La Jornada 25 de agosto de 1997

Zapatistas sin armas y soldados, frente a frente en Larráinzar

Juan Balboa, corresponsal, San Cayetano, Chis., 24 de agosto Ť Un cinturón humano formado por miles de zapatistas con pasamontañas o paliacates mantenía rodeados, hasta la medianoche de hoy, a unos 250 soldados que desde este sábado pretendieron reinstalar el campamento de San Cayetano, en el municipio de San Andrés Larráinzar, mismo que abandonaron el pasado 12 de agosto.

Centímetros dividen a los efectivos del Ejército --entre ellos tropas de élite transportadas en helicóptero-- y los zapatistas desarmados, que repudiaban a gritos la presencia militar en las zonas indígenas de Chiapas; los calificaban de ``asesinos, defensores del mal gobierno y represores'', tocaban sus armas y les palmeaban la quijada con una expresión retadora: ``soldadito''.


Bloqueo en la Comunudad de San Cayetano, municipio de San
Andrés Larráinzar.
Foto: Juan Balboa

La tensión aumentó cuando arribaron cuatro helicópteros del Ejército y del gobierno estatal, que transportaban a una fuerza de élite con fusiles de asalto R-15. Fue en la tarde cuando la tensión llegó a su clímax y se estuvo a punto de una confrontación.

-Dispárame de una vez. Aunque me mates, vas a morir también, le espetaba un indígena tzotzil con pasamontaña a un soldado que se veía visiblemente nervioso.

Una comisión de zapatistas pidió a gritos a un general -que dijo apellidarse Bautista- que atravesara el cordón para negociar la retirada de la tropa. Este accedió e inició una plática con los inconformes.

-Queremos que se vayan de aquí. Estas son tierras de campesinos y de ellas viven -señaló uno de los indígenas que formaban la comisión.

-Necesitamos que nos ordenen para retirarnos. Yo me quisiera ir ahorita. Entiendan que es domingo y es un día que no se trabaja -contestó el general.

-No queremos que se queden en nuestras tierras ni un momento más, tienen que salir, la gente no quiere que estén aquí. La gente está llorando, las parcelas del campesino las están invadiendo y no tienen qué comer -señaló el indígena.

El general Bautista aseguró que no era el propósito del Ejército permanecer indefinidamente en San Cayetano y dio esta respuesta textual:

-La cosa es que se nos extraviaron unos aparatos que probablemente no sirvan a las personas y los venimos a buscar.

El indígena sólo advirtió:

-Si no salen, otra cosa va a suceder.

Hasta la medianoche del domingo se mantenía el escudo militar que protegía al general y a unos centímetros permanecía el cordón zapatista que sitiaba a los militares, sin importar la lluvia y la niebla que empezó a invadir el antiguo campamento de San Cayetano.

Intenta la Sedena recuperar esa y otras dos posiciones

El Ejército Mexicano intenta recuperar las tres estratégicas posiciones contrainsurgentes -San Cayetano, Jolnachob y Santiago el Pinar- en el municipio de San Andrés Larráinzar, que quemó y abandonó el pasado 12 de agosto.

Ese día y durante dos más, repentinamente y en silencio, abandonó sus posiciones y retiró todos sus tanques de guerra de ese municipio, en una movilización que el propio comandante de la séptima Región Militar, Mario Renán Castillo, calificó de ``un reajuste'' en su dispositivo militar.

Desde el sábado, sin embargo, los militares regresaron a San Cayetano con la pretensión de rearmar su campamento. Sin embargo, en la madrugada del domingo simpatizantes del EZLN bloquearon la carretera que comunica a San Cayetano con el Aguascalientes de Oventic, para evitar la acción castrense.

Los zapatistas bloquearon con piedras e hicieron vallas humanas en los dos accesos al que fuera uno de los campamentos más importantes del Ejército Mexicano en los Altos de Chiapas, y lograron evitar, hasta la tarde, que los militares volvieran a invadir los terrenos ejidales.

Durante el día, unos 500 simpatizantes del EZLN marcharon por la carretera que comunica a San Andrés Larráinzar con el poblado de Puerto Caté para exigir, a gritos, la salida de las fuerzas armadas. Una de las mantas instalada en el bloqueo pedía al presidente Ernesto Zedillo la inmediata salida del Ejército Mexicano y se pronunciaba por una paz justa y digna en Chiapas.

``¡Fuera el Ejército de las comunidades indígenas!'', ``¡No queremos prostitución ni alcoholismo!'', ``¡Queremos paz y no armas!'', gritaron minutos antes de bloquear la carretera, a unos cinco kilómetros del Aguascalientes de Oventic.

Hasta el pasado 12 de agosto, en el campamento de San Cayetano se concentraban unos 500 militares y una docena de modernos tanques de guerra del 22 Batallón de Infantería y el grupo de élite conocido como Fuerza de Tarea Arcoiris, creado especialmente por el Ejército Mexicano para afrontar el conflicto armado en Chiapas.

La marcha zapatista saldrá el 9 de septiembre de San Cristóbal

Elio Henríquez, corresponsal, San Cristóbal de las Casas, Chis., 24 de agosto Ť La ``gran marcha zapatista'' motorizada al Distrito Federal -para exigir el cumplimiento de los acuerdos de San Andrés y en contra de la militarización de las zonas indígenas- partirá el 9 de septiembre de esta ciudad, informó hoy el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).

En un comunicado firmado por el subcomandante Marcos y divulgado hoy aquí, el EZLN afirmó que los mil 111 rebeldes, más los indígenas de diversas organizaciones que se sumarán a la caravana, serán despedidos con un acto político que se efectuará en San Cristóbal el día 8 por la tarde.

De acuerdo con el itinerario dado a conocer por el grupo armado, la caravana motorizada recorrerá los estados de Chiapas, Oaxaca, Puebla y Morelos, de donde, ``siguiendo la ruta que tomaron las tropas del general Emiliano Zapata en 1914'', marcharán hacia el Distrito Federal, el día 12 de septiembre.