Pide José Manuel Barceló a partidos ``juego limpio'' y evitar descalificación y filtraciones

Oscar Camacho, enviado, y Cayetano Frías, corresponsal, Guadalajara, Jal., 5 de noviembre Ť ``Juego limpio...'', demandó este día a los partidos políticos el presidente del Consejo Electoral de Jalisco, José Manuel Barceló, al pedir que no se busque ``arrastrar'' el proceso electoral ni con descalificaciones sin fundamento (en clara alusión al PRI) ni con filtraciones a la prensa de asuntos judiciales que no tienen relación con los comicios (en alusión al gobierno local y al PAN).

Entrevistado por La Jornada en el Consejo Electoral del estado, Barceló enfrentó las críticas hechas por el PRI en relación con las boletas electorales irregulares, y señaló que los cuestionamientos priístas no son otra cosa que ``declaraciones de campaña para los medios de comunicación'', ya que --subraya-- hasta la fecha ese partido no ha presentado ante el Consejo ``una sola queja o recurso de ley''.

En ese tenor, rechaza ``tajantemente'' que la transparencia y legalidad del proceso pueda estar ``bajo sospecha'' --como afirmó el día anterior la dirigencia del PRI--, pues ``todo lo que se ha hecho ha sido de cara a la sociedad, en forma abierta y correcta, y sin sometimientos ni a gobierno ni a partido alguno''.

Admite, empero, que lograr esto ``no ha sido fácil'', pues, por un lado, los partidos políticos no han alcanzado la madurez política que reclama la ciudadanía, y por otro, hay una ley que apenas se está estrenando y a la cual se le han encontrado innumerables deficiencias, limitaciones, contradicciones y confusiones.

``Hablar de 50 deficiencias en La Ley Electoral sería poco'', dice el presidente del Consejo Electoral, quien consideró necesario reformarla ``prácticamente en todos sus rubros'', desde financiamiento hasta capacitación y registro de partidos, entre otros puntos.

De lo anterior da cuenta Barceló Moreno al término de la sesión de este día, en la cual se desecharon ocho impugnaciones presentadas por PRI y PAN --cuatro cada uno en contra del otro partido--, por presuntos manejos irregulares de recursos económicos.

Barceló Moreno señala que entre los principales problemas que han tenido con la actual ley electoral están las contradicciones en lo que se refiere al financiamiento y a los topes de gastos de campaña, los cuales, admite, limitaron sobremanera el accionar de los partidos políticos.

No duda en cuestionar que el gobierno del estado no haya aportado los recursos que le solicitó el Consejo para que las campañas fueran decorosas, pero dice no tener elementos para señalar el motivo que tuvo el gobierno para negarse a la solicitud. ``Sólo nos dijeron que no había dinero'', explica.

Reflexiona también sobre los cambios que necesita la ley, ``sobre todo elaborar un reglamento en cuanto a las figuras de referéndum y plebiscito que contiene la ley''.

Tampoco elude responder a los señalamientos, principalmente priístas, que en más de una ocasión lo han identificado como funcionario cercano al gobierno panista del estado.

Con una risa franca, Barceló Moreno recuerda y responde: ``Hace tiempo decían que yo era priísta porque fui amigo de la familia Colosio, porque estudiamos juntos con Luis Donaldo. Y ahora dicen que soy panista''. Sostiene que nada de esto es cierto y que en su cargo no busca atender ni salvaguardar intereses ni del gobierno ni de algún partido. ``Trabajamos para la sociedad y para que haya un proceso transparente'', asegura.

--Algunos priístas dicen que usted es compadre del gobernador panista de Jalisco, Alberto Cárdenas Jiménez --se le comenta.

Barceló vuelve a reír, pero ahora con mayor fuerza.

``A Alberto Cárdenas lo he tratado en cuatro ocasiones en toda mi vida. Y antes de que fuera designado para este cargo sólo había tenido contacto con él una ocasión y en forma casual, cuando tuve que suplir a un compañero periodista en una entrevista en cabina. Luego, ya como presidente del Consejo, únicamente lo he tratado en tres ocasiones''.

Se le pide su opinión sobre diversos hechos ocurridos en la parte final de las campañas, como la filtración que hizo el gobierno panista a un medio nacional sobre un proceso judicial en contra del ex gobernador Guillermo Cosío Vidaurri, la demanda de juicio de los priístas contra Cárdenas Jiménez, e incluso las descalificaciones del PRI al proceso por el asunto de las boletas.

``Todo ello --dice Barceló-- son situaciones que no abonan en favor del proceso electoral''. Por ello, pide a los partidos no mezclar asuntos que no tienen que ver con el proceso y que tampoco incurran en descalificaciones sin fundamento.

El funcionario demandó a los partidos jugar limpio y no sólo acatar las normas de la legislación electoral, sino también ``las reglas éticas de la políticas'', pues sostiene que no es cierto que ``todo se valga en la guerra, ni en el amor, ni en las elecciones''.

``En todo debe haber reglas y ética. A mí me queda muy claro que las normas de la ética política van encaminadas a facilitar el conocimiento de la oferta política y el accionar de quienes participan en estos procesos como políticos o como autoridades electorales''.

Asimismo, pide a los partidos dejar a la ciudadanía que reflexione con tranquilidad en los tres días que faltan para los comicios y no entrar en ese ``torbellino político que los lleva y los trae'', y les reitera la necesidad de que den muestras de madurez a fin de responder a las responsabilidades que la ciudadanía ha dejado hasta ahora en sus manos.

Advierte que si los partidos políticos no modifican sus inercias la sociedad los va a rebasar, y va a llegar el momento en que la sociedad reclame que los puestos de elección popular sean a propuesta directa de los ciudadanos y no por la vía de los partidos.