La Jornada 14 de octubre de 1997

Alerta epidemiológica en Guerrero y Oaxaca

La Secretaría de Salud determinó mantener en grado máximo la alerta epidemiológica ante la eventualidad de brotes de cólera, dengue y paludismo en Guerrero y Oaxaca, confirmó el titular de la dependencia, Juan Ramón de la Fuente.

Entrevistado en Boca del Río, Veracruz, sostuvo que las condiciones de las zonas devastadas son propicias para la aparición de epidemias. Precisó que dengue y paludismo son más probables en Oaxaca.

Se requerirán, dijo, ``esfuerzos extraordinarios para afrontar la contingencia y sus secuelas fatales'', indicó.

A su vez, el secretario de Desarrollo Social, Carlos Rojas Gutiérrez, afirmó que en la vorágine destructiva de Paulina se confunden ``los damnificados del huracán con los de la vida'', así como pobladores que viven la ``doble tragedia'' de haber enfrentado primero una sequía y ahora el fenómeno meteorológico.

En diversas entrevistas, el funcionario advirtió que el gobierno federal actuará ``con todo el peso de la ley en contra de quien en la tragedia trate de medrar con los apoyos que la sociedad mexicana y el gobierno'' dirigen a la población de Oaxaca y Guerrero.

Rojas Gutiérrez convocó a los medios de difusión a dar salida a las denuncias que permitan frenar abusos: ``reprobamos y actuaremos conforme a derecho ante cualquier circunstancia que esté fuera de la ley, la moral y la solidaridad''.

Al presentar un balance de lo ocurrido, el titular de la Sedeso confirmó que según los datos del Servicio Médico Forense, en Oaxaca la cifra de muertos llegó a 47, y hay 70 desaparecidos reportados hasta ahora; en Guerrero, reiteró, hubo 130 muertos. Señaló que la secretaría a su cargo detectó alrededor de 5 mil viviendas con ``daños graves''.

Abiertos los albergues para todos aquellos que quieran comer

Anunció que se han seleccionado ya dos predios, incluso de la reserva territorial, en los cuales podría iniciarse este año la construcción de hasta 2 mil viviendas para atender la urgente necesidad de habitación familiar de los damnificados.

``Para evitar la aparición de líderes, intermediarios o gestores que obstaculicen o, en algunos casos incluso desvíen la ayuda que las autoridades y la sociedad han reunido para los más necesitados, se decidió abrir los 56 albergues a todos los que necesiten alimentarse'', indicó el funcionario en un encuentro matutino con reporteros.

El gobierno de Guerrero informó de la distribución de 250 toneladas de alimentos, agua envasada, medicamentos, ropa, cobijas, colchonetas y láminas de cartón.

A través del DIF se habrían distribuido, se informó en un comunicado, ``más de 200 mil despensas''. Diconsa aseguró haber distribuido 60 mil más.

Rojas destacó la colaboración del Ejército Mexicano, especialmete con dotación de transporte gratuito en el área afectada.

En diálogo con el periodista José Gutiérrez Vivó, el titular de la Sedeso hizo notar la gravedad del daño causado al cultivo de café en la víspera de la cosecha: ``se perdió prácticamente todo'', lamentó.

Mencionó los daños a Puerto Angel en la instalación museográfica para la tortuga y en la Universidad del Mar, la devastación de puentes sobre la costa oaxaqueña en la ruta Puerto Escondido-Pinotepa Nacional-Acapulco y los ``daños mayores'' registrados en la Mixteca y Tlaxiaco.

El secretario de Comunicaciones y Transportes, Carlos Ruiz Sacristán, confirmó la reapertura temporal de algunos caminos de ambos estados, así como el restablecimiento de las funciones del aeropuerto internacional.

Entrevistado en la capital del país, el funcionario estimó que este martes podría estar listo un paso provisional en la carretera escénica. Es prioritario, dijo, actualizar rutas que permitan conectar a la costa en Oaxaca.

La aerolínea Taesa puso a disposición de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Cruz Roja dos jets Boeing cargueros.

La Sedeso estimó que 99 por ciento del servicio eléctrico estaba restablecido en el puerto guerrerense; reportó ``más de 90 por ciento'' de la telefonía recuperada y confirmó que aún permanecían dañadas un gran número de escuelas.

Calculó que antes de 72 horas quedará restablecida la vialidad en el tramo fracturado de la carretera que va a Pie de la Cuesta.

No obstante el panorama, comentó el titular de Sedeso, ``la vida productiva no está trastocada''.

Subrayó la instrucción presidencial de dar ``una solución integral'' a los problemas de la zona afectada, y de atender a los empresarios ``que perdieron todo su patrimonio'', a modo de que reabran sus fuentes de empleo.

