La Jornada 15 de octubre de 1997

Expande el Ejército su base en La Realidad, Chiapas

Hermann Bellinghausen, enviado, La Realidad, Chiapas, 14 de octubre Ť A una semana de instalado, el nuevo campamento del Ejército Mexicano a orillas del río Euseba se ha vuelto una grave amenaza para La Realidad. Actualmente alberga a 500 elementos castrenses y ellos mismos han asegurado, a los campesinos que pasan cerca, que no se piensan ir, ``que están ahí para tomar La Realidad''.

Además, las fuerzas de tarea del Ejército han acortado la distancia que las separa del emblemático pueblo zapatista, al instalarse en la otra orilla del río y ya no sólo en los predios del anexo Hidalgo.

Los primeros días, la guarnición se componía de 80 o 90 elementos. Después de la protesta de las bases de apoyo zapatistas, el pasado día 8, el número se duplicó hasta completar una compañía de 150. A partir de ayer el total de soldados se elevó a medio millar.

En lo que resulta un cambio en el esquema estratégico del general Mario Renán Castillo, máximo jefe del Ejército Federal en la zona de conflicto (que consistió en concentrar tropas, hace un par de meses), la nueva posición expande los puestos de combate del Ejército Federal, con evidente intención ofensiva.

Los grandes cuarteles de San Quintín y Guadalupe Tepeyac han puesto en movimiento efectivos, armas y materiales para la guarnición de Hidalgo. De San Quintín salió un destacamento para ocupar otra vez la población de Nueva Providencia (ya que el anterior destacamento avanzó hasta el río Euseba), y de Guadalupe Tepeyac salieron ayer 11 vehículos cargados de alambre de púas y otros materiales de construcción; atravesaron La Realidad junto con una patrulla de 20 vehículos y 180 soldados, y descargaron todo a 5 kilómetros de aquí en la rivera del río Euseba. En ese lugar se trabaja intensamente en la construcción y el pertrecho del nuevo campamento.

Para completar el cuadro, desde hoy a las 4 de la mañana un avión de rastreo practicó vuelos sobre La Realidad y lugares aledaños, y más tarde volaron los helicópteros del Ejército.

Mientras tanto, las obras de construcción del camino que eran realizadas por una compañía privada, por concesión del gobierno del estado, siguen suspendidas y la tensión aumenta. El hilo de la paz se estira y adelgaza. ¿Cuánto más aguantará sin romperse?

La población civil se encuentra preocupada y en actitud de alerta. Desde aquí se siente una gran soledad. ¿Está sola La Realidad?

El paso de la patrulla

Es la una y media de la tarde. A través del pueblo, a unos cuantos metros del Aguascalientes, cruzan con lentitud 31 vehículos de la patrulla militar, en su mayoría Hummers con tropa armada. De varios vehículos sobresalen ametralladoras emplazadas. Les cuelga el cintillo de balas y los artilleros apuntan a lo que se mueva.

Otros soldados filman y fotografían a los testigos de su paso. Los niños del pueblo están guardados. Unos cuantos campesinos observan disimuladamente, mientras algunos miembros del Campamento Civil por la Paz se colocan, como de costumbre, a los lados del camino.

Por último, desde un camión, un cañón apunta hacia la población civil. A eso le llaman ``cubrir la retaguardia''.