La Jornada 12 de octubre de 1997

Serían 183 muertos en Guerrero; 94, cifra extraoficial en Oaxaca

Maribel Gutiérrez y Raúl García, corresponsales, Acapulco, Gro., 11 de octubre Ť Mientras en este puerto fueron localizados 13 cadáveres más, con lo que el número de muertos subió a 183 en la entidad por el paso del ciclón Paulina, en la región de la Costa Chica diversos municipios se encuentran aislados, entre ellos San Luis Acatlán, donde los 200 habitantes indígenas sólo podrían ser rescatados por aire, según reportes de radioaficionados y de la Cruz Roja.

En Acapulco los rescatistas continúan en busca de los cadáveres que quedaron sepultados entre escombros y lodo desde la madrugada del jueves, y esta noche localizaron dos cuerpos más y 11 fueron trasladados durante el día al Servicio Médico Forense.

La Cruz Roja informó, hacia la medianoche del viernes, que los cuerpos localizados en el puerto eran 157. Once personas murieron en Cuajinicuilapa, dos más en Cuautepec y cinco están desaparecidas en Igualapa.

La región de Costa Chica está prácticamente aislada de la ayuda a los damnificados. En San Luis Acatlán, radioaficionados reportaron a la Cruz Roja que 200 personas están totalmente aisladas y en peligro, en una comunidad indígena que quedó rodeada por agua.

La institución informó esta noche que se desconoce la magnitud del desastre en esa región, una de las más pobres del estado, que está incomunicada por tierra desde los dos puntos de acceso, por Acapulco y por el estado de Oaxaca.

Según varios reportes 11 personas murieron en Cuajinicuilapa, municipio colindante con Oaxaca, y cientos quedaron damnificados en San Marcos, Cuautepec y Azoyú.

El delegado de la Cruz Roja en Guerrero, Antonio Salvador Jaimes, dijo que en las próximas horas se podrá hacer un llamado internacional de ayuda a esa región, particularmente para las comunidades indígenas.

Las toneladas de ayuda que están llegando a Acapulco no satisfacen las necesidades de una despensa básica, y falta agua, arroz, frijol, azúcar, sal, aceite y harina de maíz, así como ropa clasificada por talla, indicó.

En Acapulco hay manifestaciones de descontento de los damnificados pues, dicen, la ayuda no llega a ellos porque la distribuyen algunos líderes.

En la colonia Alborada, por el área de puerto Marqués, más de 500 familias perdieron sus propiedades pues todas las viviendas se inundaron por el desbordamiento del río La Sabana. Ellos mismos rescataron a decenas de familias que estaban atrapadas entre el lodo. Y ahora que las aguas han bajado hacia la playa El Revolcadero, los damnificados se quejan: ``Estuvimos inundados estos días, nadie vino a ayudarnos, ni el Ejército; el agua tapó muchas casas''.

Ningún médico acude

Muchos vecinos tienen la piel infectada y dicen que ningún médico se ha acercado a esta zona de difícil acceso.

Hoy, las familias comenzaron a rescatar entre el lodo algunos muebles y utensilios domésticos que fueron arrastrados a más de un kilómetro de distancia por la corriente que iba hacia el mar.

En la colonia Miramar cientos de habitantes se amotinaron en torno de la camioneta con las despensas; algunos querían saquearla. En la colonia Nuevo Puerto Marqués están dañadas unas 300 viviendas de madera y lámina. Sus moradores tampoco han recibido apoyo. Los vecinos rescataron a decenas de familias asentadas en el cauce de un arroyo que aumentó su caudal este jueves, sacaron a los que se habían quedado inundados, y hoy comenzaron a recoger sus pertenencias regadas entre escombros, basura y lodo.

En Ciudad Renacimiento, en el área suburbana donde funciona uno de los albergues más grandes, cientos de personas se congregaron después de las 113 horas en torno de un vehículo donde militares del Ejército repartían despensas, lanzándolas por el aire. Hubo golpes, empujones, jaloneos y gritos, y varias mujeres se desmayaron.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Hoteles y Empresas Turísticas de Acapulco, Eduardo Marrón Orozco, informó que la carretera costera Miguel Alemán es rehabilitada a marchas forzadas y podría quedar limpia en una semana.

