La Jornada 18 de abril de 1997

La intención es detener la erosión de los suelos, señala Agricultura

Matilde Pérez U. Ť Para impulsar las plantaciones comerciales forestales y otro tipo de cultivos que sean viables técnicamente y rentables en suelos agrícolas y áridos, la Secretaría de Agricultura y Ganadería acordó entregar el Procampo a los productores que tengan un proyecto dictaminado por la Secretaría del Medio Ambiente, Recursos Naturales y Pesca.

Con este apoyo se tratará de recuperar la vegetación original para detener la alarmante pérdida de suelos, explicó el coordinador general operativo de Procampo, Carlos Montañez Villafaña.

A partir de 1995, las normas de Procampo establecen que las superficies elegibles pueden ser sembradas con cualquier cultivo lícito, de esta manera la superficie que antes era exclusivamente agrícola puede ser destinada a plantaciones comerciales forestales, destinarse a huertos frutales, a cafetales o plantaciones de hule, entre otros cultivos que sean redituables para los propietarios de la tierra, abundó.

Los índices de suelos erosionados son muy altos, en algunas zonas es ``verdaderamente grave'', dijo, y como ejemplo citó el caso de la región agrícola de Tamaulipas, la cual podría convertirse en una zona improductiva debido a la erosión eólica.

Por ello la decisión interinstitucional de entregar el Procampo a los propietarios de las parcelas que cumplen los requisitos de elegibilidad para recibir dicho subsidio, pero cuya productividad es baja. En esta acción también participa la Comisión Nacional de Zonas Aridas, dependiente de la Secretaría de Desarrolo Social.

``No digo que sea la solución, pero es una opción que están vislumbrando Sagar, Semarnap y Sedesol. Hay algunas superficies que se repoblarán con especies nativas y otras con productos del desierto que tienen cotizaciones interesantes. Son alternativas técnicas y económicas para los propietarios de la tierra y tienen la ventaja de que se le da la posibilidad de un ingreso más estable al productor y se le quita lo aleatorio a Procampo.

La posibilidad de recibir el Procampo sin que obligatoriamente las superficies sean sembradas con los nueve cultivos básicos -granos y oleaginosas- está vigente desde 1995, pero por la falta de información y por ser un programa que aún no madura, la superficie beneficiada es de apenas 628 mil 626 hectáreas, es decir el 5.7 por ciento del total que recibe el subsidio.

Los estados con mayores superficies que reciben el Procampo con cultivos no elegibles son: Chihuahua (161 mil 328 hectáreas) Jalisco (67 mil 387) Zacatecas (63 mil 63) Sinaloa (46 mil 265) Michoacán (38 mil 473) Tamaulipas (37 mil 369), Puebla (22 mil 587). Las entidades registradas con menos de mil hectáreas son: Yucatán (622), Tabasco (209) y Quintana Roo (355).