Tepetixtla: ultimaron a líder de la OCSS

Maribel Gutiérrez, corresponsal, Acapulco, Gro., 20 de abril Ť Desconocidos asesinaron hoy a Gerardo Hurtado Arias, de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS), en Tepetixtla, sierra de Coyuca de Benítez. Este sería el noveno homicidio por motivos políticos cometido contra la OCSS, después de la matanza de 17 campesinos en Aguas Blancas en junio de 1995.

Hurtado Arias, de 19 años de edad, uno de los principales activistas de la OCSS que permanecía en Tepetixtla, el mes anterior había recibido amenazas de muerte y había sido severamente golpeado por desconocidos, debido a su militancia.

El homicidio ocurrió como a las 19 horas; según las primeras versiones, el joven estaba en las afueras del poblado, tras asistir a una boda, acompañado por otras personas que escucharon disparos de arma de fuego. Los testigos no pudieron identificar a los agresores.

``Todos los de la organización estamos amenazados. Nos tienen coraje porque no dejamos de luchar por nuestros derechos; de ahí viene todo'', comentó una mujer.

En la sierra de Tepetixtla, donde en 1994 surgió el principal núcleo de la OCSS, sus representantes informaron que prevalece un clima de violencia política, a pesar de la presencia permanente del Ejército Mexicano, que se encuentra ahí desde la primera aparición del Ejército Popular Revolucionario.

Precisamente este día, Rocío Mesino, dirigente de la OCSS, afirmó que la semana pasada unos 300 soldados del Ejército Mexicano recorrieron las calles de Tepetixtla con las armas preparadas y gritando ``No nos vencerán'', ``la guerra está declarada'', ``guerra quieren y guerra tendrán''.

En conferencia de prensa agregó que los representantes de la OCSS en Tepetixtla, Ignacio Ontiveros y Eusebio Vázquez, recibieron anónimos en los que se amenazaba con matarlos ``si bajaban de la sierra a hacer manifestaciones''.

Atribuyó esas amenazas a ``un grupo paramilitar'' compuesto por unos 15 hombres armados con escopetas automáticas y pistolas 9 milímetros, encabezados por Gabriel Vázquez, que opera en la sierra de Tepetixtla.

Informó que la comunidad de Agua Fría está prácticamente abandonada por las amenazas de muerte que recibió la mayoría de la población, las cuales también atribuyó a un grupo paramilitar.

En El Escorpión, de donde es originario un fundador de la OCSS, Hilario Mesino --preso en Acapulco--, esta semana hubo incursiones de tropas que realizaron recorridos e interrogatorios con el pretexto de que ahí puede haber núcleos de algún grupo armado.

``Pensamos que con la violencia de los grupos paramilitares y los actos intimidatorios del Ejército, el gobierno quiere que la gente se vaya de los pueblos y entonces atacar a la guerrilla o quitarle su posible base social, como ocurrió en la época de Lucio Cabañas'', expuso la dirigente.

Dijo que los priístas de Tepetixtla pretenden acusar a la OCSS del asesinato del campesino Gumersindo Sánchez y de su hijo de nueve años, cometido el 14 de abril, según versiones de la población ``por un grupo paramilitar'', cuando transportaban madera destinada a los militares establecidos en esa región, y negó la intervención de su organización en esos hechos.