En la lucha por territorios, bandas tepiteñas aventajan a sus rivales de la Gabriel Hernández

Bertha Teresa Ramírez Ť Las operaciones realizadas por las policías preventiva y judicial en el barrio de Tepito en lo que va del año no han llegado a los principales centros de distribución de drogas y armas, además de que dos de las acciones policiacas más espectaculares se llevaron a cabo en martes, día de descanso del comercio en ese barrio.

Comerciantes ambulantes señalaron que Tepito enfrenta una de sus peores crisis de seguridad debido a la venta indiscriminada de armas y droga, por lo que crearon sus propios sistemas de seguridad y para lo que han reclutado y armado a cuando menos cien jóvenes de entre 18 y 25 años.

La venta de armas y droga en Tepito se da abiertamente y es solapada por las dos ``grandes agrupaciones'' de comerciantes que se disputan las calles del populoso barrio afiliadas al PRI, ya que ambas permiten la venta de cocaína y armamento que proviene principalmente de la frontera norte.

Indicaron que en lo que va del año las policías Judicial y Preventiva, así como personal de la SHCP, han llevado a cabo dos espectaculares operativos, que fueron realizados en martes, día de descanso del comercio ambulante, además de que no llegaron a los centros de distribución de dicho contrabando, localizados en las calles de Costa Rica, Jesús María, Tenochtitlán y Aztecas.

Uno de estos operativos se realizó el martes 22 de julio a muy temprana hora, en la calle de Jesús Carranza; en esa ocasión participaron 250 activos de los agrupamientos de Granaderos, Motopatrullas y Fuerza de Tarea Zorros, así como un equipo de trabajo del MP, quienes penetraron en la vecindad número 30, ``cuando se sabe que en la marcada con el número 21 es donde se encuentra la principal bodega de armas y droga''.

Las organizaciones de comerciantes que dirigen Miguel Galán y Hermelinda Rodríguez Salazar y, en menor grado, María Rosete Sánchez, tienen el control del comercio ambulante en las calles de Aztecas, Tenochtitlán y Jesús Carranza, donde se localizan los principales centros de distribución del contrabando de cocaína y de armas, principalmente de metralletas AK-47 y pistolas 380 Smith and Wesson, así como de 9 milímetros Colt y otras de fabricación checoslovaca y alemana.

Comerciantes en esa tres calles señalaron que el comercio ha contratado a su propio personal de seguridad, para lo cual se ha reclutado a unos 100 jóvenes de entre 20 y 25 años, que han sido armados con pistolas.

La agrupación de Miguel Galán aglutina a unos mil comerciantes ambulantes que se ubican en las calle de Aztecas, Eje Uno Norte, Florida, Costa Rica y Caridad. La agrupación de Hermelinda Rodríguez controla la calle de Jesús Carranza hasta la calle de Florida.

``En ese perímetro --según los comerciantes-- se ubican los centros de mayor venta de armas localizados en las vecindades de Tenochtitlán marcadas con el número 40 y 25 y Jesús Carranza número 21''. Los vendedores consultados indistintamente mencionaron además las calles de Comomfort número 3, Paraguay 65, ``toda la calle de Leandro Valle'', así como parte de la calle de Libertad, e incluso en ésta, dijeron, se llegó a usar un módulo abandonado de la policía para comercializar la droga y la venta de armas.

Sólo por pedidos

El precio de las armas de alto poder depende de la oferta y la demanda y sólo se venden por pedidos, que son atendidos en un promedio de cinco a seis días.

Para hacer pedidos de armas como la AK-47, cuerno de chivo, es necesario tener un contacto de lo contrario; las armas no se consiguen fácilmente. ``Todos saben en Tepito que las muertes y riñas entre pandillas no son sólo por el control de la venta de droga, sino por la de armas''.

La policía, así como los líderes de las agrupaciones de comerciantes, están ``plenamente enterados del tránsito y operación de este mercadeo y solapan su libre comercio para que no se les deshaga la agrupación para mantener su estabilidad''.

Son cinco pandillas las que se disputan este mercado, las cuales se han dividido las calles y luchan entre sí por la supremacía. Hace apenas medio año los tepiteños fueron testigos de un ``funeral de película'', luego de que murió ``un zar de la droga de apenas 25 años. conocido como El Tolín''.

``El Tolín murió durante una balacera, cuando cobraba algunas deudas; a su funeral asistió mucha gente, incluso agentes policiacos; por lo menos cinco camionetas Suburban pararon el tránsito en la calle de Comomfort, mientras transitaba el cortejo y tuvieron que contratarse vehículos especiales para trasladar la impresionante cantidad de ofrendas florales que llegaron a donde se velaba''.