Carlos Menem ofrece pulverizar desempleo y pobreza en Argentina
Stella Calloni, corresponsal, Buenos Aires, 16 de septiembre Ť Una vez más, como en 1995 antes de los comicios generales, el presidente Carlos Menem se com- prometió hoy a ``pulverizar el desempleo'' y derrotar la pobreza en Argentina, en un discurso de campaña en el que anunció la creación de más de un millón de empleos y aumentos a jubilados y docentes.
Aprovechó la ocasión para atacar a la oposición, augurando la ``destrucción'' y el desastre en el país si gana ésta en los comicios legislativos de octubre próximo.
En un acto del gobernante Partido Justicialista, Menem aseguró que el empleo aumentó desde que él asumió en 1989 en un 4 por ciento anual, pese a que bajo su gestión la desocupación creció hasta su pico histórico, con un 18.6 en 1995 y un 17.3 actualmente, según cifras oficiales.
El mandatario peronista se autoproclamó ``el único en condiciones de resolver el problema del desempleo'' y dijo que una reciente encuesta (gubernamental) determinó que 73 por ciento de los argentinos opina que es ``el presidente Menem quien puede pulverizar el desempleo'', en un disparo por elevación contra el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Eduardo Duhalde, el mejor aspirante para la candidatura justicialista para 1999.
Menem --quien se refirió a la crisis mexicana y dijo que fue provocada por problemas locales-- ofreció mejorarlo todo: salarios, contribuciones especiales para pequeñas y medianas empresas, calidad del empleo, establecer subsidios de unos 150 pesos (igual dólares) durante 18 meses para trabajadores mayores de 45 años.
También prometió crear un millón cien mil empleos nuevos de aquí al año 2000 y reducir la jornada laboral, mientras reconoció a la progubernamental Confederación General del Trabajo (CGT) como la única central sindical autorizada a negociar con el gobierno. Pero analistas locales advirtieron que ``en el presupuesto anunciado por el ministro de Economía, Roque Fernández, para 1998 no está estimado nada de todo lo que propuso y decretó el presidente'', y la pregunta clave es de dónde saldrían estos fondos.
El gobernador Duhalde, por su parte, anunció que indexará los salarios de su provincia, luego de calificar a Graciela Fernández Meijide, candidata de la alianza opositora conformada por el Frente País Solidario y la Unión Cívica Radical, de un ``(Raúl) Alfonsín con polleras (falda)'', en alusión al ex presidente radical, bajo cuya gestión se disparó la inflación, en un aumento de decibeles de una de las campañas más ``sucias'' que se recuerde aquí.
Incluso el ministro de Hacienda, Pablo Guidotti, advirtió que los aumentos prometidos no están previstos en el presupuesto, al tiempo que la ministra de Educación, Susana Decibe, habló de un periodo de ``tres años'' para ir aumentando el sueldo a los docentes. El ministro de Economía, Roque Fernández, rechazó cualquier aumento a los docentes y dijo que de ``tres que cobran, uno trabaja''.
Para otorgar el aumento prometido a los jubilados, el gobierno de Menem necesita unos 800 millones de dólares, y para el de los docentes, unos mil millones, pero nadie sabe de dónde saldrán.
Los anuncios de Menem evidencian la preocupación por el avance de la Alianza para la Justicia, el Trabajo y la Educación conformada entre el Frepaso y la UCR. El reciente triunfo de la alianza en las legislativas de la provincia de El Chaco y las cifras que dan a ésta más de 36 puntos en la capital federal, así como los guarismos en la importante provincia de Buenos Aires, donde la oposición y el oficialismo disputan el terreno palmo a palmo, engendró una espiral de violencia verbal.
El líder de la centrista UCR, Rodolfo Terragno, llamó al gobierno a la calma tras enumerar las modalidades de ``guerra sucia'' utilizada en los últimos días.