A su vez, Juan Salas Domínguez, vocero de la SCT estatal, informó que de unas 25 mil líneas telefónicas dañadas por el meteoro, cerca de 12 mil han sido reparadas.

Agregó que los vuelos comerciales del aeropuerto de Acapulco se reanudaron y que la capitanía de puerto abrió la navegación a embarcaciones grandes y pequeñas, aunque se mantienen banderas amarillas de estado de alerta, al igual que en Ixtapa-Zihuatanejo.

El tránsito en la carretera federal México-Acapulco sigue suspendido porque el puente de El Quemado no ha sido reparado, mientras la vialidad Acapulco-Zihuatanejo es transitable por la desviación de Paso Texca, Bajos del Ejido, para tomar otra vez la carretera hacia Zihuatanejo, aunque hay desperfectos en el punto cercano a El Zapote.

De Acapulco a Pinotepa Nacional, Oaxaca, dos kilómetros adelante de la cabecera municipal de San Marcos, está interrumpido el paso porque un río destrozó la arteria. Los trabajadores de la SCT no han podido reconstruir el tramo.

La Unidad Estatal de Protección Civil informó que los municipios de Tlacoachistlahuaca y Xochistlahuaca, en la Costa Chica, siguen incomunicados y sin energía eléctrica.

En Cuajinicuilapa, al igual que en Cuautepec, la tarde de este sábado personal de Protección Civil, Cruz Roja y Servicios Públicos Municipales inició la reparación de daños que causó la inundación en la comunidad de El Terrero, además de que técnicos de la Comisión Federal de Electricidad comenzaron a levantar decenas de postes derrumbados y a reconectar las líneas.

Protección Civil señaló que en Igualapa, en la Costa Chica, siguen desaparecidas cinco personas que arrastró el río Tonalapa.


Víctor Ruiz Arrazola, corresponsal, Chacalapa, Oax., 11 de octubre Ť El número de muertos en la Sierra Sur y en la región de la Costa ascendió a 94, de acuerdo con datos recogidos por La Jornada. Sin embargo, el gobernador Diódoro Carrasco informó que sólo perecieron 45 -apenas tres más que los reportados ayer- y los desaparecidos suman oficialmente 22.

Veinte helicópteros distribuyen alimentos y ropa a los afectados del litoral oaxaqueñ y se han establecido puentes áereos ante la imposibilidad de llegar por tierra a las comunidades afectadas.

Desde el aire se aprecia la magnitud del siniestro: los bosques se convirtieron en palizadas; cafetales, platanares, maizales y demás cultivos fueron derribados y yacen entre el lodo, sin hojas, sin frutos...

Mujeres y hombres descienden de la montaña. En sus rostros y pies se nota la fatiga de tres días de pánico; su forma de vida se acabó, arrasada por el meteoro Paulina.

``Creímos que moriríamos, que el mundo se acabaría'', dijo Pedro Hernández, cafeticultor de La Ciénega, ranchería de Candelaria Loxicha.

Los pueblos están destruidos. La secretaria de Protección Ciudadana del gobierno de Oaxaca, Patricia Villanueva Abraham, reconoció que en las comunidades afectadas 95 por ciento de las viviendas quedaron destruidas, lo mismo que la infraestructura pública.

Desde un helicóptero, las láminas de cartón y de zinc que hace tres días cu- brían las viviendas construidas de palos y lodo están esparcidas en el monte, bajo los derrumbes o río abajo. Las aguas y los vientos se llevaron casi todo. Los sobrevivientes lograron refugiarse en construcciones de cemento, pero se desconoce el paradero de quienes no pudieron llegar y de otros se han encontrado los cadáveres.

La destrucción no sólo es material sino también espiritual. Los jornaleros e indígenas de esta zona ahora sólo poseen la ropa que traían puesta cuando Paulina los sorprendió en los cafetales.

