Constantine: encontró la DEA en México a funcionarios ``confiables''
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 14 de mayo Ť La agencia antinarcóticos estadunidense (DEA) ha encontrado alguien en quién confiar en México, y según su director, Thomas Constantine, Estados Unidos está compartiendo información -``sobre una base limitada''- con algunas agencias de seguridad pública en el país vecino.
``Ha habido varias instituciones con las que nos hemos manejado durante los últimos tres o cuatro meses, específicamente desde el arresto del director del desaparecido Instituto Nacional para el Combate a las Drogas (INCD), en las que algunas personas han compartido abiertamente con nosotros información de carácter muy sensible'', informó hoy Thomas Constantine al caucus antinarcóticos del Senado. Agregó que estos funcionarios mexicanos han ``indicado una disposición de cooperar a un nivel que no hemos visto anteriormente''.
Hace menos de dos meses el administrador de la DEA, Constantine, informó a legisladores que ``no hay una sola institución de seguridad pública en México con la cual la DEA mantenga una relación enteramente confiable'', declaración que fue utilizada entonces para alimentar el intenso debate en favor de la descertificación de México. Pero este miércoles Constantine ofreció una evaluación notablemente diferente al responder preguntas de los legisladores.
El administrador de la DEA agregó que desde que se desmanteló el INCD, México ha establecido rigurosos procedimientos anticorrupción para sus nuevos agentes antinarcóticos, que incluyen exámenes de polígrafo, de uso de droga y el escrutinio del historial de los aspirantes, lo cual ha ofrecido a Estados Unidos una medida de confianza en el proceso.
Interrogado por La Jornada acerca de este giro en su posición, Constantine rehusó ofrecer detalles, pero cuando el senador Charles Grassley le recordó sus críticas anteriores contra México, el administrador de la DEA declaró: ``me he reunido con su liderazgo en estas últimas tres semanas y me han indicado un compromiso de poder desarrollar instituciones confiables y de compartir información''.
En lo que en apariencia fue una declaración manejada con cuidado, Constantine reiteró la advertencia tantas veces hecha en otras ocasiones, de que los niveles de corrupción en México eran más altos de los que él ha visto en sus 37 años de servicio en seguridad pública en Estados Unidos. ``Les va a tardarÉ un periodo sustancial para desarrollar instituciones de seguridad pública muy sólidas para poder lograr sus objetivos'', dijo.
Y aunque el administrador de la DEA adoptó un tono más positivo acerca de la cooperación con México, en su testimonio por escrito al caucus senatorial continuó presionando para que México coopere más plenamente sobre el prioritario tema de las extradiciones.
Señaló que los principales capos de México han sido formalmente acusados en Estados Unidos por narcotráfico y que este país ha solicitado a México que los arreste. ``Sólo uno, Juan García Abrego, ha sido enviado a Estados Unidos para enfrentar la justicia'', dijo Constantine. ``Los otros están viviendo libremente en México y hasta el momento han evadido la seguridad pública mexicana''.
Sobre este punto la DEA ha subrayado en el pasado más las fallas de la seguridad pública mexicana, pero Constantine usó hoy una forma más diplomática para decirlo. ``La violencia y la corrupción que se asociaron con el narcotráfico en México se está escurriendo a través de la frontera a Estados Unidos'', afirmó.
Tras señalar que en México algunos funcionarios públicos han sido sobornados con sumas tan altas como 18 millones de dólares, advirtió que ``si ellos (los narcos) llevaran la misma práctica de ofrecer 18 millones a funcionarios públicos en Estados Unidos, me temo que tendríamos gente que permitiría ser víctima de eso''.