Palacios Alcocer deslinda al PRI del grupo armado Paz y Justicia

Elizabeth Velasco C. Ť El presidente del PRI, Mariano Palacios Alcocer, se deslindó de la agrupación priísta Paz y Justicia que ha protagonizado hechos de violencia y agresión contra comunidades indígenas en el norte de Chiapas, y se pronunció porque se acelere el diálogo entre las partes en conflicto para lograr la paz en aquella entidad.

Aseguró que su partido ``desconoce, desautoriza y se deslinda'' de cualquier grupo que utilice la violencia como forma de reivindicación de sus derechos y que so pretexto de alcanzar fines pacíficos utilice como método la agresión.

``El PRI es un partido que aboga por la legalidad, el diálogo, el entendimiento racional entre las partes en conflicto y nos pronunciamos porque se intensifique el diálogo en la búsqueda de la paz'', dijo, tras subrayar que la discusión del tema de los derechos y cultura indígenas es uno de los fundamentales del país.

El dirigente priísta fue entrevistado al término de un encuentro que sostuvo anoche con el presidente de Argentina, Carlos Menem, en céntrico hotel capitalino.

Antonio González Vázquez, corresponsal, San Luis Potosí, SLP, 26 de noviembre Ť Carlos Tello Macías, director del Instituto Nacional Indigenista (INI), dijo que en Chiapas las partes en conflicto -EZLN y gobierno- deben hacer lo que esté de su parte para reiniciar el diálogo, pues desde que se suspendieron las pláticas la violencia ha ido en aumento.

Indicó que cuando se mantenía el diálogo entre el gobierno y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional, se buscaba la paz y no había violencia. Lamentablemente, las conversaciones se suspendieron y la violencia comenzó a crecer. Debemos hacer lo que esté de nuestra parte, todos, para reiniciar el diálogo.

Por otra parte, señaló que son insuficientes los recursos económicos destinados al apoyo de la población indígena del país -alrededor de 10.5 millones-, que enfrenta grados extremos de pobreza. Indicó que para este año el INI ha tenido recursos por 900 millones de pesos, lo que habla de un presupuesto con el cual es imposible lograr disminuir las condiciones de extrema pobreza de los indígenas.