Ni un paso atrás en el reconocimiento a los acuerdos de San Andrés, piden indígenas a Cocopa

Elio Henríquez, corresponsal, San Miguel, Chis., 17 de abril Ť ``Ustedes no den ni un paso atrás en su propuesta de derechos indígenas, porque esa es la que nosotros apoyamos'', les dijeron los indígenas tzotziles de esta comunidad a los integrantes de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa) que hoy visitaron varios puntos del municipio de El Bosque.

Los indígenas también pidieron a la Cocopa que intervenga para que sean liberados los 24 zapatistas presos en el penal de Cerro Hueco, a raíz de los hechos violentos del pasado 14 de marzo, fecha en que cuatro campesinos fueron muertos en San Pedro Nixtalucum; además, que sean indemnizadas las viudas y huérfanos, que se paguen los daños causados a las viviendas y se devuelvan las pertenencias robadas.

Todo esto con el propósito de que puedan regresar a San Pedro las 374 personas que ahora se encuentran desplazadas.

Frente a los legisladores de la comisión parlamentaria, los indígenas tzotziles insistieron en que el gobierno federal debe de cumplir los acuerdos de San Andrés Larráinzar, porque ``es la base principal para que haya paz, pero una paz con justicia''. Enfatizaron que mientras no se cumplan dichos acuerdos, ellos continuarán en resistencia sin recibir nada del gobierno.

Por eso también demandaron a la instancia legislativa, que intervenga para que se reinicie el diálogo entre el gobierno y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), suspendido desde el 2 de septiembre pasado.

Otra de las peticiones de los aproximadamente 30 indígenas reunidos en la casa ejidal, fue que salgan el Ejército Mexicano y la Policía de Seguridad Pública de El Bosque, porque ``no necesitamos quien nos cuide y ellos son gente de guerra, gente mala''.

Al tomar la palabra, el diputado priísta Jaime Martínez Veloz, presidente en turno de la Cocopa, les dio la razón:

``Los problemas sociales no se resuelven con acciones policiacas, sino con acciones sociales'', afirmó.

Después de visitar esta comunidad, los legisladores se dirigieron a San Pedro Nixtalucúm para tratar de hablar con los priístas de ese lugar, pero éstos argumentaron que no estaba el comisariado ejidal y, por lo tanto, no los podían atender. Advirtieron que si querían hablar con la gente tenían que comunicarlo por escrito.

De San Pedro, los miembros de la Comisión de Concordia y Pacificación se trasladaron a la cabecera municipal de El Bosque y allí se entrevistaron con las autoridades tradicionales y con el ayuntamiento popular.

Ambos grupos, según Martínez Veloz, externaron su deseo de frenar la confrontación y solucionar sus diferencias a través del diálogo.

El diputado dijo que la semana entrante, la Cocopa sostendrá una reunión para evaluar el resultado de sus recorridos y proponer alternativas de solución al conflicto en El Bosque.

Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 17 de abril Ť En la zona norte de Chiapas se vive ``un clima de violencia inusitada'' de parte de los dos grupos en pugna y la situación ``ya tocó fondo'', advirtió el senador Pablo Salazar Mendiguchía, vocero de la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), luego de que los integrantes de esa instancia hicieron un recorrido por la región.

El legislador chiapaneco dijo que en aquella zona se requiere ``urgentemente'' un proceso de reconciliación, porque si no se toman medidas ``más allá de las policiacas y militares, que vayan al fondo del problema, lo vamos a lamentar porque esos precarios equilibrios que hay están a punto de romperse''. Los ``hilos que penden para llegar a un arreglo son muy frágiles, muy delgados'', insistió.

Acerca de las declaraciones del general Mario Renán Castillo Fernández, en el sentido de que los militares se retirarían de la zona norte si así lo dictamina el Congreso de la Unión, previa recomendación de la Cocopa, el senador dijo en San Cristóbal de las Casas que ``no tenemos ningún elemento para recomendar la salida del Ejército''.

Sin embargo, más tarde, en la cabecera de El Bosque, Salazar Mendiguchía respondió a la misma pregunta y dijo: ``No conozco esa declaración, y no sé en el marco de qué evento la haya hecho el general Renán Castillo, pero si esto es cierto me parece que es un buen signo, que un buen sector lo ha estado pidiendo, aunque yo diría que no fueron la Cocopa ni el Congreso los que ordenaron la intervención del Ejército en las comunidades en conflicto. El Ejército obedece a otros mandos, no precisamente a la Cocopa, pero como un gesto de buena voluntad sería bien saludado si esto fuera cierto''.

