Rediseñan bancos sus planes hipotecarios

Roberto González Amador Ť La lenta recuperación del poder adquisitivo de usuarios de crédito bancario se impuso como una realidad que derrotó los optimistas planes de restructuración de débitos hipotecarios, que debieron ser reforzados por iniciativa de los bancos ante el sostenido crecimiento de la cartera vencida.

Según informes oficiales, los planes de apoyo a deudores, que permitieron salvar de la descapitalización a la banca, requirieron de un subsidio fiscal por 210 mil 300 millones de pesos, cantidad equivalente a 8.2 por ciento del producto interno bruto (PIB) estimado para 1997, pero insuficiente para poner fin a la insolvencia de usuarios de préstamos, principalmente hipotecarios.

Según el Banco de México, 22 de cada 100 pesos en préstamos colocados por la banca comercial se encuentran en cartera vencida, aunque en el caso particular de los créditos otorgados para la adquisición de bienes de consumo duradero, la proporción alcanza 60 de cada 100 pesos. El banco central señala que en el caso de los préstamos hipotecarios, la cartera vencida involucra 12.2 de cada 100 pesos colocados en créditos, en un relación que supera en 4.3 puntos la registrada en diciembre de 1995.

``En el transcurso de 1996, el coeficiente de cartera vencida a cartera total de la banca comercial continuó creciendo, aunque a menor ritmo que en el pasado. Ello, aunado a las elevadas tasas de interés activas -las que cobran bancos a usuarios de préstamos- y al aún cuantioso endeudamiento de empresas y familias, contribuyó a que el otorgamiento de créditos bancarios bajara en términos reales 13.2 por ciento en el último año'', indica.

Pérdida del poder adquisitivo

La realidad impuesta por la lenta recuperación en la capacidad de pago de los usuarios de crédito ha llevado a los dos principales bancos del país a reforzar los descuentos que ofrecen a los deudores hipotecarios y ofrecer facilidades más allá de las previstas por los programas oficiales, que prevén un descuento de 30 por ciento en las mensualidades de los acreditados bancarios.

El primer paso fue dado por Bancomer, el segundo banco mexicano. Esta institución diseñó un programa para otorgar beneficios a sus clientes con créditos hipotecarios de vivienda media y residencial, que tiene dos años de vigencia contados a partir de enero de 1997.

Este programa alcanza a todos los usurios de crédito hipotecario que se han mantenido al corriente en sus pagos, y permitirá eliminar hasta seis mensualidades del adeudo, a descontar en el último tramo de vigencia del préstamo.

Bancomer tiene una cartera hipotecaria de 41 mil 70 millones de pesos, de la cual el 19 por ciento, 7 mil 803.3 millones, se encuentran en cartera vencida.

El segundo programa de su tipo fue anunciado a principios de esta semana por Banamex, el principal banco del sistema. En este caso, el banco ofrece un descuento de 25 por ciento en la mensualidad, que se suma al 30 por ciento previsto en los programas oficiales, y que será aplicable a todos los deudores que se han mantenido al corriente en los últimos 12 meses.

La creación de estos programas adicionales de descuento, a los que se sumarán en los próximos días otros bancos, ``es un reconocimiento de que los planes oficiales de restructuración de pasivos bancarios fracasaron'', afirmó el dirigente nacional del organismo de deudores El Barzón, Juan José Quirino Salas.

El líder barzonista dijo que los problemas de los deudores hipotecarios no serán solucionados con programas que son un mero paliativo, y destacó la necesidad de que banqueros y autoridades reconozcan que los pagos deben estar relacionados con la capacidad de ingreso de los acreditados.

Informes oficiales indican que 80 por ciento de los 893 mil créditos hipotecarios por unos 235 mil millones de pesos, están reestructurados en Unidades de Inversión (Udi), una unidad de cuenta indexada en teoría al crecimiento de la inflación pero cuyo valor ha crecido a un ritmo mayor.

Cuando fueron creadas, en abril de 1995, las Udi tenían un valor de un peso, pero de ese tiempo a la fecha han aumentado 90 por ciento hasta alcanzar ahora un valor de 1.90 pesos por cada unidad de inversión.

De esa forma, los créditos restructurados en Udi han crecido conforme se revalúan las Udi, pero ese dinamismo es mayor con creces al comportamiento de los ingresos de los usuarios de crédito.

Un estudio del Grupo de Economistas y Asociados (GEA) señala que en el primer bimestre de este año las remuneraciones reales en el sector manufacturero se redujeron 4.4 por ciento real con respecto al mismo periodo de 1996. Este deterioro, dice la consultoría, se sumó al de 1995 y 1996, cuando alcanzó 11 y 11.5 por ciento real, respectivamente.

En los últimos meses, apunta GEA, los principales factores que han contribuido al deterioro sistemático de los salarios reales, en un entorno de recuperación del empleo y de la producción, han sido la rigidez del salario nominal contractual --vigente por un año-- y el desfase de las negociaciones de contratos colectivos.

El Banco Mercantil del Norte informó que extenderá hasta agosto su programa de apoyo a deudores hipotecarios, con el fin de disminuir su cartera vencida. El programa incluirá a los 7 mil 600 clientes de la institución con crédito hipotecario, de los cuales el 15 por ciento está en cartera vencida.

La institución agregó que el plan prolonga hasta agosto de este año el mismo monto de pagos que los clientes tenían en diciembre de 1996.