La Jornada 17 de agosto de 1997

La ciudad, botín de minorías: Cárdenas

Alonso Urrutia Ť La ciudad de México ``se maneja como un botín para unos cuantos; esta es la razón por la cual ha crecido la criminalidad y la protección que desde los cuerpos oficiales se le brinda a la delincuencia organizada'', sostuvo el jefe de gobierno electo, Cuauhtémoc Cárdenas. Enfrentar a una delincuencia que ha penetrado ``en forma grave a los cuerpos policiacos'' no sólo requerirá de la decisión del nuevo gobierno, sino también de participación social.

Al participar en el Consejo Estatal del Partido de la Revolución Democrática, Cárdenas subrayó que una ciudad organizada para unos cuantos también ha generado distorsiones como el ambulantaje, manejado cuando no de manera clientelar, fuertemente vinculado a la delincuencia organizada, en algunos casos.

Por ello, llamó al PRD capitalino a asumir la responsabilidad de alentar una mayor participación social que permita acotar prácticas viciadas en la administración pública. Al mismo tiempo, llamó al perredismo a abrir las puertas del partido a la ciudadanía que votó por esta opción dejando de lado ``cuotas de dirección o estrecheces de criterio''.

Gobierno para todos: López Obrador

De su lado, el dirigente nacional del PRD, Andrés Manuel López Obrador, sostuvo que ``Cárdenas fue electo para gobernar para todos, no a una parte de los ciudadanos, en particular a los perredistas. Estas prácticas excluyentistas y antidemocráticas, selectivistas y revanchistas, quedan en un partido que por tantos años en el poder se creía dueño del país y, ahora que lo está perdiendo, exige que se le devuelva lo que piensa que es de su propiedad, nada más el poder político de la nación''.

Exigió que el nuevo gobierno perredista cumpla con su oferta electoral de enfrentar a fondo la corrupción.

``Tengamos en cuenta que la corrupción ahoga a los ciudadanos, envilece la política y empobrece a los grupos mayoritarios, porque el dinero para sus necesidades queda en los bolsillos de unos vivales'', precisó.

López Obrador también atajó las ansias de algunos perredistas por participar en el Ejecutivo: en el PRD no se lucha por cargos o prebendas, ningún perredista tiene derecho a exigir espacios en el nuevo gobierno, por el simple hecho de ser perredista o como una especie de cobro de facturas por participar en la campaña.

Más adelante, López Obrador sostuvo que el PRD no busca un poder ayuno de principios y de causas, ``no busca el poder para satisfacer vanidades personales, ni para dar rienda suelta a inclinaciones autoritarias, quiere el poder para ponerlo al servicio de la colectividad''.

Subrayó que en el perredismo existe claridad de ``que el partido no es el gobierno, ni el gobierno es el partido''. Por ello, dijo, en la ciudad no se reproducirán ``prácticas humillantes y vergonzozas'' de un Poder Legislativo y un partido servil como se acostumbra en la relación de los priístas. ``El jefe de gobierno hará su trabajo que la Constitución le manda; la Asamblea Legislativa, la que le corresponde, como poder independiente, y el partido en la ciudad seguirá con sus tareas políticas, fortaleciendo la estructura y organización para garantizar el triunfo en el año 2000'', añadió.

Finalmente, pidió a Cárdenas ejercer un gobierno con justicia social y jurídica para quienes son perseguidos, violados en sus derechos. ``En el México del neoliberalismo a quien reclama justicia se le aplica la ley, precisamente para negarles la justicia. En México la ley no es, justamente, sinónimo de justicia; por eso queremos un gobierno que haga justicia y no sólo aplique la ley''.

Se revertirá la corrupción policiaca

Durante su intervención, Cárdenas aseveró que la ciudad está organizada para que sean unos cuantos los que se beneficien y ha desarrollado relaciones inconvenientes en diversos rubros de la sociedad y el gobierno.

Este tipo de relaciones --añadió-- lo vemos en ``la expedición de licencias de construcción, los cambios de uso de suelo, el otorgamiento de contratos, las compras que hace el gobierno en muchos aspectos en el manejo del transporte público y en el propio ambulantaje''.

Cárdenas enfatizó la situación que envuelve al ámbito de la delincuencia y subrayó que el crimen organizado ``ha penetrado a muchos círculos en torno a la administración y corporaciones policiacas''.

Al referirse a la relación con el partido, planteó al perredismo capitalino alentar la participación social, porque ``si no logramos que la ciudadanía sustituya muchas prácticas viciadas que inhiben el desarrollo y el mejoramiento de la calidad de vida, no lograremos cumplir los compromisos''.

En entrevista, dijo que los consejos ciudadanos serán eliminados por ley, aunque anticipó que deberá buscarse que en la reforma al Estatuto de Gobierno se encuentre una nueva figura que permita sustituirlos, preferentemente con más facultades.