la 14 reunión de la Comisión Binacional, que incluye el tema de la extradición. En el último año, México ha concedido 16 entregas y su contraparte 23.

El zar antidrogas sostendrá encuentros privados con el canciller José Angel Gurría, el procurador general de la República, Jorge Madrazo Cuéllar y el comisionado del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas, Mariano Herrán Salvatti.