La Jornada 6 de mayo de 1997

No es momento de discutir sobre armas a la DEA en México: Clinton

El presidente de Estados Unidos, William Clinton, calificó de alentadora la determinación del presidente de Mexico, Ernesto Zedillo, de reestructurar el organismo de combate al narcotráfico; destacó que no es este el momento para discutir si los agentes de la DEA deben portar armas en nuestro país, y advirtió que si de manera conjunta se logra enfrentar y combatir al narco ``soy muy entusiasta sobre el futuro de México''.

En una entrevista concedida a Televisa, Televisión Azteca, Multivisión y Univisión, horas antes de iniciar una gira de trabajo por América Latina, Clinton destacó que en el corto plazo el mayor reto de los gobiernos estadunidense y mexicano ``es enfrentar el interés que los zares del narcotráfico le han dado a México''.

Durante la charla con tres cadenas mexicanas de televisión y una estadunidense, el presidente Clinton señaló: ``Estamos muy alentados con la restructuración del organismo gubernamental de combate a las drogas. El general Barry McCaffrey (zar antidrogas de Estados Unidos) está trabajando con los mexicanos, tratando de organizar esfuerzos coordinados sobre el narcotráfico, y creo que eso es muy importante''.

La entrevista del mandatario estadunidense versó sobre cinco temas: el narcotráfico, la inmigración, los procesos electorales en México, los efectos de la ley Helms-Burton y el Tratado de Libre Comercio.

Poco antes de viajar a México, el presidente de Estados Unidos calificó a su homólogo mexicano de un hombre inteligente y determinado, y aseguró que tratará a México ``como un país amigo''. Reafirmó su compromiso de desarrollar una sociedad a largo plazo con nuestro país, fundada en el respeto mutuo, y asentó: ``esta es una gran oportunidad que tenemos que aprovechar''.

Bill Clinton consideró la política de inmigración de su país ``la más amplia del mundo y la más abierta''. El año pasado, dijo, se permitió que más de 900 mil inmigrantes legales ingresaran a Estados Unidos, entre ellos una parte importante de mexicanos.

Precisó que la nueva ley de inmigración permite a las autoridades de su país agilizar los trámites para deportar a los inmigrantes indocumentados. Reconoció que ``hay ciertas disposiciones'' en esa legislación que tendrán algunas consecuencias que ``no son internacionales'', y aseguró que está ``trabajando con el Congreso para modificarlas''.

Sin precisar a qué disposiciones se refería, el presidente Clinton aseguró que Estados Unidos tiene una postura muy positiva respecto a la inmigración, y sostuvo que uno de los puntos más importantes de su gobierno es probar que su ``democracia es la más diversa''.

En relación con la exigencia de algunos sectores estadunidenses para que agentes de la DEA porten armas en territorio mexicano, el presidente Bill Clinton aseguró que existen negociaciones en este sentido entre ambas naciones y que a él no correspondía determinar o decidir en favor o en contra.

``Debemos preservar la seguridad de nuestra gente -admitió-, porque sabemos que están arriesgando sus vidas, pero tenemos que trabajar de manera conjunta. Debemos enfocarnos más en atacar y detener a quienes se dedican al narcotráfico, y no en este tema.''