Colaboración con ONG, recomiendan ombudsman de 64 países

Triunfo Elizalde, enviado, y Luis A. Boffil, corresponsal, Mérida, Yuc., 29 de noviembre Ť En tanto que presidentes, defensores, comisionados y ombudsman de 86 países reunidos aquí recomiendan que las instituciones gubernamentales de derechos humanos trabajen conjuntamente con las ONG, porque éstas cuentan con fuentes de información que ``por distintas razones no se hacen presentes en las instancias públicas'', la Secretaría de Gobernación rechazó ``cualquier injerencia en asuntos internos bajo el pretexto de la defensa de los derechos humanos, venga de donde venga''.

Fernando González Salas, subsecretario de Desarrollo Político de esa dependencia, dijo que de cara al siglo XXI todos tienen la obligación de refrendar los compromisos adquiridos a nivel internacional y trabajar para que la defensa de los derechos humanos sea la vía para que en todas las latitudes se respete a plenitud la dignidad de cada individuo, ``nunca para tomar nuevas formas de injerencia en los asuntos internos de los Estados o propiciar situaciones disgregantes en las comunidades nacionales''.

Por su parte, los participantes al cuarto Taller Internacional de Instituciones Nacionales de Promoción y Protección de los Derechos Humanos manifestaron en el documento final de su reunión de tres días su voluntad para coordinar las acciones de promoción y defensa de los derechos con los organismos no gubernamentales que tienen objetivos y propósitos afines a los de las instituciones públicas de derechos humanos de cada país.

``Estas organizaciones -las ONG- constituyen una fuente privilegiada de información sobre las violaciones que por distintas razones no se hacen presentes en las instituciones públicas. Además, participan en -y lo favorecen- un intercambio con la población para resolver sus problemas relativos a derechos humanos.''

En representación del secretario de Gobernación, González Salas expresó: ``No cabe duda que el espíritu de complementaridad y corresponsabilidad entre la sociedad y el gobierno siguen siendo el criterio más válido para afrontar la problemática de los derechos humanos en la época contemporánea.''

Luego de señalar que es lamentable e inaceptable que aún no se logre superar una situación insatisfactoria de violaciones a derechos humanos, consideró que es decisión del gobierno preservar y ampliar los derechos y libertades civiles, políticos, sociales, económicos y culturales ``para cumplir responsablemente con los principios de justicia, soberanía, democracia y libertad que le dan identidad al Estado mexicano''.

Por su parte, los defensores de derechos humanos de 86 países presentes aquí señalaron en la Declaración de Mérida que la libertad, la justicia y la paz en el mundo tienen por sustento el reconocimiento de todos los miembros de la familia humana y llamaron a reconocer que el subdesarrollo constituye un obstáculo para el disfrute pleno y efectivo de los derechos en perjuicio de personas pertenecientes a los estratos más débiles, que son los más desprotegidos, en particular mujeres, niños y grupos vulnerables.

Ratifican su exhorto a los Estados a reconocer el origen, magnitud y trascendencia de los flujos migratorios que involucran a millones de personas, piden que se hagan esfuerzos reales por acabar con el desempleo que origina la migración masiva, y como instituciones nacionales apuntan la urgencia de adoptar, a través de la ONU y ``mediante un diálogo renovado entre los Estados y las organizaciones no gubernamentales, una declaración sobre la defensa de los defensores de garantías amenazados frecuentemente en sus derechos a la vida y a la libertad''.

Al término de los trabajos del cuarto Taller Internacional de Instituciones Nacionales de Promoción y Protección de los Derechos Humanos, realizados en esta ciudad del sureste, el gobierno de Francia otorgó una medalla de reconocimiento a la doctora Mireille Roccatti, presidenta de la CNDH, por su labor en la materia.