La Jornada 9 de junio de 1997

AMBIENTE HOSTIL Y TRIUNFO A DOMICILIO

San Salvador, 8 de junio Ť Con mucha dificultad, el Tri se sacudió el estigma del estadio Cuscatlán en juegos eliminatorios al vencer por primera vez a domicilio a la selección salvadoreña por la mínima diferencia. El gol fue anotado por Luis García al minuto 64. Con el triunfo México se afianzó en el liderato del hexagonal de la Concacaf al llegar a 11 puntos.

Las hostilidades hacia el representativo mexicano estuvieron presentes en todo momento.

Una ensordecedora rechifla por parte de los más de 35 mil aficionados ahogó irrespetuosamente las notas del Himno Nacional mexicano y los abucheos fueron la constante cada vez que algún pupilo de Velibor Milutinovic hizo contacto con el esférico. La irritación pareció alcanzar su punto máximo tras el gol de García; sin embargo, la frustración se desbordó en la agonía del partido cuando el árbitro argentino Hugo Cordero no marcó un penal favorable a los salvadoreños al minuto 89.

La lluvia también hizo su aporte para que el partido se jugara deslucido y con fuertes roces, donde los futbolistas mexicanos equivocaron muchos pases al iniciar las acciones, carecieron de ofensividad y se desgastaron en el futbol medroso planteado por Bora Milutinovic.

Al minuto 10 Carlos Hermosillo, único hombre en punta, desperdició una buena opción después de que Marcelino Bernal estrelló un tiro en la barrera. Hermosillo encontró el esférico y sacó tiro de media vuelta, pero fue controlado por el portero local Raúl García.

Los salvadoreños marcaron a presión y fueron más peligrosos en la parte inicial, pero carecieron de contundencia en el último toque, como cuando al 27' el conjunto dirigido por Milovan D'Joric realizó un veloz arribo con un centro fue muy pasado que Elías Montes no pudo rematar.

El segundo tiempo fue dominado por el Tricolor, cuyo accionar tuvo un gran giro con la inclusión de Cuauhtémoc Blanco y Luis García, en sustitución de Ramón Ramírez y Alberto Coyote. Blanco y García se adaptaron al resbaloso e irregular pasto en combinaciones que desconcertaron al rival. Pese a que El Salvador insistió con ataque, lo hizo muy esporádicamente y sin resultados.

El primer aviso del Tri lo dio Blanco al 53', quien mediante un recorte eludió a su marcador y disparó ligeramente desviado. Su remate dio en el costado derecho de la meta del portero García. Al 64' Carlos Hermosillo cedió el balón a Alberto García Aspe, quien tiró mal y el esférico llegó al arribo de Luis García. Este recibió de zurda y disparó con la diestra para el 1-0. La lluvia seguía ligera, pertinaz; en cambio, arreció la de objetos contra la banca mexicana: hielos, vasos, monedas...

México tomó el control y se volcó a la ofensiva. Al 77' Luis García falló una inmejorable oportunidad cuando recibió un servicio de Blanco, pero su tiro resultó muy cruzado. Luego de nuevo fue Hermosillo quien echó por la borda otra buena acción: esta vez, solo frente al portero, no logró anotar y con las piernas el portero García desvió a tiro de esquina.

La polémica acción que desbordó el caldeado ánimo de la afición ocurrió al 89', cuando Elías Montes descolgó velozmente por el centro y en el área chica Camilo Romero lo fauleó por detrás para despejar el balón. El silbante se había quedado muy lejos y no marcó la pena máxima que a gritos reclamaron casi 40 mil enardecidas almas que inundaron el perímetro de la cancha lanzando diversos objetos, pese a los exhortos del sonido y del entrenador local, que pedían calma. El juez de línea Carlos Taibi resultó descalabrado.

Cordero amonestó a los mexicanos Claudio Suárez, García Aspe, Marcelino Bernal y a los salvadoreños Jorge Rodríguez y Roberto Martínez.

Al terminar el juego los árbitros argentinos y los jugadores mexicanos fueron escoltados por las autoridades policiales, con el fin de garantizar su seguridad.

Horas más tarde el Tri arribó a la capital mexicana en el que fue su primer regreso con gloria, pues desde que inició la eliminatoria sólo pudo traer empates de Costa Rica y Estados Unidos, pero lo más destacable es que con la victoria México prácticamente aseguró su calificación al Mundial de Francia, al acumular en cinco encuentros 11 puntos.

En el vestidor, Luis García tuvo motivos de sobra para estar feliz después de romper un largo ayuno de goles en la selección. El delantero apuntó con mesura que sólo aprovechó la opción que tuvo para definir el marcador. Dijo que ``más allá de eso, lo importante es que el equipo gana''. Explicó que fue un partido difícil y que México está casi dentro. ``Bastará con ganar uno o dos partidos en casa. Ya estamos con un pie, si no es que con los dos, en Francia 98'', declaró.