Ante rezagos, pide el CT modificar la política nacional de empleo

Fabiola Martínez Ť El Congreso del Trabajo (CT) demandó al gobierno federal la modificación de la política nacional de empleo ``para atacar los enormes rezagos estructurales en la materia'' y prevenir, ante los cambios industriales, la desocupación masiva.

En el documento que será presentado mañana en asamblea extraordinaria, el CT solicita la autorización de incentivos fiscales --para la generación de puestos de trabajo-- que beneficien a la pequeña y mediana empresas, y cambios a la ley para la protección de los desempleados, en caso de cierre de unidades productivas.

Asimismo, urgió al gobierno que promueva convenios con Estados Unidos y Canadá para contratar mano de obra y apoye programas de trabajadores agrícolas migratorios, ``sin olvidar la incorporación del sector informal de la economía, a una nueva institucionalidad para incrementar el empleo''.

A la banca privada y de desarrollo la conmina a crear cajones de financiamiento, particularmente para la pequeña y mediana empresa, y a la Secretaría de Hacienda a continuar con las acciones de desregulación para la ampliación o creación de nuevas empresas.

Según el último reporte de la Secretaría del Trabajo, por medio del Servicio Nacional de Empleo fueron colocados 111 mil 326 buscadores de puestos de trabajo de un total de 352 mil 784 solicitudes, y se otorgaron 87 mil 574 becas de capacitación para desempleados.

La tasa de desempleo abierto se ubicó en octubre en 3.2 por ciento de la población económicamente activa (PEA). Al mes de julio de este año el personal ocupado en la industria manufacturera alcanzó 1.3 millones de trabajadores; en las plantas maquiladoras de exportación 908 mil, y en el sector comercio 469 mil. En tanto, el IMSS reportó poco más de 9.6 millones de asegurados permanentes.

Estas cifras, considera el CT, ``son alentadoras''; sin embargo, es necesario impulsar más y mejores programas para afrontar el problema del desempleo.

``Se requiere emprender un enérgico y coherente programa para conservar los empleos ya existentes y alentar la permanencia de los generados en el proceso de modernización, al articular oferta y demanda, y proyectos de capacitación'', precisa el documento.

Propone además la eliminación de ``rigideces'' en el mercado laboral en aspectos de productividad, contratación colectiva, capacitación y readiestramiento, y proyectos de inversión para el trabajo rural.