La Jornada 26 de abril de 1997

IMPORTANTE HALLAZGO EN TEOTIHUACAN

Patricia Vega, enviada, Rancho Metepec, San Juan Teotihuacán, Méx., 25 de abril Ť El gobierno de la República seguirá apoyando los trabajos de investigación y salvamento arqueológico, prometió el presidente Ernesto Zedillo, quien viajó en helicóptero hasta este sitio para constatar personalmente, al filo de las seis de la tarde, la relevancia del hallazgo de una ofrenda depositada por el año 200, integrada por más de 50 figurillas femeninas y considerada como uno de los 10 descubrimentos más importantes en toda la historia de la zona arqueológica de Teotihuacán.

Acompañado por el más pequeño de sus hijos y los periodistas Jacobo Zabludovsky y Sergio Sarmiento, y luego de escuchar las exposiciones de los arqueólogos Luis Alberto López Wario, Rubén Cabrera y Jaime Delgado --responsables de la excavación en un basamento piramidal localizado en el kilómetro 624 del eje de trazo de la carretera México-Tuxpan, a unos mil 200 metros del centro ceremonial de Teotihuacán--, el presidente Zedillo señaló:


Hallazgo arqueológico en el Valle de Teotihuácan, al cual asistió
Ernesto Zedillo.
Foto: Guillermo Sologuren

``Por lo que nos han explicado, este es un hallazgo muy importante para la reconstrucción de la historia de Teotihuacán, que es una de nuestras culturas madres. Creo, por lo tanto, que si bien éste no es el hallazgo de una gran pirámide, de una gran pieza monumental, por el significado histórico que tienen estas piezas serán de gran utilidad para todo el gran trabajo que se está haciendo en la zona.''

Flanqueado por el titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA), Rafael Tovar y de Teresa, y por la directora del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), Teresa Franco, el primer mandatario revisó las 11 cajas de cartón con la leyenda ``salvamento arqueológico del INAH'', en las que se distribuyeron las delicadas piezas de barro halladas en perfecto estado de conservación, al grado de que pueden observarse detalles sobre vestimenta (tocados y huipiles) y pintura facial.

Luego de tomar en sus manos una vasija con la representación de Quetzalcóatl, el presidente Zedillo concluyó su visita, y afirmó que, independientemente del valor histórico-académico de los hallazgos --ocurridos apenas a las 9 de la mañana de hoy--, ``también son muy importantes para los mexicanos por el orgullo que todos tenemos de nuestras raíces, de nuestra historia. Aquí se ha encontrado un pedazo más de esa compleja, rica y maravillosa historia de México''.

Ofrenda mortuoria

Ubicada en un complejo residencial periférico --integrado por muros, patios, canales, cuartos y altares--, ésta es la primera ofrenda en su tipo que se encuentra en Teotihuacán: un entierro que narra, en forma escultórica, la vida del personaje, posiblemente un niño perteneciente a una familia muy importante de la zona.

Hasta la fecha se habían encontrado piezas en tres niveles de excavación, pero en el cuarto se localizó la ofrenda y los arqueólogos piensan que en el quinto nivel podrían hallar, a más tardar en unos tres días, los restos óseos de un destacado personaje, posiblemente un niño.

En la ofrenda está representado un niño chupándose un dedo y colocado en una cuna-trono; este elemento central se encontró rodeado por más de 50 figuras femeninas --su indumentaria, el huipil y los tocados indican su relevancia social--, que podrían significar a su vez una ofrenda a la fertilidad. La forma en que están dispuestas las figuras habla sobre la sociedad teotihuacana, el papel de la mujer y la estratificación social, entre otros elementos relacionados.

El arqueólogo Rubén Cabrera ha trabajado en la la zona de Teotihuacán desde hace más de 16 años. Afirma que el hallazgo se efectuó en uno de los múltiples barrios de una metrópoli ``internacional'' que estuvo habitada por diversas etnias, distribuidas en 22 kilómetros cuadrados. ``La ofrenda nos ayuda a reconstruir la historia de los grupos sociales que se encontraban en este lugar. Se trata posiblemente de la representación de un evento de una familia muy importante de la zona'', manifestó.

Ubicada en un terreno propiedad de la familia Manterola, la ofrenda queda localizada en el perímetro B de la zona ar- queológica de Teotihuacán y, por lo tanto, queda protegida por la declaratoria correspondiente.

De acuerdo con lo señalado por Teresa Franco, desde las excavaciones que comenzaron a finales del siglo pasado (bajo la dirección de Manuel Gamio) a la fecha no se había encontrado una proposición semejante, que ``fija un punto referencial que puede abrir nueva luz sobre lo que es Teotihuacán. Esto está fuera de lo que es la zona ceremonial, y responde a un conjunto de edificaciones que obligarán a reinterpretar toda la zona arqueológica''.

La Secretaría de Comunicaciones y Transportes, responsable de la carretera México-Tuxpan, ha colaborado con el INAH, modificando en cuatro ocasiones el trazo original de su carretera con el propósito de salvaguardar el patrimonio arqueológico de la región.