Mantiene Bartlett la alerta roja en Puebla; reportan crecidas de lodo
La Jornada de Oriente, Puebla, Pue., 30 de junio Ť Este lunes, a las 17:55 horas, en el volcán Popocatépetl ocurrió un fenómeno considerado ``inusitado'' por las autoridades, consistente en un aumento en la sismicidad y la emisión de una fumarola de más de 10 mil metros de altura sobre el nivel del cráter, cuya magnitud ha sido la mayor desde el inicio de la actual actividad.
Esta situación provocó que el Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred) informara a las autoridades locales que se decretaba la llamada alerta roja y se llevaran a cabo los preparativos para evacuar a más de 138 mil personas en el estado, que componen la fase uno del proyecto de desplazamiento de los habitantes de la zona de riesgo.
Después de una reunión de más de dos horas con miembros de su gabinete de las áreas de salud, seguridad pública, educación y comunicaciones y transportes, así como del equipo del Centro Universitario para la Prevención de Desastres Regionales (Cupreder), de la Universidad Autónoma de Puebla, a las 21:45 horas el gobernador de Puebla, Manuel Bartlett Díaz, informó que el evento volcánico había disminuido 75 por ciento respecto a su nivel más alto.
Sin embargo, comunicó que continuará la alerta roja en indicación de la disponibilidad absoluta de los preparativos, hasta que el Cenapred informe que ha decrecido el riesgo de una erupción mayor.
Alejandro Rivera, director académico del Cupreder, reveló que en la parte sur el volcán arrojó material rocoso y ceniza que, combinada con la humedad del ambiente, se convirtió en lodo, evento que inquietó a los pobladores de esa zona.
Explicó que por las dimensiones de la cámara magmática del coloso se liberó una cantidad elevada de energía, que provocó el cambio en el comportamiento del Popocatépetl.
Por su parte, Ramón Peña Melche, coordinador del Plan Popocatépetl, aseguró que pese a las constantes lluvias de los últimos días, los caminos de la zona de alto riesgo se encuentran en buenas condiciones, mientras que ya habían sido habilitados 700 de los 954 refugios temporales disponibles.
Ambos realizaron un vuelo en el que determinaron la altitud de la pluma a unos 10 mil metros sobre el nivel del cráter, y la dirección de los vientos hacia el Distrito Federal. Debido a que había un clima lluvioso, muchas personas que viven cerca del Popo no se percataron de la enorme fumarola, por lo que prevaleció la calma, a excepción del pueblo de Santiago Xalitzintla, junta auxiliar de San Nicolás de los Ranchos, en donde se formó una crecida de lodo a las 21:30 horas, que arrastró ramas y piedras y causó un estruendoso ruido.
Alejandro Rivera y Ramón Peña reconocieron que hubo escurrimiento de lodo a causa del derretimiento del glaciar, lo que motivó que la población de Santiago Xalitzinta, Puebla, localizado a 12.5 kilómetros del cráter del Popocatépetl, fuera desalojada hacia las partes más altas del lugar.
Especialistas del Centro Nacional de Prevención de Desastres admitieron que podrían ocurrir ``derretimientos no desastrosos'' del glaciar, por lo que determinaron el desplazamiento provisional de la población.