A machetazos lincharon a dos ladrones en Pueblo Nuevo, Morelos
Francisco Guerrero Garro, corresponsal, Tlaltizapán, Mor., 21 de agosto Ť Campesinos de la comunidad Pueblo Nuevo mataron a machetazos a dos asaltantes que despojaron a jornaleros y lesionaron a uno de un escopetazo. Otro malhechor logró huir herido.
La Procuraduría General de Justicia Estatal (PGJE) aprehendió a dos de los participantes en el linchamiento, lo que provocó el enardecimiento de los habitantes. Estos argumentan que fue en legítima defensa, por lo que amenazaron con secuestrar a policías judiciales en reclamo de la libertad de sus compañeros.
Los detenidos son Carlos Miguel Mendoza Peñaloza y su primo Miguel Angel Mendoza Salgado, con domicilio en Pueblo Nuevo, en este municipio, quienes se encuentran formalmente presos, relacionados con las averiguaciones previas JO/999/97-08 y JO/1000/97-08. La primera por homicidio y la segunda por intento de homicidio y lesiones graves.
Según versiones de elementos de la Policía Judicial Estatal (PJE), los hechos ocurrieron en el paraje denominado Huamantla, donde poco más de 10 campesinos se encontraban reunidos con su patrón, cuando de forma sorpresiva tres asaltantes los amagaron con dos pistolas y una escopeta y los quitaron sus pertenencias.
El atraco parecía no pasar de ahí, pero uno de los asaltantes accionó su escopeta e hirió a uno de los jornaleros, por lo que el resto reaccionó sacando sus machetes para responder a la agresión y linchar en el lugar de los hechos al maleante Alberto Ocampo Alvarez, a quien prácticamente lo despedazaron y lo dejaron tirado entre unos cañaverales.
Los asaltantes, al darse cuenta de que su vida peligraba, intentaron huir, pero sólo uno de ellos pudo hacerlo, pues logró llegar a donde habían dejado una camioneta y abordarla. Su otro acompañante, Tomás Ocampo Alvarez -hermano del primer asaltante muerto y abandonado en el paraje Huamantla-, recibió varios machetazos de parte de los campesinos, quienes se lo llevaron a rastras, vivo, hasta la entrada de su comunidad.
Allí, en Pueblo Nuevo, cerca de donde se instala el tianguis, informaron a los comuneros de lo ocurrido en el ejido, lo que provocó que éstos se enardecieran y reiniciaran la agresión a machetazos y pedradas hasta dar por muerto al asaltante.
Sin embargo, al percatarse otros pobladores de que el delincuente aún permanecía con vida, dieron parte a rescatistas de la Cruz Roja, quienes se trasladaron al lugar y de inmediato lo trasladaron al hospital general Ernesto Meana, en Jojutla, donde falleció. Allí tomó conocimiento de los hechos el agente del Ministerio Público, que informó e instruyó a la PJ para que investigara y procediera conforme a derecho en contra de los responsables.
Antes de fallecer, este asaltante notificó a la Cruz Roja y al Ministerio Público sobre la suerte que había corrido su hermano, por lo que de nuevo se trasladaron a Tlaltizapan y, después de un rápido recorrido por Huamantla, encontraron entre los cañaverales a Alberto Ocampo, quien a pesar de estar macheteado presentaba señales de vida. Se dispusieron a trasladarlo al hospital, pero murió en el trayecto.