ASTILLERO Ť Julio Hernández López
Ni siquiera la caída del embajador José Rafael Castelazo ha logrado amainar la tormenta política en Costa Rica, donde la comisión legislativa investigadora del narcotráfico acordó la noche del pasado martes solicitar oficialmente a Estados Unidos y México ``las informaciones pertinentes de las investigaciones que se realicen en cada una de esas instancias (si las hubiera) sobre los vínculos por el lavado de dinero producto del narcotráfico que pudiesen existir en relación con el señor Carlos Hank González''.
En cumplimiento de tal acuerdo, diversas instancias costarricenses solicitarán la información del caso: el Ministerio de Relaciones Exteriores a la Secretaría de Justicia de Estados Unidos; el Centro de Inteligencia Conjunta Antidrogas (Cicad), a la DEA; la embajada de Costa Rica en Estados Unidos, a los periódicos The New York Times y The Washington Post, y la Procuraduría General de la República ``o los medios diplomáticos correspondientes'' a su similar mexicana.
La resolución se aprobó con el voto a favor de seis de los siete integrantes de la comisión mencionada, pero con el elemento llamativo de que los seis sufragios positivos provienen en equidad numérica (tres y tres) de las dos principales fuerzas políticas de aquella nación, el Partido Liberación Nacional, actualmente en el poder y principal promotor del escándalo relacionado con Hank, y el Partido Unidad Social Cristiano (PUSC), de oposición, cuyo virtual candidato presidencial, Miguel Angel Rodríguez, vino a México a visitar a Carlos Hank a su finca de Santiago Tianguistenco.
El voto en contra lo emitió el PAN, es decir, el Partido Agrario Nacional, cuyo único congresista, Víctor Hugo Núñez, se manifestó en contra por considerar insuficientemente claro el punto de acuerdo al no señalar directamente que los legisladores costarricenses abrían una investigación contra Hank. Núñez aseguró que existe un pacto entre los dos partidos mayoritarios para que el caso Hank no se estudie a fondo. Los liberacionistas y los socialcristianos aseguran que sí hay voluntad de investigar con firmeza el asunto, pero que una resolución explícita sobre Hank enfrentaría alegatos de inconstitucionalidad.
En ese sentido, el marco de referencia para los diputados será que la comisión ``investigue la injerencia de actividades privadas relacionadas con el narcotráfico en la actividad pública, ya sea por medio de financiamiento, ya sea mediante el ofrecimiento a participar o la participación en negocios a personas que pudiesen o pudieran estar en la función pública''.
La conexión mexicana
Hasta la mañana del sábado 24 de mayo, Carlos Hank González era un nombre conocido en la élite costarricense pero desconocido para el grueso de la gente. A partir de ese día, el llamado caso Hank ha estado presente en todos los medios de comunicación en lugares preferentes. A los costarricenses les han llamado la atención principalmente dos cosas: la posibilidad de que quien hasta ese momento se veía enfilado para ganar la próxima contienda presidencial hubiera ido a pedir dinero a un político mexicano relacionado en medios estadunidenses con el narcotráfico y el lavado de dinero y, por otra parte, la historia de un profesor de escuela que supo combinar política y negocios para alcanzar una fortuna deslumbrante.
Pero mientras se enteraban de los pormenores de la reunión de Santiago Tianguistenco y de la biografía del anfitrión, se dieron cuenta de la manera en que la economía nacional fue tomada por asalto por grupos económicos cuyo principal ascenso se dio durante el gobierno de Carlos Salinas de Gortari, y, además, del papel de quien pudiera ser entendido como el Hank costarricense, el ex presidente Rafael Angel Calderón Fournier, cuyo padre también fue presidente de la república desde el bando socialcristiano.
Calderón Fournier vivió y estudió en México, donde su madre fue embajadora largos años. Agradable y de buen trato, se casó con Gloria, hija de Armando León Bejarano, quien fue gobernador de Morelos y cuya persecución judicial fue suspendida por uno de los políticos mexicanos con los que Calderón se relacionó, Carlos Salinas de Gortari, durante cuya presidencia se gestó el Tratado de Libre Comercio, que abrió las puertas a las inversiones mexicanas de, entre otros, Maseca, Tribasa, Situr, Bancrecer, Bimbo y Enrique Molina Sobrino.
A propósito de Bancrecer, que en Costa Rica se llama Bancrecen y tiene 51 sucursales, un informe presentado por diputados opositores al partido de Calderón hizo constar, en una investigación sobre un fraude al Banco Anglo Costarricense, el testimonio jurado de Rafael Díaz, quien siendo auditor general de Entidades Financieras (AGEF) recibió la presión directa del entonces presidente Calderón para ``aligerar'' la aprobación necesaria para que Bancrecer se instalara en aquella nación. ``Me dijo que él tenía mucho interés en que se autorizara en esa semana la apertura del banco'', dijo el auditor Díaz, quien aseguró que el presidente Calderón le adelantó que si la AGEF daba el visto bueno la Junta Directiva del Banco Central de Costa Rica sesionaría de manera extraordinaria el viernes inmediato para aprobar el asunto. En cuanto Calderón dejó la presidencia fue contratado por Bancrecer.
Astillas
Específica y exactamente ¿qué seguirá haciendo el secretario Gurría para ``poder salvar'' la vida de Irineo Tristán Montoya? A estas alturas, ¿qué es lo que está ``dentro'' de su ``capacidad'' para defender al mexicano? De boletines de prensa está empedrado el camino a Huntsville... La implícita censura del jefe de la diplomacia mexicana a las declaraciones del candidato de un partido político lo colocan más en la tesitura de un declarante inscrito en la defensa de intereses electorales que de un canciller volcado en gestionar la salvación de un connacional... Lo bueno es que José Rafael Castelazo no es secretario de Relaciones Exteriores... Los líderes cetemistas juran y perjuran que todo está bajo control en su organización y que los problemas de salud de Fidel Velázquez no alteran la vida institucional, pero ayer todo fue nerviosismo, prisas y terror a emitir declaraciones que les pudieran hacer tropezar... Este martes declaran ante un juez Antonio Lozano Gracia y José Antonio Gándara, quienes fueron procurador y oficial mayor de la PGR... Hoy y mañana las dos últimas conferencias organizadas por el Colegio Nacional de Licenciados y Posgraduados de Ciencias Políticas, a las 18 horas en la librería El Sótano, con el tema general El cambio del sistema político: regresión autoritaria o tránsito a la democracia.
Correo electrónico: [email protected]