La Jornada 25 de noviembre de 1997

Negociaría el PRI bajar el ISR, pero no el IVA

David Aponte Ť El PRI mantiene su postura de que el Impuesto al Valor Agregado (IVA) ``no debe bajar'' o tener modificación alguna. Sin embargo, analiza la posibilidad de reducir el Impuesto Sobre la Renta (ISR) y promover una baja en los precios de servicios y productos como la energía eléctrica y el gas doméstico, informó ayer el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Angel Aceves Saucedo.

Las propuestas de PAN y PRD --una baja en la tasa del IVA-- son ``retóricas'' y las presentan como ``un menú sin precios''. Son parte de un discurso para ``ganar y no para administrar''. En la práctica no resuelven la situación de la mayoría de los mexicanos: ``son como una invitación a una fiesta gratis y sabemos que no hay fiestas gratis'', criticó.

El también asesor económico del Comité Ejecutivo Nacional del PRI dijo a los periodistas que solicitará a la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados que las discusiones sobre la Ley de Ingresos y del Presupuesto de Egresos sean públicas, para que los medios observen quiénes son responsables, quienes no y quiénes ``buscan el aplauso efímero''.

Después de algunos cabildeos, el PRI dio a conocer a los medios que mantiene su posición, pero con algunas variantes, como la reducción del ISR y la baja en el costo de la energía eléctrica y el gas doméstico, que favorecerían a los sectores de más bajos ingresos.

En conferencia de prensa, Aceves Saucedo aseguró que una modificación de los ingresos del gobierno federal traería graves costos políticos para la nación entera. No obstante, el PRI no tiene una posición de ``cerrazón'' o ``irreductible'' en otros renglones.

``Ya hemos señalado que por convicción, por razones técnicas probadas con cálculos, no es conveniente reducir el IVA ni en un punto. En contrapartida, la flexibilidad se da en que sí hay posibilidad de aliviar la carga fiscal en ISR a empresas y a personas físicas, y también de estudiar las tarifas de energía eléctrica en forma focalizada.

``El costo político es que se paralizaría no solamente al gobierno, sino al país. Y este es un costo que los partidos que aspiran al poder y que nosotros que aspiramos y conservaremos el poder no podremos de ninguna manera meter en nuestros cálculos'', expuso.

Como lo han expuesto las autoridades hacendarias, comentó que 20 por ciento de los mexicanos con más bajos ingresos destina 65 por ciento de su gasto a productos y servicios que no tienen IVA, como alimentos, medicamentos y educación. Por otra parte, reducir el impuesto de 15 a 10 por ciento representaría 30 mil millones de pesos de las participaciones a estados y municipios, agregó.

El legislador también recordó la propuesta priísta hecha en el mes de octubre y que contiene algunos incentivos en la materia: eliminación de las máquinas de registro fiscal, reducción del periodo de auditorías de ocho a seis meses, otorgamiento de mayores plazos para la entrega de la declaración fiscal e introducción del concepto de ``dolo'' para que las declaraciones no sean motivo de delito si no existe ese elemento.

Durante su exposición y en el curso de la sesión de preguntas y respuestas consideró que no es prudente retirar el apoyo a las instituciones bancarias o desaparecer el Fobaproa, porque repercutiría en la situación de los mercados. Entonces, ``la crisis de 1994 sería un juego de niños'', comentó.

Aceves agregó que la propuesta del PRI está sustentada en el manejo de finanzas públicas, el combate a la inflación y el mantenimiento de mercados estables, y opinó que las iniciativas saldrán adelante sin necesidad de un periodo extraordinario de sesiones.