La violencia, al límite

Luego manifestó su preocupación porque la acción militar y policiaca está desplazando a la política, y por el hecho de que una institución ``tan respetable como es el Ejército Mexicano, esté entrando en un deterioro y un desgaste por la ausencia de otras instituciones''.

Indicó que en su recorrido por Tila y Sabanilla ayer, les dijeron que en muchas ocasiones los pobladores han tenido que negociar ``en buenos términos con coroneles y tenientes. Me parece muy loable el trabajo que hace el Ejército, pero no me parece que una institución tan respetable tenga que sustituir la tarea que los civiles tienen la obligación de hacer''.

Entrevistado en San Cristóbal antes de partir hacia El Bosque, el vocero de la Cocopa expresó que durante su recorrido por el norte recogieron testimonios fotográficos de la violencia que se registra y que ``alcanza límites de brutalidad no vistos: asesinatos cometidos con una brutalidad inaudita, cuerpos mutilados, sin cabeza, sin brazos, sin manos; niños y mujeres entre ellos''. Aclaró: ``No exagero, no les quiero dar una visión catastrófica pero eso es lo que vimos''.

Asimismo, agregó, comprobamos que no hay libre tránsito, ya que en el tramo carretero de El Paraíso y Nuevo Huitiupán había varios bloqueos, y los propios legisladores tuvieron que abrir el paso retirando troncos de árboles y piedras.

Después reiteró que durante las pláticas que tuvieron con representantes de comunidades de Tila, Sabanilla y Tumbalá, entre otros municipios del norte, los integrantes de la Cocopa percibieron que hay ``un hartazgo de la violencia, de parte de los dos grupos en pugna'', aparte de que hay un ``vacío de instituciones que pudieran construir algunos equilibrios que no existen en la zona desde hace tiempo''.

El legislador comentó que por pedido de las partes en pugna -que solicitaron que la Cocopa sea la que medie en el conflicto-, la instancia legislativa se reunirá la próxima semana para estudiar la posibilidad de lanzar una iniciativa política, una tregua social, como condición mínima para que las partes se sienten a dialogar.

Al preguntarle si existen condiciones para que en la región norte se realicen las elecciones el 6 de julio, Salazar Mendiguchía respondió que las votaciones son importantes, pero ``quien esté apuntando hacia las elecciones como el objetivo central de todo el trabajo, le está herrando en la estrategia, porque simplemente lo más importante allí es la reconciliación''. Las elecciones en estos momentos en al área, recalcó, ``son un artículo de lujo'' para los habitantes.

Elaborarán un diagnóstico

Laura Gómez Flores Ť El gobierno no ha entendido que no será con ``medidas policiacas'' como se resolverán los conflictos y rezagos ancestrales en Chiapas, afirmó ayer Jaime Martínez Veloz, presidente en turno de la Cocopa, quien se pronunció por ``una nueva relación entre gobierno y pueblos indígenas, que deje de vulnerar los derechos de estos últimos''.

Al regresar a la ciudad de México tras visitar la zona norte de Chiapas, acompañado por los legisladores Fernando Pérez Noriega, Luis H. Alvarez, Juan Guerra, Oscar López Velarde y César Chávez, Martínez Veloz informó que se elaborará un diagnóstico sobre la situación que priva en Chiapas y se entregará a las partes involucradas con el fin de que se sienten a dialogar y se pueda lograr la pacificación total.

Entrevistados en el aeropuerto capitalino, los integrantes de la Cocopa señalaron que la violencia en Chiapas ha sido originada por la extrema pobreza, conflictos partidistas y de carácter religioso que deben atenderse de manera expedita.

Martínez Veloz agregó que es indispensable que se dé una nueva relación gobierno-indígenas porque éstos merecen un trato especial por el alto nivel de pobreza en que se encuentran, el cúmulo de contradicciones de carácter religioso que llevan a cuestas y los graves problemas sociales y partidistas que padecen, y advirtió que sólo así se logrará una gran tarea de distensión en la zona norte, donde la situación ha llegado a tocar fondo.