A Chacalapa han llegado decenas de hombres y mujeres de La Soledad, La Ciénega, Carrizuelo, Paso los Indios, El Piste, El Armadillo, Piedra de Lumbre, Comala y Totoltepec, así como de Santa María Tepejipana, Horcones y Río Azulillo, a pedir víveres porque los niños y ancianos tienen hambre y frío.

La diarrea y los hongos en la piel los han enfermado, ``pero ellos no pueden caminar las jornadas de hasta 12 horas para salir a buscar ayuda'', dijo Carlos Rodríguez Zurita, agente municipal.

Más víctimas en Buena Vista Loxicha

La cifra de 70 muertos que La Jornada documentó ayer aumentó hoy a 94. Pedro Hernández, originario de la ranchería La Ciénega, dijo que por radio de banda civil las autoridades municipales de Buena Vista Loxicha informaron a las de Candelaria Loxicha que ``hay cuatro muertos, varios heridos, enfermos y la destrucción total de sus viviendas y escuelas''.

``A todos se nos acabó la forma de vivir, tanto rancheros como finqueros no tenemos nada allá arriba. Si no fuera por la ropa que traíamos puesta andaríamos con una mano atrás y otra adelante'', platicó Ernesto Santiago, un jornalero que subió la semana pasada a la finca El Progreso para la cosecha de café.

Los alcaldes de Pochutla y Pinotepa Nacional, Raymundo Carmona Laredo y Jaime Fuente Baños, respectivamente, se quedaron varados en las inmediaciones de San José del Pacífico, sobre el tramo carretero Oaxaca-Miahuatlán-Pochutla, y para llegar hasta ese sitio tuvieron que caminar dos días con sus noches. Traían los pies rotos, sangrando, con algas; la travesía fue agotadora y lo que vieron es ``de una inmensa tristeza''.

A lo largo del camino conocieron testimonios de personas que salían de sus rancherías a lo que fue la carretera para pedir ayuda, pero sólo encontraban cerros desgajados, árboles caídos, piedras y automóviles enterrados.

Diez niños perecieron en una escuela

Carmona Laredo informó que en el camino se enteró que en la ranchería de Tierra Blanca, Loxicha, un cerro se desgajó sobre la escuela y la sepultó. En su interior había por lo menos diez niños.

Algunas personas le narraron que al llegar el huracán salieron de sus carros y se quedaron sobre la carretera y cuando los fueron a buscar al día siguiente ya no estaban: se los llevó el agua o se encuentran bajo los derrumbes. ``Toda esa gente viene por la sierra caminando hacia acá''.

Cuando Carmona Laredo llegó esta mañana a Pochutla se enteró de que 12 personas fallecieron en diferentes comunidades de su municipio, por lo que el número de muertos ascendió a 94. El viernes únicamente habían sido reportados dos muertos en ese distrito.

Por teléfono, los regidores informaron al munícipe de Pinotepa Nacional que la ciudad no sufrió graves daños, pero en la parte baja de Collantes la situación es de desastre. Más de 7 mil personas no tienen de comer desde hace tres días y un número indeterminado aún no aparece, pues no lograron salir de sus viviendas cuando el agua las arrastró.

La zona de Pinotepa Nacional y Jamiltepec está incomunicada por vía terrestre, pues la carretera Costera Federal 200 quedó cortada a la altura de los puentes de Río Verde y Arena, y por la carretera Tlaxiaco-Putla los derrumbes y deslaves están a lo largo de varios kilómetros, y por la costera que viene del estado de Guerrero la situación aún es más grave.


Rosa Elvira Vargas, enviada, Acapulco, Gro., 11 de octubre Ť Los vientos con rachas de hasta 259 kilómetros por hora prácticamente arrancaron todo lo que encontraron a su paso en la zona costera de Oaxaca, mientras que en Acapulco, en 24 horas cayeron 425 milímetros de agua, lo que equivale, por ejemplo, a 60 por ciento de la lluvia que recibe el Distrito Federal en un año.

