Aceptaremos cualquier resultado electoral: Roque

David Carrizales, corresponsal, Monterrey, NL, 16 de junio Ť El dirigente nacional priísta Humberto Roque Villanueva, afirmó aquí que su partido está preparado para la democracia y aceptará cualquier resultado que obtenga en las urnas el próximo 6 de julio.

``Nunca hay que tenerle miedo a la democracia, no le tengo miedo a ningún resultado; los partidos nos preparamos para la contienda y el que decide los triunfos o las derrotas es el electorado'', señaló.

Sin embargo, dijo que a estas alturas ``está prácticamente garantizado el triunfo en la mayoría de los distritos electorales y también la mayoría en la proporción de los votos emitidos. Lo que sí no puedo precisar es si obtendremos mayoría absoluta o relativa, pero de que vamos a ganar no tengo la menor duda, y puede anotar la fecha en que se lo digo''.

Interrogado sobre si están preparados para una derrota en el Distrito Federal, el líder priísta asentó: ``Uno se prepara para la contienda y el electorado decide''. Se le recordó que consultorías internacionales dan por un hecho la victoria de Cuauhtémoc Cárdenas, y al respecto comentó: ``También daban por hecho la estabilidad del peso en noviembre de 1994, así que hay que tomar las cosas con reservas''.

El presidente nacional del PRI rechazó que el presidente Ernesto Zedillo y su partido estén ``desesperados y nerviosos'', como señalaron los líderes de PRD y PAN, ``pues el primer mandatario está ocupado en gobernar y el partido en impulsar las campañas de sus candidatos''.

Por otro lado, acusó a los gobernadores panistas de Guanajuato, Vicente Fox; Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez; Baja California, Héctor Terán Terán, y de Chihuahua, Francisco Barrio, de recorrer el país para apoyar a los candidatos del blanquiazul, en abierta violación de las soberanías estatales y las leyes electorales, ``como modernos jinetes del Apocalipsis en representación de la intolerancia, la incompetencia, la simulación y la corrupción''.

Roque Villanueva expresó que el desplome del candidato panista en el Distrito Federal, Carlos Castillo Peraza, provocó en el PAN un grave conflicto que desequilibra su estructura de fuerzas internas, lo cual hace emerger la figura del ``personaje más controvertido'' --en alusión a Vicente Fox-- quien ``no siempre se ha alineado a los intereses de su partido''.

Consideró que por ese conflicto interno, el PAN ha concentrado sus esfuerzos en Nuevo León y el Distrito Federal, a donde ha llevado a sus cuatro gobernadores para que hagan campaña política.

Expuso que el más peligroso de los ``jinetes panistas del Apocalipsis'' es la simulación, pues la intolerancia finalmente va excluyéndolos a ellos mismos, y la incompetencia finalmente se las cobra la ciudadanía, mientras la corrupción se manifiesta con equilibrios que la propia democracia corrige.

En cambio, dijo, la simulación es aparentar que se cumple con la ley, y en el fondo violarla; aparentar que se busca el beneficio colectivo y en el fondo buscar sólo el bien personal; el que actúa con simulación, agregó, promete cosas que no se pueden realizar y disfraza todo aquello que se hace mal para ir a presumirlo fuera.

También señaló ante todos los candidatos priístas a puestos de elección popular por el estado de Nuevo León, que los gobernadores panistas ``saludan con sombrero ajeno'', al presentar como propios avances que construyeron los gobiernos de la Revolución. Son ``gorrones'', dijo, porque muy cómodos son los primeros en acudir a la ventanilla de cobro por sus participaciones, mientras el PRI siempre carga con el costo político de tener que aprobar las leyes de ingresos.

Por otro lado, ante unos cien empresarios convocados por el industrial acerero, Julio César Villarreal Guajardo (presidente del Grupo Afirme y Grupo Villacero), Roque Villanueva afirmó que es muy importante la participación política de los empresarios. Señaló que ante la madurez democrática y plural de México, ``una de las grandes ventajas, que espero nunca perdamos en el PRI, es que nosotros no queremos apriízar a México, independientemente de la correlación de fuerzas políticas. No pensamos que todos deban de pensar como nosotros, sentimos que esto corresponde más al reino del dogma que al de la conducción política, y que ésta es para impulsar democracia y pluralidad, concluyó.