Sólo nos resta esperar la reacción del gobierno, señalan jefes de la marcha
José Gil Olmos Ť Durante la despedida del contingente de 1,111 zapatistas, en un mensaje leído, el subcomandante Marcos aseguró que el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) continuará efectuando acciones civiles y pacíficas, ``y no la guerra'', para construir la paz en el país. Además, ratificó el compromiso del EZLN de continuar luchando por el reconocimiento a los derechos de los pueblos indios.
Asimismo, el representante de la Comandancia General del EZLN dijo que continuarán luchando ``por hacer inútiles las armas''.
Integrantes de una docena de organizaciones sociales y populares, unas dos mil personas reunidas en la Plaza de las Tres Culturas que acudieron a despedir a las comunidades de base zapatistas -que regresan a Chiapas este jueves por la madrugada-, escucharon el mensaje de Marcos donde criticó al gobierno federal y al PRI, señalando que mientras dicen ser legales ``realizan acciones violentas, encarcelan y persiguen''. El EZLN, en cambio, dijo que mientras los declaran ilegales efectúan acciones civiles y pacíficas.
Por su parte, en mensajes por separado, los representantes de una decena de organizaciones urbano-populares y estudiantiles señalaron que lucharán por exigir al presidente Ernesto Zedillo que se cumplan los acuerdos de San Andrés y se desmilitaricen las regiones indígenas y campesinas del país.
Luego de una lluvia torrencial y una espera de dos horas del contingente zapatista, a manera de adiós, el subcomandante Marcos reiteró la postura zapatista de buscar la legitimidad no en el gobierno sino en el población civil. ``La legitimidad la da el pueblo y es a él, a ustedes, a quienes debemos dirigirnos. La paz nueva, la paz con justicia y dignidad, la única paz posible está con ustedes. Con ustedes la buscaremos y en ustedes la encontraremos'', dijo Marcos también en nombre del Comité Clandestino Revolucionario Indígena (CCRI).
Dirigiéndose siempre a la sociedad señaló que la marcha de las bases de apoyo del EZLN y su estancia en la ciudad de México fueron un mensaje abierto y que cada quien sabrá leer el mensaje que le toca. Pero para los zapatista fue una nueva lección de unidad ``de que no estamos solos''.
Antes, en tres mensajes seguidos, el agrupamiento especial Emiliano Zapata de las bases de apoyo del EZLN, dio las gracias por la cooperación y solidaridad de las organizaciones urbano-populares que los acogieron y alimentaron en la ciudad de México.
``De por sí, desde hace casi cuatro años sabíamos que en esta ciudad teníamos hermanas y hermanos que se preocupaban de nosotros. Pero hoy lo sabemos con más certeza. Más allá de la distancia que hay entre las casas de ustedes y nuestros pueblos, hay algo que nos une, y que hoy es más fuerte'', dijo uno de los responsables de la Comisión Política del contingente indígena en un mensaje fuertemente aplaudido.
Para los zapatistas la unión con las organizaciones urbano-populares es la de pertenecer al México de los de abajo, ser parte de aquellos a los que el poder quiere eliminar. ``Nos une el saber que nuestra fuerza está en nuestra unidad. Nos une la lucha por otra patria, donde quepamos ustedes y nosotros y, también, todos aquellos que hoy no tienen un lugar en el futuro'', fue el mensaje de los zapatistas.
También quisieron destacar el trabajo de las mujeres del Distrito Federal ``aplaudiendo, gritando consignas de lucha, trayendo comida y ropa, bailando y conversando'' como si en esta ciudad las mujeres ``tuvieran su propia ley revolucionaria y la pusieran en práctica''.
Luego, ya en la noche húmeda de Tlatelolco, vinieron los representantes de las organizaciones sociales más amplias de la ciudad de México y zona conurbada, que en su mensaje coincidían en la unidad de la lucha por transformar el sistema neoliberal impuesto en el país por el actual gobierno.
Ahí estuvieron, entre otros, la Unión Popular Revolucionaria Emiliano Zapata (UPREZ), la Asamblea de Barrios Patria Nueva, la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), el Frente Popular Francisco Villa (FPFV), el Partido Revolucionario del Pueblo (PRP), Alternativa Socialista, el PRD, Frente del Pueblo, Convención Nacional de Mujeres, el Comité Estudiantil Metropolitano (CEM) y la Unión de Cuartos de Azotea Independiente (UCAI).
Angeles Mariscal y Elio Enríquez, corresponsales, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 17 de septiembre Ť El gobierno estatal nombró a Marco Antonio Besares Escobar como procurador de Justicia en sustitución de Jorge Enrique Hernández Aguilar, quien en dos años y medio de gestión recibió 175 recomendaciones de las comisiones Estatal y Nacional de Derechos Humanos, pero ahora se hará cargo del Consejo Estatal de Seguridad Pública.
Asimismo, el gobernador Julio César Ruiz Ferro nombró a Antonio Santiago Becerra y Antonio Pérez Hernández como titulares de las secretarías de Educación y para la Atención de los Pueblos Indígenas, respectivamente.
Entrevistado en San Cristóbal de las Casas, Ruiz Ferro negó que Hernández Aguilar haya sido removido por incapacidad. ``Por el contrario, hemos avanzado en muchas cosas y la prueba es que al ex procurador lo estamos invitando a otra tarea muy importante también'', aseguró Ruiz Ferro.
Del 8 de diciembre de 1995, cuando Hernández Aguilar asumió la Procuraduría de Justicia, a la fecha se suscitaron diversas acciones violentas en el estado donde a pesar o con motivo de la intervención de las fuerzas policiacas, más de 70 personas murieron, según se pudo cuantificar en comunicados que el mismo gobierno ha emitido.
Entre estos destaca lo ocurrido el 10 de enero de 1996 en el municipio de Chicomuselo, donde se enfrentaron militantes perredistas con la policía y un grupo de guardias blancas. Asimismo, el 27 de marzo de ese año campesinos del municipio de Venustiano Carranza fueron emboscados por policías, muriendo dos de los labriegos.
En cuanto a las recomendaciones emitidas por la CEDH y la CNDH, éstas se derivaron de abusos de autoridad, denegación en la aplicación de justicia, detenciones arbitrarias y no cumplimiento de órdenes de aprehensión.