La evaluación oficial de la estela destructiva que dejó el huracán Paulina en ambas entidades confirma, en Guerrero, 107 personas muertas y gran número de casas destruidas, sobre todo en las colonias de las zonas de El Anfiteatro y Renacimiento; destrucción de la iglesia La Sagrada Familia; un amplio número de vehículos dañados, arrastrados por las aguas; obstrucción de las carreteras Acapulco-Zihuatanejo, Acapulco-Pie de la Cuesta y Acapulco-México libre, así como interrupción de los servicios de agua potable, electricidad y telefonía.

En la costa oaxaqueña, el informe entregado esta tarde al presidente Ernesto Zedillo a su regreso de Europa menciona 40 personas muertas, afectación general de las poblaciones de esa zona, 15 torres eléctricas derribadas, 12 puentes dañados, desbordamiento del río Los Perros, inundaciones de diversa magnitud en 50 municipios, la presa Benito Juárez rebasada en su capacidad, un número significativo de viviendas afectadas total o parcialmente, obstrucción de caminos y carreteras dentro de las que sobresalen las de Huatulco y Puerto Escondido, y la interrupción de los servicios de energía eléctrica, agua potable y telefonía en algunas zonas.

Los secretarios de Gobernación, Emilio Chuayffet; Defensa Nacional, Enrique Cervantes Aguirre, y Salud, Juan Ramón de la Fuente, rindieron a Zedillo el reporte de sus respectivas áreas, aseguraron que la coordinación interinstitucional ha permitido poner nuevamente en marcha algunos servicios fundamentales y comprometieron acciones para restablecer, en breve, los correspondientes a agua potable y comunicaciones.

La Secretaría de Agricultura contabiliza unas 30 mil hectáreas en Oaxaca con pérdida total de cultivos, sobre todo café, maíz, ajonjolí y plátano, y unas 5 mil más en Guerrero. Se encuentran, además, otras 100 mil con diversos grados de afectación.

El secretario de Desarrollo Social, Carlos Rojas, comentó en entrevista que el mayor número de muertos en Acapulco se debió sobre todo a la gran cantidad de asentamientos humanos irregulares en las laderas de los cerros, así como en otras zonas de población obrera o del sector servicios cuyas casas, al estar ubicadas cerca de las corrientes que provocó la lluvia, fueron colisionadas por las piedras y otros objetos que aquéllas arrastraron.

Comentó que existe coordinación para el abastecimiento de agua potable por diversas vías, mientras se repara el servicio local. A este puerto, por ejemplo, el líquido llega por barco, a través de carros pipa, en bolsas de leche Liconsa y mediante 10 pequeñas bombas para potabilizar unos 200 mil litros por día.

Sin embargo, en ambos estados son tres los problemas centrales: agua potable, que se terminó totalmente en esta ciudad por la ruptura de tuberías; el asolve de depósitos y pozos y la ruptura de las bombas eléctricas; viviendas -cientos de ellas quedaron total o parcialmente inundadas o destruidas- y caminos, pues en el caso de Acapulco y algunas comunidades de Oaxaca existen aún lugares a los que es imposible llegar por la destrucción severa de grandes tramos de carreteras.

En ambas entidades operan unos 30 albergues, y entre viernes y sábado se han repartido cerca de 25 mil despensas.

Chuayffet dedicó la parte inicial de su intervención para detallar las acciones de protección civil que se adoptaron desde que se tuvo noticia de la existencia de un sistema de baja presión en el Pacífico Oriental (a la postre Paulina), que a las cuatro de la mañana del pasado día 6 alcanzó estatus de tormenta tropical y 12 horas después se convirtió en huracán, ``intensificándose hasta el número cuatro de la escala Saffr-Simpson, con vientos de entre 210 y 249 kilómetros por hora y mareas de tempestad de entre 4.5 y 5 metros por encima de lo normal, calificándosele como extremadamente peligroso''.