Posible, convocar a referéndum

Andrea Becerril Ť Si el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y el gobierno federal no pudieran ponerse finalmente de acuerdo, la Cocopa tiene la obligación de rescatar los acuerdos de San Andrés, presentar un proyecto de ley al Congreso de la Unión e incluso llamar a un referéndum, señaló ayer el senador perredista Héctor Sánchez.

Recién incorporado a la Cocopa, junto con Alfredo Garci Marrero -luego de la muerte de Heberto Castillo y la salida de Guillermo del Río Ortegón-, Sánchez expuso que esa comisión debe hacer público, luego de un análisis, quién tiene y quién no voluntad política para solucionar el conflicto chiapaneco para que los indígenas puedan recobrar sus derechos.

Existe también, agregó, la posibilidad de llamar a referéndum nacional si las partes no se ponen de acuerdo. ``Creo que es una salida muy válida porque el último en decir sería entonces el pueblo y el pueblo de México no va a votar por una ley que segregue al país. Personalmente estoy convencido de que la ley propuesta es eminentemente nacionalista, encaminada a resguardar y apoyar a los indígenas para que puedan tener pleno desarrollo''.

Hermann Bellinghausen, enviado, San Juan de la Libertad, Chis., 17 de abril Ť Piedras en el camino, eso hubo, en un sentido casi figurado. No la tuvo fácil la Cocopa en San Pedro Nixtalucum y El Bosque, pues resultó que los priístas (una de las partes en la situación de conflicto aquí), no esperaban a la comisión del Poder Legislativo, presidida ahora por el también priísta Jaime Martínez Veloz. Al menos eso dijeron, y por lo tanto, se resistieron a hablar con la Cocopa.

El señor Mateo González González, dirigente priísta, quien no ocupa ningún cargo ejidal pero que se presentó como el interlocutor, interponiendo entre la oficina del comisariado y los legisladores, explicó que ellos no podían hablar, y que ``Mario Arturo'' (Coutiño Ferrera, director general de Gobierno de Chiapas) había mandado llamar al comisariado a Tuxtla. Que Mario Arturo les había dicho que no hablaran de los problemas de San Pedro hasta que no estuviera la autoridad ejidal.

El senador priísta Pablo Salazar Mendiguchía preguntó a Mateo González que si los habitantes de San Pedro estaban de acuerdo con la versión de los hechos que se había dado en los medios.

--No la conocemos, respondió. Aquí no muy hablamos castilla.

--¿No escuchan radio?

--No, aquí no leemos periódico ni oyimos radio.

O sea, en este pueblo lleno de antenas de televisión, no saben lo que pasó aquí ni lo que se dice que pasó.

Media hora antes, un grupo de reporteros nos encontramos con Coutiño Ferrera, no en Tuxtla Gutiérrez, como dirían en San Pedro Nixtalucum a la Cocopa, sino en la muy cerca cabecera municipal del mismo municipio de San Juan, coordinando la entrega de los dineros de Procampo a los campesinos de San Miguel, San Pedro y otros lados. Y se mostró muy enterado de la agenda de la Cocopa. Informó que en ese momento la comisión estaba en el pueblo de San Miguel, platicando con los desplazados de San Pedro, y que luego iría a San Pedro, para terminar aquí en El Bosque.

Nada tiene de raro que supiera estas cosas, si el programa de la Cocopa se hizo público desde el sábado, y el lunes, ésta se reunió con el gobernador Julio César Ruiz Ferro. Lo raro es que, al decir de Mateo González, ``Mario Arturo'' les dijera que todavía no iba a ir la Cocopa, y mandara llamar a las autoridades ejidales el mismo día.

No sólo eso. Al retirarse de El Bosque, poco después el director general de Gobierno dijo, según las autoridades autónomas del municipio, que ``iba a reunirse con la Cocopa en San Pedro'', y agarró camino.

El convoy de la Cocopa y los periodistas salía de San Miguel rumbo a San Pedro, y se cruzó con el jeep donde viajaba el director general de Gobierno, que no se les unió, como había dicho, sino que siguió a Tuxtla.

Así que cuando bajaron a San Pedro Nixtalucum los cocopos, no pudieron aplicar la técnica Rashomon, recabando las distintas versiones de los hechos de hace un mes. Sólo conocieron la versión de los periodistas-zapatistas desplazados.

Pero sí pudieron visitar algunos casas saqueadas. Hoy más saqueadas que hace unos días, y más pestilentes. A la puerta de una, el cadáver de un perro muerto de hambre, a la espera de su amo, acentuaba la suciedad.

