Política, no técnica, la decisión sobre la compra de trenes del Metro: Luege

Miriam Posada, Juan Manuel Venegas y Víctor Ballinas Ť El Sistema de Transporte Colectivo-Metro (STC) informó ayer que en el caso de la licitación pública internacional DCE/015/97 para la adquisición, suministro, puesta en servicio y mantenimiento de 28 trenes de rodadura neumática para la línea B, ``se actuó con estricto apego a las disposiciones jurídicas''.

El STC reconoció que en el proceso surgió una controversia, pero ``exclusivamente por cuestiones técnicas, no económicas, legales o de procedimiento''. Agregó que el organismo de transporte público estará en posibilidad de dar cumplimiento a la anulación que decretó la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo (Secodam) al procedimiento de evaluación y fallo de las ofertas técnicas una vez que sea levantada la suspensión de la referida licitación y sea notificado oficialmente el Metro de la resolución.

La empresa Bombardier-Concarril no podrá acceder, por el momento, a los informes que la Secodam elaboró para nulificar el procedimiento de licitación de los trenes de la línea B del Metro de la ciudad de México, debido a la suspensión provisional del procedimiento administrativo que decretó la juez décima de distrito en materia administrativa, Emma Margarita Guerrero Osio.

Como parte del juicio de amparo 568/97 que promovió la empresa CAF México -que también compitió por obtener el contrato para el suministro y mantenimiento de los trenes-, sus representantes legales solicitaron la mencionada suspensión provisional con el propósito de evitar que Bombardier accediera a información que pudiera afectarla, concretamente a su propuesta técnica y económica con la que participó en la licitación.

En tanto continúa el curso del juicio de amparo en el juzgado de referencia, la suspensión provisional pasará a revisión (promovida por la Contraloría) a alguno de los tribunales colegiados de distrito en materia administrativa del Distrito Federal, que analizará si fue correcta o no la suspensión dictada por la juez en contra del acto administrativo reclamado.

Según lo que trascendió, Guerrero Osio consideró procedente la petición de CAF México, toda vez que en caso de que Bombardier conociera los informes oficiales respecto a la nulidad de la licitación mencionada, podría causar un daño ``imposible de reparación'' al quejoso, por lo que estimó conveniente preservar su derecho.

Por lo demás, la resolución de la Contraloría ya está tomada, y destaca que el Departamento del Distrito Federal (DDF) -a través del STC- ya había dictaminado en favor de Bombardier (se aclara que es capital francés y canadiense), a pesar de que, advirtió ahora la Secodam, no se cumplieron las especificaciones técnicas de las bases de la licitación.

Decisión política: Luege

El presidente de la Comisión de Transporte de la Asamblea de Representantes del Distrito Federal (ARDF), José Luis Luege Tamargo, señaló que la decisión de la Secretaría de la Contraloría y Desarrollo Administrativo para declarar desierta la licitación de la compra de trenes para la línea B del Metro ``fue de carácter político y no bajo sustentos técnicos''.

Por ello, aseveró, la comisión solicitó de manera formal a Jorge Ramírez de Aguilar toda la información que teóricamente evaluó la Secodam en un proceso de investigación ``sospechoso'' y que no tardó más de un mes en realizarse.

La Secodam, subrayó Luege, le dio una solución muy fácil a un problema complejo, ``porque es difícil pensar que una instancia como el Instituto de la Universidad Alemana de Dresdner tenga capacidad para emitir un juicio en torno a una legislación de un alto grado de complejidad, incluso para México, y sobre todo en un marco jurídico muy distinto del que puede ser el europeo''.

En la misma tónica, Luege señaló que tampoco el Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (IPN) es sujeto de toda credibilidad, ``porque muchos de los funcionarios que avalaron la descalificación del grupo CAF son egresados o profesores eméritos de esa institución''.

A su vez, Bombardier-Concarril informó que oficialmente no se le ha notificado su descalificación, y en caso de que eso se hiciera tendrían que explicarle -tanto la Secodam como el DDF- los puntos de la licitación que no cumplió.

No obstante, se indicó que esa compañía ha construido más de 53 por ciento de los trenes del Metro, ``pues no hay muchas empresas en México que se dediquen a ello''. Asimismo, Bombardier-Concarril dijo que junto con CAF ganó un contrato por más de 200 millones de dólares para reconstruir trenes del Metro.