La Jornada 16 de abril de 1997

Secretarios de Estado se sumarán a las campañas priístas: Roque

José Ureña Ť El líder nacional priísta, Humberto Roque Villanueva, declaró que ``a todos los jefes de gobierno'' les asiste el derecho de acudir a los actos de su partido y, pese a las críticas que por este hecho se vierten al presidente Ernesto Zedillo, anunció que los secretarios de Estado y demás burócratas se sumarán a las campañas priístas.

Una vez respetados los principios legales, ``es perfectamente claro que los funcionarios públicos no pueden ni deben renunciar a su militancia política, no importa al partido al que pertenezcan. Lo que importa es que la sociedad mexicana pueda apreciar el cumplimiento de la ley''.

En tanto, el candidato priísta a jefe del gobierno capitalino, Alfredo del Mazo González, se dijo satisfecho por el respaldo que recibieron los aspirantes del PRI por parte del Presidente. Indicó que es aleccionadora la confianza que tiene Zedillo en que su partido sabrá convencer a la ciudadanía de su proyecto.

Añadió que es improcedente exigirle al Presidente que no tenga convicciones ideológicas y pertencer a un partido que lo llevó al poder. Sin embargo, puntualizó que la relación con los partidos de oposición debe continuar siendo respetuosa.

Por su parte el gobernador de Puebla, Manuel Bartlett Díaz, dijo que el Partido Acción Nacional incurre en una maniobra ``electorera'' y actúa ``no sólo con ignorancia, sino también con hipocresía'', al criticar al presidente Ernesto Zedillo porque el domingo pasado defendió el proyecto histórico priísta.

En rueda de prensa que ofreció la noche ayer, el mandatario salió en defensa del derecho que tiene Zedillo de proteger la continuidad del proyecto del PRI, que a lo largo de 60 años ha logrado una política con claro sentido social y que en los próximos comicios federales necesitará obtener la mayoría del Congreso de la Unión.

El gobernador de Veracruz, Patricio Chirinos, a su vez consideró absurdo, y ``eso sí totalmente antidemocrático'', que a un ciudadano que ocupa un cargo de elección popular se le prive de tener preferencias políticas. El Presidente también tiene derechos políticos. Quienes lo critican --agregó-- o lo hacen por ignorancia o con motivaciones políticas.

A su vez, el líder de la mayoría priísta en la Asamblea de Representantes del Distrito Federal, Manuel Jiménez Guzmán, consideró que el Presidente sólo ejerció sus derechos políticos y dijo que hay un binomio histórico indisoluble, legítimo, de unión ideológica entre el Presidente y el partido que lo postula.

Por otro lado, Roque Villanueva dijo que continuará adelante con las demandas en contra del panista Felipe Calderón Hinojosa, pero destacó la posibilidad de pedir la pérdida de su registro por haber violentado el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.

Por lo contrario, ``sostenemos que todos los partidos políticos contribuyan al enriquecimiento democrático de la nación. Lo que deseamos es que dichos partidos políticos se mantengan dentro de los márgenes de la ley'', insistió el también diputado y ex líder camaral.

Consideró un verdadero despropósito que se pretenda limitar la expresión política del Presidente de la República, sobre todo que él lo ha hecho con todo respeto, en una fecha y condición en la que no se altera su agenda normal de Presidente, y que lo hace sobre todo en función de un derecho que asiste a todos los jefes de gobierno en todas las sociedades democráticas''.

Terminado su discurso en el salón Presidentes de la sede nacional del tricolor, insistió en que los ataques son ``francamente improcedentes y retrógados en una sociedad que pretende ser cada vez más abierta''. Entonces un reportero le preguntó si cabe esperar que los secretarios de Estado, directores de área y demás burócratas se incorporen a las campañas del PRI. Su respuesta: ``Sí, nosotros hace algunos días difundimos un folleto sobre lo que se permite y no. Es claro que los funcionarios públicos no pueden ni deben renunciar a su militancia política, no importa al partido que pertenezcan''.

Finalmente, una pregunta sobre si ya se rompió la prometida ``sana distancia'' por el presidente Ernesto Zedillo antes y luego de tomar posesión. Frente a la reforma, concluyó Roque, ``no tiene absolutamente ningún sentido hablar ni de pequeña ni de gran distancia entre un Presidente de la República y el partido que lo llevó al poder''. (José Ureña, Víctor Ballinas, Alonso Urrutia y La Jornada de Oriente)