La Jornada 28 de abril de 1997

Ignoran ministros si la Suprema Corte propuso cambios a su ley orgánica

Jesús Aranda Ť El Comité de Estudios Legislativos de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ``no ha formulado ningún proyecto, ni iniciativa de reforma ni a la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, ni a la Ley de Amparo, ni a la Ley Reglamentaria del artículo 105 constitucional'', asevera el ministro Juventino Castro y Castro, quien precisa: ``Si la Corte ha presentado una iniciativa, es algo que yo ignoro''.

Entrevistado por La Jornada en torno a la polémica iniciativa de reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación, que ingresó al Senado de la República el pasado 10 de abril y que motivó las protestas de los priístas por la autoría del proyecto, el ministro de la Corte insiste en la necesidad de que sea ``el tribunal pleno'', es decir, los 11 ministros que integran la SCJN, los que tengan facultad de inicitiva de ley en asuntos de su competencia.

Comenta también que el proyecto de reformas referido no responde a las expectativas ni a las necesidades urgentes que tiene el Poder Judicial Federal.

Así, Castro y Castro precisa los alcances de su propuesta:

``Esto debe entenderse con toda claridad. La facultad de iniciativa no se debe confundir con la facultad de reglamentar. La soberanía del Poder Legislativo siempre está por delante''. Rechaza de manera tajante que la posibilidad de iniciativa de la Corte derivara en un enfrentamiento con los otros poderes, particularmente el Legislativo.

Al contrario, subraya, se abriría el camino para que los ministros tuvieran reuniones con las comisiones legislativas de las Cámaras de Senadores y Diputados para entrar así en el terreno de ``un nuevo, democrático y eficaz federalismo''.

``Lo que pretendo es que siempre haya una opinión viva del tribunal pleno de la Suprema Corte, que es el órgano soberano que encabeza al Poder Judicial Federal'', apunta.

La iniciativa de ley que reforma la Ley Orgánica del Poder Judicial Federal, cuya autoría se atribuye al priísta Amador Rodríguez Lozano, recibió el rechazo de sus propios compañeros, lo que motivó incluso el aplazamiento de su aprobación, ``por lo menos'' hasta el próximo periodo ordinario de sesiones, según trascendió extraoficialmente.

Para evitar malos entendidos sobre la posible participación de ministros de la Corte en la elaboración del proyecto, Castro y Castro subraya que el Comité de Estudios Legislativos, el cual integran él y el ministro Genáro David Góngora Pimentel, no han participado de manera alguna en la elaboración del mismo.

Hemos cambiado impresiones, tenemos notas, estudios de trabajo, ``pero no se ha presentado ni ante el pleno ni ante el presidente de la Corte nada; todos estos proyectos, hasta que no se me demuestre lo contrario, considero que están hechos por el Senado, hasta ahí me responsabilizo''.

La propuesta para que el pleno de ministros tenga facultad de iniciativa, indicó, no sólo favorecería el equilibrio de poderes, sino que también abriría caminos de discusión, participación y análisis. Mientras que, al interior de la Corte, se daría también un ejercicio de análisis interno, al que se invitaría a participar a los miembros del Consejo de la Judicatura Federal, magistrados y jueces de distrito, lo que conllevaría una ``transformación extraordinaria''.

``Esto no sólo sería un ejercicio democrático, sería institucional, constructivo, positivo, se acabaría el que yo dicto una ley porque así lo quiero, sin oir a nadie''.

El proyecto de reformas es deficiente

Castro y Castro señala con la mano una copia de la iniciativa de reforma a la Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación y comenta que, según el texto, en su muy particular concepto, ``las reformas se refieren a cuestiones mucho muy secundarias'', en lo que toca al Tribunal Pleno de la Suprema Corte.

Especialmente llama la atención, subraya, el que no se propongan modificaciones en relación con la competencia del pleno y las salas de la SCJN, ``que sí es cuestión que importa muchísimo a los ministros'', toda vez que las nuevas atribuciones de la Corte, como el conocer de acciones de inconstitucionalidad en contra de leyes electorales, federales y locales, y el natural aumento de asuntos de la competencia de la Corte, ``ponen en serio predicamento la rápida resolución de los asuntos del conocimiento de la SCJN''.