La Jornada 31 de octubre de 1997

Luis Morales, nuevo dirigente de la CEM; promoverá reformas a la ley de cultos

Salvador Guerrero Chiprés Ť La Conferencia del Episcopado Mexicano ``promoverá modificaciones'' al artículo 130 constitucional y a la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público, anunció el obispo de Torreón, Coahuila, Luis Morales Reyes, nombrado ayer presidente de la CEM.

Reconoció que la actual ley es ``buena'', pero ``perfectible'', por lo que debe revisarse ``para adecuarla a los nuevos tiempos para que haya más apertura y más tolerancia''.

``Se ha dejado atrás la ciencia ficción'' en la relación Iglesia-Estado, consideró quien encabezará a la jerarquía católica los próximos tres años, acompañado en la vicepresidencia por el obispo de León, José Guadalupe Martín Rábago.

Recordó que el derecho canónico estipula la posibilidad de que participe en una elección en circunstancias excepcionales, ``como ocurrió en Haití''.

En México, dijo, ``todavía hay varias etapas de perfeccionamiento y de ejercicio democrático'' que favorecerían la relación con el Estado.

En su opinión, los problemas ``se están superando en orden'' y ``el camino es el diálogo'' político, al que Episcopado y dirigentes partidarios dedicaron tiempo la noche previa y en el cual los obispos, al decir del diputado Porfirio Muñoz Ledo, ``hablaron más de los problemas del país que de los de la Iglesia''.

La noche previa a la designación de Morales, el coordinador de la fracción parlamentaria del Partido de la Revolución Democrática en la Cámara de Diputados, Porfirio Muñoz Ledo, reiteró su simpatía por permitir el goce de los plenos derechos políticos de los sacerdotes. Carlos Medina Plascencia, coordinador de la bancada panista, comentó que ni siquiera estaba de acuerdo con el registro de las asociaciones religiosas.

Encuentro ``histórico''

Durante la reunión del miércoles obispos y legisladores plantearon sus preocupaciones sobre la libertad religiosa, el actual clima del diálogo político, la situación social y la pacificación en Chiapas.

En su encuentro matutino de ayer con los informadores, Morales Reyes dijo que el narcotráfico y la pobreza son los elementos centrales del ``complejo de males que dañan al país''.

Para responder a los ``desalientos'', dijo, se mantendrán en la línea definida en el proyecto pastoral 1996-2000. El clérigo dijo que es necesario aplicar un modelo económico ``con rostro social'', una intensa y generalizada ``nueva evangelización'' y promover el cambio, entre otros aspectos planteados en ese documento.

Morales Reyes y Martín Rábago ofrecieron a sus electores designar una dirigencia al servicio de las instancias de decisión en ``los tres círculos concéntricos'': el Consejo de Presidencia, el Consejo Permanente --integrado por 14 obispos-- y la Asamblea General.

Las decisiones colegiadas facilitarían, además, enfrentar las necesidades de ``un país lleno de retos en una hora difícil''.