Agentes dicen ser ``una brigada para ajusticiar'' al EPR, acusa un campesino
Maribel Gutiérrez, corresponsal, Acapulco, Gro., 29 de septiembre Ť El campesino Gerónimo Hernández Refugio presentó hoy denuncia formal contra agentes de la Policía Judicial Federal (PJF) que lo detuvieron y torturaron para obligarlo a declararse miembro del Ejército Popular Revolucionario. El hombre afirmó que sus agresores se dijeron efectivos de una ``brigada de ajusticiamiento que pretende acabar con el EPR'', y señalaron nombres de personas a quienes involucraron con el grupo armado, entre ellas esta corresponsal.
Hernández Refugio, de 19 años, militante del PRD, de la Organización Campesina de la Sierra del Sur (OCSS) y sobreviviente de la matanza de Aguas Blancas, fue detenido la madrugada del 22 de septiembre en Atoyaquillo, sierra de Coyuca de Benítez, por policías que llegaron en un convoy integrado por camionetas de la PJF y dos vehículos Hummer del Ejército, y volvió a su domicilio la madrugada del viernes 26.
Su denuncia se integró a la averiguación previa TAB/COY/348/997, informó el agente del Ministerio Público del fuero común de Coyuca de Benítez, Gregorio Bermúdez Vargas.
En el mismo expediente, la esposa del agraviado, Victorina Valente Martínez, ratificó su acusación en contra del agente de la Judicial Federal, Rubén Valadez Jiménez, a quien identificó como uno de los policías que llegaron al pueblo acompañados por efectivos del Ejército, y se llevaron a su esposo, después de golpearla a ella, a sus hijos de 2 y 3 años, y de amenazar de muerte a su suegro, Juan Hernández Lozano.
Según la declaración, tras ser puesto en libertad, el campesino y su esposa fueron llevados a las oficinas de la PGR en Acapulco el viernes 26.
Ahí, por medio de amenazas de muerte, fueron obligados a declarar ante el agente del Ministerio Público Federal. En este testimonio, dado también este domingo en Atoyaquillo, en una asamblea del pueblo, Gerónimo informó que durante su cautiverio fue obligado a firmar un documento donde admitió ser parte del EPR, y aceptó colaborar con sus captores ``entregando'' armamento y combatientes de ese grupo armado.
``Todos son guerrilleros''
El campesino señaló que los torturadores dijeron ser miembros de la organización ``Fuerzas Zapatistas de Liberación Nacional'', que ``se mueven'' en la sierra de Guerrero, por el área de El Mameyal, municipio de Petatlán, y que pretendían ``acabar con el EPR'' porque ``los había traicionado''.
Agregó que los torturadores, ``tres hombres con acento del DF'', que llevaban el rostro cubierto con paliacates rojos, a quienes pudo ver poco antes de ser liberado, le presentaron listas de integrantes de la OCSS de varias comunidades, a quienes tienen como personas vinculadas al EPR.
Le dijeron que ``todos los integrantes de la OCSS, todos, son guerrilleros''.
Le advirtieron que ``el que sigue, después de ti'', era José Sánchez Sánchez, abogado de esa organización, ``porque es líder de la organización y está vinculado con el EPR''.
Mencionaron al dirigente de la OCSS, Benigno Guzmán, de Tepetixtla, preso en Acapulco; a Rocío Mesino y a su hermana Norma, de Atoyac; de Coyuca de Benítez a los hermanos Reyna y Fortunato Avelino, y a Miguel, sin decir el apellido, que según ellos ``es quien tiene el mando militar del EPR en Coyuca''.
De Atoyaquillo le dijeron que los próximos detenidos iban a ser Cenobio Hernández, Santana Rogel, José González, Alberto González, Ciro Martínez, Miguel Reza, Felipe Ayala y Juan Hernández Lozano, padre de Gerónimo.
De la comunidad de Paso Real estaban en las listas, acusados de tener vínculos con el EPR, Claudio (cuyo apellido no mencionaron), Baltazar Rebolledo, Andrés Sánchez, su hijo Celso Sánchez y Rogelio Gallardo. De Pueblo Viejo mencionaron a Cheto, y dijeron que es responsable militar en esa área.
Le presentaron también los nombres de dos periodistas, que supuestamente ``tienen vínculos con la OCSS y con el EPR''. Mencionaron el nombre de esta corresponsal, Maribel Gutiérrez, también reportera del semanario El Sur, y el campesino no recordó el segundo nombre, pero le dijeron que era ``un reportero de pelo largo, gordito, de cara redonda, que siempre anda con Maribel, y trabaja en El Sur''.
Aunque los torturadores se presentaron con el nombre de ese supuesto grupo, Gerónimo aseguró que quienes lo detuvieron a las 2 de la mañana del lunes 22 eran ``agentes de la Policía Judicial Federal, acompañados por efectivos del Ejército Mexicano''.
La esposa del detenido, Victorina Valente Martínez, de 19 años, reiteró que reconoció a dos de los policías que entraron a su casa y se llevaron a Gerónimo. En su denuncia agregó que también identificó al comandante de la Policía Motorizada, Celerino Bibiano Pineda.
Los policías estarían destacamentados en la Base de Operaciones Mixtas, que desde mediados de junio patrulla y establece retenes móviles en la carretera de Tepetixtla a Coyuca de Benítez, con la participación de efectivos del Ejército, de la PJF, de la Judicial del estado y la Motorizada.
Gerónimo Hernández relató que los policías que lo sacaron de su casa lo subieron a una camioneta Combi, le ataron las manos, le vendaron los ojos y lo enredaron en una sábana. Viajaron por carretera unas cuatro horas, después los torturadores le dijeron que estaban en Oaxaca, pero él dice que se escuchaba una estación de radio de Acapulco.
Fue interrogado durante tres días y torturado con golpes en todo el cuerpo, le cubrían la cabeza con una bolsa para intentar asfixiarlo, le daban toques eléctricos, lo amenazaban con desaparecerlo y con matar a toda su familia.
Dijo que en la misma habitación torturaban a otro campesino, que dijeron se llama Severiano, y quien declaró que había visto a Gerónimo ``en varias columnas guerrilleras''.
Expuso que le dijeron que lo habían detenido porque alguien lo había denunciado como efectivo del EPR.
Finalmente, le pidieron que colaborara con ellos, informándoles sobre los lugares donde el EPR tiene armas y de personas vinculadas al grupo armado. Por las torturas, Gerónimo aceptó y a cambio le ofrecieron ``buena casa, dinero y su traslado fuera de Guerrero''.