En primer sitio de las necesidades ubicó nuevamente el ``problema de enorme magnitud'' ocasionado por el desabasto de agua potable. Precisó que diariamente se entregan en recipientes grandes, botellas y pipas cerca de 400 mil litros diarios de líquido consumible, cantidad que representa 10 por ciento del consumo regular en Acapulco. Aseguró que el agua se entrega ``en las áreas más necesitadas para evitar problemas de salud'' asociados a la contaminación de la misma.

``Hay una urgencia superior de agua potable'', insistió el titular de la Sedeso.

La Comisión Nacional del Agua informó que para atender las necesidades más urgentes de las comunidades de Pochutla, Mazunte, Puerto Angel, Bajos de Chila y Puerto Escondido, en Oaxaca, mantiene en operación cinco plantas potabilizadoras portátiles con una capacidad total de 80 mil litros al día.

Agregó que se han enviado cerca de 10 toneladas de hipoclorito de calcio y más de 8 mil litros de cloro para potabilizar el agua.

Brigadas de la Gerencia de Agua realizaban labores de desinfección de fuentes de abastecimiento y prevención de infecciones gastrointestinales en Puerto Escondido, Bajos de Chila, San Pedro Mixtepec, El Tomatal, Ventanilla, Escobilla, San Isidro del Palmar, El Venado, Santa María Colotepec, Pochutla, Tonameca y Santa María Huatulco.

La Sedeso emitió un comunicado en el que advierte que enfrentarán ``todo el peso de la ley, todo el rigor de ésta'', aquellos que se aprovechen de la generosidad del pueblo mexicano, concentrada en las donaciones que han enviado al puerto.

Rojas Guitérrez informó que durante una reunión con los integrantes de la Cámara de Comercio de Acapulco y de la Costa de Guerrero, les pidió toda su colaboración para hacer frente a la contingencia. Comentó que una brigada especial de la Procuraduría Federal del Consumidor ``vigila que no se cometan irregularidades'' en abasto y precios de artículos básicos.

La Secretaría de Salud informó que desde la ciudad de México se desplazaron a la zona afectada 25 brigadas médicas con un total de 300 elementos. Hacia Acapulco se enviaron, añadió, 180 toneladas de medicamentos.

El ISSSTE dispuso un fondo de contingencia ``destinado a otorgar préstamos para la compra de artículos del hogar y créditos hipotecarios'' informó un comunicado de esa institución sin precisar su monto individual o total. El instituto está a cargo de tres albergues en Acapulco.

Por otra parte, la secretaria de Turismo, Silvia Hernández, dijo que el paso del huracán Paulina por Guerrero y Oaxaca sólo provocó ``daños menores'' en la zona hotelera, y precisó que en Acapulco únicamente el Princess y el Camino Real cerraron temporalmente sus puertas.

Aclaró que no existe una cascada de cancelaciones a escalas nacional e internacional en ambos sitios, y confió en que esta misma semana se vuelva a trabajar al ciento por ciento, para no afectar la planta laboral y la captación de divisas.

Mientras tanto, el Departamento del Distrito Federal informó ayer que se enviaron 70.5 toneladas de víveres y materiales diversos a los damnificados, mismos que fueron recibidos por el DIF Chilpancingo, en Guerrero.

Entre los principales productos que se enviaron a los damnificados por el meteoro destacan 9 mil 310 litros de agua purificada; 8 mil 352 litros de refresco; 7 mil 178 paquetes de pasta para sopa; 9 mil 600 latas de atún; 2 mil 550 litros de leche; casi 8 mil cajas de champú, y mil 284 cobertores.

Los productos fueron donados por el DIF capitalino, la iniciativa privada y los comerciantes de la Central de Abasto, y fueron transportados en 4 tráileres ofrecidos por una empresa privada que sufragó los gastos de transportación.

Por otro lado, en Tijuana, Baja California, el gobierno del estado comenzó el envío de 12 toneladas de ayuda humanitaria reunida en Mexicali en favor de los damnificados de Guerrero, Oaxaca y Chiapas afectados por el paso del huracán Paulina.

Gran parte de la ayuda enviada a Guerrero consiste en medicamentos y comida enlatada, informó el vocero del gobierno estatal en esta frontera, Ariel Lizárraga. El DIF municipal informó que también este lunes fueron enviadas a Oaxaca 6 toneladas de ayuda para los damnificados del huracán. (Andrés Timoteo, Matilde Pérez. Alma E. Muñoz, Salvador Guerrero Chiprés, Laura Gómez y Jorge Alberto Cornejo, corresponsal)