El responsable de la política interior explicó además que, a partir de su ingreso a tierra, Paulina se desplazó siguiendo el litoral del Pacífico mexicano afectando Oaxaca y Guerrero con lluvias torrenciales, vientos de hasta 213 kilómetros y rachas de 259 kilómetros por hora.

Reportes de Sedena y la Ssa

El general Cervantes Aguirre expuso que el recorrido de Paulina desde que tocó tierra en Puerto Angel hasta llegar a Acapulco, en total 650 kilómetros, no tardó más de diez horas.

En Oaxaca, precisó, el meteoro provocó el aislamiento de comunidades y resintieron de inmediato el desabasto de alimentos, ya que normalmente sus sistemas ``son muy precarios''. Dijo que de inmediato se estableció un puente aéreo desde la ciudad de México hasta Puerto Escondido para hacer llegar comida a las zonas afectadas; asimismo, se restableció la comunicación terrestre por la vía Oaxaca-Tuxtepec-La Transístmica hasta conectar con la carretera número 200 y llegar así a Puerto Escondido.

Por lo que hace a Acapulco, el titular de la Sedena mencionó que una vez pasada la mayor precipitación pluvial el panorama de los servicios públicos arrojaba como saldo: interrupción de la energía eléctrica, suspensión de las telecomunicaciones y daños severos en los principales accesos hacia la Costa Chica y la Costra Grande. Asimismo, las principales vías de comunicación como las avenidas Ruiz Cortines, Cuauhtémoc y la Costera Miguel Alemán tenían acumulación de lodo que incluso sepultó numerosos vehículos.

En las siguientes 24 horas, afirmó, mucha de esa situación se reparó en un gran porcentaje, pero las brigadas militares continúan la limpieza de calles, el desasolve de alcantarillas, los trabajos de reparación de caminos, la recuperación y desalojo de víctimas, la búsqueda de desaparecidos, la organización de albergues, la dotación de despensas y apoyo a los servicios médicos que otorga la Secretaría de Salud.

Respecto de estos últimos, el titular de la dependencia, Juan Ramón de la Fuente, informó al presidente Zedillo y a las autoridades de Guerrero que existe un Plan de Emergencia Sanitaria para prevenir posibles brotes epidémicos, y que hay coordinación sectorial para la prestación de los servicios médicos y acciones sanitarias.

Dijo que desde el viernes, en todos los hospitales y clínicas se brinda atención urgente en forma gratuita, y que la infraestructura hospitalaria es suficiente para atender la demanda por personas lesionadas a raíz del huracán, que ``por fortuna, no han sido muchas''.

En su intervención, Chuayffet insistió en que el Sistema Nacional de Protección Civil comenzó la transmisión de avisos preventivos desde el primero de octubre, tanto a través de las secretarías generales de Gobierno de las entidades afectadas como por las unidades estatales y municipales de Protección Civil, la Cruz Roja y la Federación Mexicana de Radioexperimentadores.

Dijo que en el Plan DN-III participan, además de las secretarías mencionadas, IMSS, ISSSTE, Pemex, CFE, DIF, CNA, Conasupo y Diconsa.


Diversos organismos continuaron ayer enviando y ofreciendo ayuda para los damnificados por el huracán Paulina. En Tula de Allende, Hidalgo, Petróleos Mexicanos (Pemex) informó sobre la donación a la Comisión Nacional del Agua (CNA) de 5 mil metros de tubería de distintos diámetros, en apoyo a los trabajos de rehabilitación del servicio de la planta potabilizadora de agua de Acapulco, ubicada en El Cayaco.

Ese material también servirá para la reconstrucción de los sistemas de distribución del vital líquido a las colonias afectadas. Asimismo, la paraestatal envió autotanques y camiones pipa con combustible para abastecer a las unidades del Ejército Mexicano desplazadas a la zona de desastre. A Oaxaca, Pemex envió equipo y material para la reconstrucción de las áreas dañadas.

El Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Guerrero abrió cuentas bancarias para donativos destinados a a los damnificados en Acapulco. Los números son Bancomer 7238-7, Banamex 147-545-4 y Banca Afirme 93-1.

En Nuevo Laredo, Tamaulipas, se organizaron los jóvenes del Club Rotaract y los Scouts de México con la Cruz Roja, el DIF, Protección Civil, bomberos y representantes empresariales para la recolección de donativos. Los centros de acopio se instalaron en la explanada Esteban Baca Calderón, frente a la alcaldía, la subestación de Bomberos y las oficinas del DIF.

En el Distrito Federal, la Asociación Nacional de Actores (ANDA) también ofreció su sede para la recolección de apoyo y solicitó a sus miembros su participación en esa actividad. El centro de acopio se instaló en la Secretaría de Previsión Social de la ANDA y estará abierto de lunes a viernes de 10 a 22 horas, los sábados y domingos de 11 a 22 horas.

Asimismo, los actores Alfredo Adame, René Casados, Juan Peláez, Yadira Carrillo y Adriana Lavat, entre otros, se trasladaron al puerto de Acapulco para ayudar a los damnificados por el huracán.

El Departamento del Distrito Federal (DDF) informó que ayer por la tarde envió el primer cargamento de víveres a Chilpancingo, Guerrero, donados por el DIF, la iniciativa privada y comerciantes de la Central de Abastos, consistente en 26.4 toneladas de diferentes productos.

La dependencia señaló que se continuará recibiendo la colaboración de la sociedad, con el fin de poder enviar un nuevo cargamento este domingo.

La Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra) informó que los apoyos económicos o en especie también serán recibidos en sus sedes en Acapulco, en La Paz número 9, colonia Centro; y en Oaxaca, bulevar Manuel Ruiz número 11, colonia Reforma.

Solidaridad internacional

El gobierno de México agradeció al pueblo de Guatemala y al presidente Alvaro Arzú su inmediata y generosa muestra de solidaridad por los daños ocasionados por el fenómeno natural.

Por su parte, el embajador de Japón en México, Terusuke Terada externó su pesar por los ``enormes y dolorosos'' daños causados por el huracán Paulina en Guerrero y Oaxaca. En una carta enviada al canciller José Angel Gurría, el diplomático deseó la más pronta rehabilitación para el pueblo mexicano, al que dijo comprender, ya que Japón ``ha experimentado con frecuencia circunstancias similares''.

En Nueva York, el alcalde Rudolph Giuliani proclamó ayer la Semana de Ayuda a México, durante la cual se recibirán donativos en las estaciones de bomberos, los cuales serán enviados a Guerrero y Oaxaca. El primer paquete saldrá el próximo miércoles, con el apoyo de Aeroméxico.

El cónsul de México en Nueva York, Jorge Pinto, comentó que entre la comunidad mexicana en esa ciudad hay muchos connacionales originarios de Guerrero, por lo que se hacen todos los esfuerzos para darles información sobre sus familiares.

Mientras, los mexicanos residentes en San Antonio, Texas, empezaron a inundar los consulados con ropa, medicina y alimentos para los afectados por el huracán. A su vez, Eddie García, vocero de la cadena de supermercados HEB (con sucursales en Monterrey), informó que en las próximas horas saldrá desde la ciudad fronteriza Del Río un camión con más de 11 toneladas de productos de emergencia y alimentos básicos.

Destaca lo ocurrido en el consulado de Houston, donde se recaudó una gran cantidad de ayuda, pero ahora el problema es cómo llevarla al aeropuerto, de donde saldrá hacia México con la colaboración de la aerolínea Continental.

De acuerdo con la agencia Notimex, esa ciudad alberga quizá a la mayor comunidad guerrerense en Estados Unidos, al grado de que hay una representación oficial de aquel estado, la Casa Guerrero.

El próximo lunes los 41 consulados mexicanos en Estados Unidos permanecerán cerrados con motivo del Columbus Day, pero habrá personal de guardia para recibir la ayuda durante el fin de semana, de las 9 a las 19 horas. (De la Redacción)