Urge acabar con la invasión y venta ilegal de predios: Zedillo
Elena Gallegos, enviada, Guadalajara, Jal., 22 de mayo Ť El presidente Ernesto Zedillo habló aquí de la urgencia de poner un alto a los malos manejos especulativos a que han dado lugar interpretaciones dolosas de la ley agraria, en perjuicio de campesinos y colonos. Dijo que debe romperse el círculo vicioso de invasión, venta ilegal y regularización.
Señaló que ésta necesita hacerse considerando que todavía existen un millón de lotes urbanos de origen ejidal sin regularizar, y que en los próximos cuatro años la dinámica poblacional hará que las 116 ciudades más importantes del país requieran incorporar alrededor de 150 mil hectáreas para vivienda, equipamiento urbano y desarrollo regional.
En un acto que se efectuó en el patio del palacio de gobierno y en el que se dio a conocer el programa Suelo Social para el desarrollo urbano de Jalisco, Zedillo comentó que en los últimos trece años mientras 30 mil hectáreas se incorporaron a la reservas territoriales de las ciudades, otras 90 mil, ``esto es tres veces más'', fueron invadidas o se adquirieron a través de ventas informales de tierras de propiedad social.
Por eso, expresó que para enfrentar estos graves problemas que han perjudicado a campesinos y colonos se puso en marcha en 1996 el Programa de Incorporación del Suelo Social (Piso).
Se trata, dijo, de dar un nuevo orden a nuestras ciudades, pues en la actualidad siete de cada diez mexicanos viven en zonas urbanas.
En seguida, insistió en que la tierra que es susceptible de urbanización en su mayor parte es de propiedad ejidal o comunal, y que todavía hasta hace muy poco tiempo no se tenían mecanismos para incorporarla legalmente al desarrollo urbano.
Explicó entonces que el propósito central del Piso es promover que sean los propios integrantes de los núcleos agrarios quienes decidan meter sus lotes al mercado urbano.
Sólo así, repitió, se romperá el círculo vicioso, se desalentarán los procesos especulativos y se protegerán los intereses de ejidatarios y colonos, quienes serán los únicos que podrán beneficiarse directamente de la conversión urbana de sus tierras. ``Además, se evitan las erogaciones públicas para indemnizaciones''.
Consideró que el Piso buscará también que haya suelo suficiente y legal disponible en cada ciudad para satisfacer ordenada y oportunamente, y a costos razonables, las necesidades de vivienda, equipa- miento y desarrollo regional.
Finalmente, dijo que ya son 16 los estados que suscribieron el Piso y que este programa se apega al espíritu federalista que está impulsando su administración, por lo que en la ejecución de las acciones de este programa participan directamente los gobiernos estatales y municipales. En el caso de Jalisco, informó que para el año 2000 las zonas urbanas contarán, para responder a la demanda, con reservas superiores a las 10 mil hectáreas.
En el mismo acto, el gobernador Alberto Cárdenas Jiménez, de extracción panista, hizo referencia a la problemática del suelo que vive su entidad y cuestionó las políticas de crecimiento fragmentario y segregador que se aplicaron en el pasado.
``El deber de los mexicanos de hoy es desterrar de manera definitiva los rezagos y las desigualdades que se han ido acumulando a lo largo de nuestra historia. Nuestro imperativo ineludible es excluir la injusticia en la distribución de los frutos del progreso'', convino el gobernador.
Le dijo también al Presidente que el fin del siglo XX aparece como el escenario propicio para coronar, en forma definitiva, la transición democrática de México, fincar las bases sólidas para un mejor desarrollo humano de los mexicanos y los jaliscienses.
Visita al lago de Chapala
Ernesto Zedillo realizó una gira de trabajo acompañado por los secretarios de la Reforma Agraria, Arturo Warman, y de Medio Ambiente, Julia Carabias. Primero, estuvo en la ribera del lago de Chapala, en el municipio de Jocotepec, donde se evaluaron los alcances del programa que se inició hace dos años para desazolvar y controlar las malezas acuáticas.
Comentó que en diciembre de 1995 cuando sobrevoló el lago de Chapala fue testigo de un espectáculo deprimente, pues un amplísimo sector del lago estaba cubierto de maleza.
En esa fecha, se estimó que más de 10 mil hectáreas de la superficie del lago estaban cubiertas y ahora, según le informaron, esta cantidad se ha reducido a mil. Más tarde, en la plaza de los Laureles, Presidente y gobernador dieron a conocer los detalles del programa para garantizar el abastecimiento de agua potable a la zona metropolitana de Guadalajara y para que las aguas residuales sean tratadas. Estas acciones significarán una inversión superior a los 2 mil 500 millones de pesos, para lo cual se negocia un crédito de 200 millones de dólares con Japón. En seguida el Presidente se reunió con microempresarios y por la tarde se fue al estadio Jalisco.