El diputado Martínez Veloz se preguntó, enojado, si la policía estaba aquí para cuidar el pueblo o para proteger el saqueo. No obstante, hace dos días el cuerpo de tarea de Seguridad Pública que ocupaba la escuela, se retiró del inmueble. Desde ayer hay clases, así que la Cocopa encontró un escenario distinto, distendido. Los policías reportados repartidos por el pueblo, un 40 por ciento de los niños en clases. Es decir, indicios de normalidad restablecida, aún con medio pueblo todavía desierto.

César Chávez y Juan Guerra del PRD; Luis H. Alvarez del PAN, y los priístas Salazar y Martínez Veloz corroboraron en las casas abandonadas las versiones de los desplazados sobre el saqueo, y estaban tan impresionados que casi olvidaron el enojo por el desaire con que fueron recibidos.

¿Con cuántos billetes de 50 y 100 pesos, puestos de canto, se puede llenar una mesa de oficina? El espectáculo de la billetiza dentro del edificio del ayuntamiento priísta de El Bosque es memorable. Mientras la Cocopa se reúne con el ayuntamiento ``oficial'' en la habitación adyacente, tres empleados de la empresa de seguridad Cometra distribuyen el adelanto de Procampo a los campesinos que aparecen en una lista, y van desfilando con una identificación en la mano. Reciben pequeños paquetes de plástico con los billetes que les corresponden.

El resto del dinero por adelantado de Procampo, se dice a los campesinos, será distribuido los primeros días de junio, poco antes de las elecciones, aunque en principio tocaba hasta diciembre.

En los ojos de cada mujer u hombre que desfilaba ante la providente mesa, se reflejaba un azoro curioso: seguramente nunca en su vida habían visto tantísimo dinero en efectivo. Parecía un sueño. Desde una funda, a pocos pasos, el equipo de la Dirección General de Gobierno vigilaba la operación.

En su encuentro privado con la Cocopa, el alcalde de la minoría priísta (con cuyo apoyo se instaló en El Bosque un nuevo campamento militar en días pasados), fue evasivo. En cambio, en la entrevista pública de los legisladores con el munícipe autónomo Agustín Alvarez, la Cocopa volvió a escuchar, brevemente, los reclamos de los perredistas, la historia del helicóptero que disparó, la de los 24 presos, la de los desplazados y las viudas.

Agustín Alvarez denunció que ahora el palacio municipal es vigilado por Seguridad Pública. No bien lo acaba de hacer, y pasa justo enfrente, por la estrecha calle, un Hummer del Ejército federal con las armas emplazadas por sus tripulantes.

Otro miembro del ayuntamiento perredista dice: ``Queremos la libertad absoluta de nuestros compañeros presos''. Y también: ``Ramón (el alcalde priísta) tiene que entender que la gente no quiere que estén aquí el Ejército ni Seguridad Pública''. Insiste en que quieren la paz: ``No estamos preparados para echar una guerra entre nosotros. Si vienen a agredir, pues contestamos, eso sí. Nadie quiere morir como ciego''.

Al momento de concluir su recorrido de tres días por la zona Norte, los Altos y el penal de Cerro Hueco, la Cocopa ofrece una conferencia de prensa. Jaime Martínez Veloz confirma el compromiso de la instancia legislativa de que ``se haga justicia''.

Pablo Salazar Mendiguchía responde algunas preguntas de los periodistas. Hace un balance de lo observado en Tila, Sabanilla y El Bosque (o sea San Juan de la Libertad), de sus conversaciones con priístas, perredistas, simpatizantes del EZLN, miembros de Paz y Justicia, campesinos presos: ``Existe la preocupación por parte de la Cocopa de que las acciones policiacas estén desplazando las acciones políticas en el estado''.

También afirma que ``el Ejército Mexicano está entrando en una situación de desgaste por la ausencia de otras instituciones''. El senador expresa que las distintas partes con quienes conversaron coinciden en ``la ausencia de instituciones en la zona. Encontramos que el Ejército y Seguridad Pública están trabajando en la zona. Hubiéramos querido ver otras instituciones políticas realizando con el mismo interés ese trabajo''.

Al retirarse la Cocopa iba lamentando no haber logrado integrar ``una versión completa'', pero tampoco se puede quejar: vio seguramente más de lo que esperaba encontrar.